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Capítulo 2: Nada se rompe como el corazón 

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Capítulo 2: Nada se rompe como el corazón 

Aquel chico abrió sus ojos poco a poco, miró una luz muy blanca que lo encandiló, se talló los ojos y trató de sentarse, mirando a su alrededor dándose cuenta que estaba en un hospital. Una enfermera que justo abrió la puerta se acercó rápidamente a él.

—¿Estás bien? —preguntó preocupada, ayudándolo a acomodarse.

—Eso creo —susurró. —Pero, ¿Qué fue lo que pasó? —preguntó frunciendo el ceño muy confundido.

—¿Qué es lo que tu recuerdas Tom? —preguntó tomando su registro.

—Yo... recuerdo... —dijo pensativo. —¡La tormenta! ¿Dónde están los demás?

—Thomas... —hizo un silencio. —Me temo que, fuiste el único sobreviviente de aquella embarcación, lo lamento mucho —susurró la enfermera con tristeza.

Para nadie era normal dar malas noticias, y aunque no lo pareciera para ella era triste ese tipo de situaciones, ella conocía a Tom por ser un agradable chico, ella siempre iba y compraba frutas en su puesto, el cual lo mantenían él, su abuelo y Harrison, el mejor amigo de Tom y su hermano de corazón. No eran amigos, pero si conocidos, todo el pueblo sabía lo unidos que eran aquellos chicos, por lo cual sería algo increíblemente doloroso para Tom la pérdida de su hermano.

Tom la miró con asombro, se quedó en estado de shock, sus ojos se llenaron de lágrimas y comenzó a derramarlas, soltó un grito desgarrador mientras lloraba, comenzó a tirar las cosas de su al rededor, comenzó a alterarse, la enfermera derramó lágrimas, salió corriendo a buscar un doctor. Los doctores y otra enfermera llegaron a la habitación, donde encontraron un desastre y a un Thomas con ojos rojos, llorando desconsoladamente, tirando las pocas cosas que había a su al rededor.

Las enfermeras lo tomaron de los brazos mientras el doctor le inyectó un sedante, Tom se sintió tranquilo, sus ojos se cerraban poco a poco, pero aún sentía ese horrible dolor en el pecho como si le hubieran sacado su corazón. Cerró los ojos completamente, estando sedado lo acomodaron en su cama, las cosas las pusieron en su lugar y lo dejaron que durmiera tranquilo, mientras la enfermera miraba por la ventanita de la puerta, limpió sus lágrimas y lo dejó ahí.

[...]

—Abuelo, dime que es mentira por favor —suplicó entre llanto tomando a su abuelo de los hombros.

Aquel hombre adulto con lágrimas en sus ojos negó, Tom bufó al ver la respuesta, limpió sus lágrimas mientras algunas más caían. Su abuelo trató de tranquilizarlo, pero no lo logró, su nieto le pidió que le dijera la verdad y con el dolor de su alma y entre llanto así lo hizo, pero justo cuando escuchó aquello, el chico salió corriendo.

—¡Espera! ¿A dónde vas? —preguntó Dan, su abuelo.

El chico corrió como si alguien lo estuviera persiguiendo, pero era su manera de desahogarse, de sacar aquel horrible dolor que estaba sintiendo en ese momento, mientras las palabras que le dijo su abuelo se le venían a la mente 

"Mientras tu estuviste en el hospital por varios días sin despertar, no tuvimos muchas noticias de las personas que iban en la embarcación, gracias a dios aquel señor te encontró y llamó al hospital. Hasta que un día, la marina encontró la ropa que llevaba puesta Harrison junto a su collar, lo enterramos junto a su madre"

Tom llegó a la lápida donde tenía el nombre de su mejor amigo, el se hincó y comenzó a llorar de una manera imparable, sentía un dolor horrible en su pecho, se golpeaba varias veces culpándose a si mismo por la muerte de su mejor amigo, así pasaron varios minutos, aún no creía que estaba en su lápida, sus lágrimas seguían cayendo sin cesar.

—Te extrañaré toda mi vida —susurró entre el llanto. —Perdón por haberte dejado solo, te amo hermano 

Dicho eso se paró de ahí, regresó caminando a casa a paso tranquilo, ya no caían lagrimas pero ese horrible dolor ahí lo sentía, algunos recuerdos con él se le venían a la mente, a veces sonreía con nostalgia o a veces alguna lágrima caía. Al regresar a casa, abrió la puerta y escuchó el ruido de la televisión, cuando caminó a la sala se dio cuenta que había un periódico que de título decía Único sobreviviente del barco tempestad. Tomó el periódico y lo aventó.

Ocean Eyes [Tom Holland]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora