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Sasuke después de haber conseguido un hospedaje para pasar la noche, se quedó pensado en la mujer qué el creía no era la que en algún momento había amado.
Pero de todas formas, el había visto morir a Shion e incluso vio morir a su a animal favoritos de invocación, no podía ser posible que ella siguiera viva, si el había presenciado todo.
Incluso habían pasado unos cuántos años, muchos para Sasuke, aunque el creía que todo lo que había pasado con Sasuke había sucedido prácticamente ayer.
Simplemente para Sasuke le era imposible el qué Shion estuviera viva, lo más probable es qué esa mujer y Shion tuvieran el mismo nombre... y casi la misma apariencia... no es que eso ya era mucha coincidencia, almenos para él.
Y en el caso de que fuera la Shion qué el conocía, ella no parecía acordarse de él, era cierto que Sasuke había cambiado, tanto como personalidad y físicamente.
Pero él le había dicho su nombre, y Sasuke no había captado ninguna emoción en el rostro de la mujer que lo hiciera confundirse.
Por lo qué después de varias opciones y pensamientos, decidió buscar a la mujer al día siguiente.
Sasuke había vuelto al mercado, preguntando puesto por puesto, si conocían a una mujer llamada Shion que tenía una hija igual a ella.
Sasuke no se demoró mucho en tener respuestas, al ser un pueblo pequeño y con pocos habitantes, todos se conocían muy bien y varias veces se ayudaban los unos a los otros.
Un anciano qué atendía un puesto, le escribió las direcciones qué Sasuke tenía que tomar para llegar a la casa de la supuesta Shion.
Tomando el papel comenzó su rumbo llegando así a una casa muy colorida y humilde.
Así qué respirando profundamente Sasuke golpeó la puerta de aquella casa para que porfin quedará sin dudas.
