Capítulo 1: Inmorales

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Sábado 18 de julio de 2020
365 días antes de...

N O V A

Música, alcohol, sexo y algunas drogas.

Gente bailando, besándose, yendo a los baños creyendo que nadie los ve. Cuando en realidad si los ven, pero solos los miran porque desean hacer lo mismo con la persona que tienen en frente. La pasión, la euforia, la adrenalina, el descontrol y la lujuria se sienten en el aire como una brisa pesada que nubla los sentidos de las personas dentro de este club.

Este lugar, este ambiente y estas personas podrían ser el oasis de cualquier persona, menos el mío.

—Joder, ¿qué hago acá? —suelto una maldición al aire mientras bebo de mi jugo.

Giro mi cabeza a los sofás que construyen el apartado. Deseo salir corriendo cuando veo a una mujer que definitivamente no vino con nosotros arriba de Valeska, besándola apasionadamente justo a mi lado.

Mierda, soy el mal tercio.

Miro la pista de baile otra vez con cansancio. Debí advertir que Valeska solo me traería para no estar sola antes de coquetear con alguna chica.

El asiento se hunde a mi lado y veo a Vike sentarse a mi lado, un tanto sudado. Agarra la botella de tequila de la mesa y la lleva a su boca para tomar un trago directo de esta.

—Oye, no bebas demasiado —lo detengo—. No quiero llevarte a casa arrastrando como la otra vez.

Vike se quita la botella de los labios y me sonríe.

—Nuestra querida Nova no se está divirtiendo al parecer —juguetea apretando mis mejillas.

Golpeo suavemente sus manos para que suelte mis mejillas que comenzaron a picar.

—Ya sabes, estos lugares realmente no son lo mío. Por la única razón por la cual no salgo de este lugar es porque prometí llevarte a casa.

—Claro, eres la mejor de todas y teniendo en cuenta que tienes dos pies izquierdos y una horrible resistencia al alcohol, podría decir que es cierto que estos lugares no son lo tuyo —se ríe de mí.

—¡Oye! Mi resistencia al alcohol no es tan mala —me mira fijamente, casi acusatoriamente—. ¡Está bien, sí lo es! —Vike no se aguanta la risa y la suelta explosivamente, contagiándomela.

—¿Hoy tendrás acción? —pregunta alzando sus cejas.

—No lo creo, no estoy interesada en tener acción hoy. Estoy averiada.

—Mierda, cuanta fuerza de voluntad tienes —me rio—. Sigue el consejo de tu amigo, Nova y rompe esa abstinencia. Hoy diviértete a pesar de que este lugar no sea de tu agrado, busca la manera en la que lo sea. Saca a esa Nova universitaria, a veces la extraño.

—Lo pensaré —respondo y Vike parece feliz con mi respuesta—, pero no aseguro nada.

Después de comenzar a trabajar y crear mi vida independiente; las fiestas y todo lo que conlleva pasaron a ser algo irrelevante en mi vida. Mi enfoque se fue directamente a mi trabajo, vida laboral y crecimiento personal.

Fueron mi prioridad hasta el día de hoy y no me siento mal por hacerlo, por poner mis sueños antes que todo.

—¿Cuánto lleva Val en lo mismo? —pregunta mirando a mi lado.

Muevo la cabeza mientras cuento.

—Yo diría que unos siete a ocho minutos —tanteo.

—Wow, eso es realmente mucho tiempo. ¿Estará bien? Normalmente se las lleva al baño a los 3 minutos —comenta mirándola.

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