Destino.

Una vida junto a ti.

Takemichi sonrió al ver entrar al alfa por la puerta. Desde hace cinco meses, ellos ya eran una pareja oficial. Naoto le suplicó al Omega renunciar a su trabajo, Takemichi aceptó, aunque no estaba muy seguro. Después Naoto lo llevó a vivir a su casa; a las afueras de la ciudad. Naoto iba enserio con el Omega, era cierto que, ambos eran jóvenes, pero, el alfa quería formar una familia de inmediato con el Omega. Takemichi estaba feliz, Naoto Tachibana lo llevó a vivir con él.

Muy pronto se casarían, sin mencionar que, el Omega estaba en cinta. Cuando Naoto descubrió lo del embarazo de Takemichi; se sintió tan feliz. Ahora tendría la familia que siempre quiso. El Omega de inmediato se acercó a su novio y le dió un beso en la mejilla.

—Bienvenido a casa —agregó, mientras recibía el saco de su alfa. Naoto sonrió. Era agradable tener la compañía de alguien en casa, Naoto en sí, antes de conocer a Takemichi se la pasaba sólo. Pero ahora, tendría una familia para que le hiciera compañía.  Cómo siempre, el Omega le sirvió la cena al alfa y ambos empezaron a conversar.

Takemichi ahora tenía una vida distinta. Antes sólo trabajaba y volvía a casa, pero ahora, tenía que atender a su novio. Pero claro, tratándose de Naoto, no habría problema alguno. Ambos estaban felices, eran jóvenes, Naoto tenía un trabajo estable y muy pronto se casarían y tendrían un bebé. Takemichi sonrió y, le contó una que otra anécdota al alfa de lo que había hecho en  casa, Naoto se limitó a sonreír; era agradable ver qué, su novio era feliz aquí.

—Sí, el súper mercado fue agotador —añadió con una sonrisa, mientras le daba otra cucharada a su plato —¿Cómo estuvo el trabajo? —cuestionó con calma. Naoto volvió a sonreír y, se limitó a sacar algo de su bolsillo.

—Estuvo bien —agregó, al poner dos entradas sobre la mesa del comedor. Naoto en sí, quería salir a pasear con su prometido; sentía que, lo sugestionaba demasiado y, ambos necesitaban un descanso. Desde que Takemichi se fue a vivir con él; el Omega se encargaba de todas las tareas del hogar y, ya no salían a divertirse.

—¿Qué es? —cuestionó el Omega.

—Son dos entradas para el cine —añadió con una sonrisa —¿Takemichi, quieres ir al cine conmigo? —cuestionó. Al omega se le iluminaron los ojos, desde hace tiempo que, ya no salía a citas con Naoto; tanto que, creyó que, Naoto ya no lo quería por estar embarazado.

—Sí, si quiero, Naoto —mencionó, al levantarse de su asiento y, abrazar a su alfa. Naoto sonrió y besó su mejilla. Sería una linda noche para ambos. El Omega fue de inmediato a su habitación para vestirse.

Al entrar al cine, el alfa tomó la mano de su Omega; verían una película romántica que estaba de estreno. Al alfa le encantaba ver feliz a su omega. Takemichi estaba entusiasmado; tenía al mejor alfa de todos. Naoto siempre lo cuidaba y, aunque no decía abiertamente que lo amaba; él sabía que, lo quería mucho.

—¿Quieres palomitas? —cuestionó el alfa al Omega. Takemichi sonrió —. De acuerdo, voy por ellas.

Al regresar del mostrador. Naoto se topó con la sorpresa de que, Takemichi estaba en compañía de alguien más. Takemichi le sonrió una vez más a Sano Manjiro. Cuándo Naoto se fue, el Omega accidentalmente se tropezó con alguien y, para su sorpresa, ése alguien, era su ex novio de la secundaria (Mikey). Takemichi no era descortés, así que, de inmediato se disculpó y lo saludó.

Naoto frunció el ceño ¿Por qué su  Omega actuaba con tanta familiaridad con ese alfa? De tan solo ver a Takemichi sonreír para alguien más; lo hacía sentir furioso. Takemichi de inmediato se despidió de Mikey al ver que su prometido se acercaba a  ellos. El Omega sabía de lo celoso que podía llegar a ser su alfa.

—¿Quién era?  —cuestionó con el semblante serio. El Omega sabía a quien se refería. Takemichi optó por decirle la verdad; no quería tener secretos con su alfa.

—Bueno, yo… era mi exnovio, pero, no te preocupes —añadió con una sonrisa nerviosa —, ya no hay nada entre nosotros.

—¿De verdad? —se le acercó con una mirada asesina —, pues… no lo parecía —mencionó. Takemichi de inmediato se estremeció; nunca había visto esa parte de su amado alfa. Naoto de inmediato se alejó de su Omega; no planeaba asustarlo.

—T-te juro que, no hay nada —mencionó con miedo. Naoto suspiró con pesadez, aunque el tipo no le agradaba, confiaba en su Omega. El alfa de inmediato le dió las palomitas al Omega y, ambos prosiguieron a ir a ver la película.

Aunque en sí, Takemichi no estaba del todo tranquilo, ver a su alfa en ese estado lo asustó mucho. Naoto sabía que, no había de que preocuparse, pero,  ese tipo no le daba buena espina. Takemichi tampoco le veía buena pinta a Mikey, el alfa se veía bastante temible ahora.

Al salir del cine, ambos chicos se volvieron a tomar de la mano. Takemichi no sabía si, Naoto seguía enojado con él ó ya no, pero, si lo tomaba de la mano; era una buena señal. Ambos iban caminando por la calle (ya que, su casa quedaba muy cerca). Cuándo en eso, una motocicleta; se detuvo delante de ellos. La persona abordo, de inmediato se paró y caminó hacia ellos, solamente para quitarse el casco. Takemichi tragó saliva al ver a Mikey una vez más.

El de los ojos negros sonrió, para después, ver fijamente al Omega. Naoto frunció el ceño, se supone que, Takemichi le había dicho que, no había nada entre ellos dos.

—Mikey… —susurró el Omega, mientras sentía la mirada llena de enojo de Naoto sobre él. Mikey sonrió, para después, acercar su mano a la mejilla del Omega.

—Takemichi —mencionó. Naoto de inmediato reaccionó y, alejó la mano de ese sujeto de  su  omega. Naoto estaba enojado ¿Cómo se atrevía ese alfa tocar a su Omega?

—No lo toques —añadió Naoto con cara de pocos amigos. Takemichi tragó saliva al ver a ambos alfas viéndose con cara de querer matar al otro.

—Esto… ¡¿Mikey qué haces aquí?! —cuestionó confundido. Mikey soltó una carcajada; la mirada de Takemichi siempre le hacía gracia; desde que él se había topado con el Omega, un fuerte sentimiento se apoderó de él; era cómo si, quisiera recuperarlo pero, lo único malo es que,  su Omega estaba marcado y sus hormonas revelaban un embarazo. Pero aún así, no le importó; quería a  su  Omega de vuelta.

—Te quiero de vuelta —añadió ignorando la presencia de Naoto —. Le pregunté a tu madre por ti, me dió tu ubicación pero, no había nadie viviendo ahí. Así que, fui al cine a pasar el rato y, te vi ahí. Al inicio iba a besarte pero, vi que tenías una marca y, hueles a embarazo —mencionó con calma —. Quise dejarte en paz pero, no puedo controlar mis sentimientos, Takemichi —agregó.

El Omega no sabía que decir, era cierto que, había amado a Mikey y se la había pasado increíble con él en su adolescencia. Pero ahora, había otro alfa que amaba e, incluso, iba a tener a un hijo suyo. Aunque Mikey había Sido bueno con él y lo seguía siendo, el Omega ya no lo amaba. Naoto veía todo esto en silencio, aunque él estuviera enojado; trataba de controlarse para no asustar a su prometido embarazado.

—Mikey, eres un gran sujeto, siempre cuidaste de mí en el pasado pero —tomó la mano de Naoto—, ahora amo a alguien más, espero que, puedas entender y respetar mi decisión —añadió.

Mikey sonrió, aunque le encantaría entrar en una pelea con ese alfa, no quería asustar a su Omega. Así que, sólo se limitó a aceptar la derrota.

—Bien —añadió, al acercarse al Omega y abrazarlo —. Pero, si este tipo un día te hace algo, siempre puedes contactarme —le susurró al oído. Takemichi rió nervioso, pero sabía que, Mikey lo decía enserio.

No soy fan de Tokyo revengers, pero, desde que vi el primer capítulo, mi prima y yo shipeamos a Naoto x Takemichi. Ósea, Naoto le salvó la vida (lo cuál no lo tengo muy claro, ya que, había muerto en el primer futuro). Por Naoto, Takemichi regresó al pasado y conoció a Mikey y Draken y, al resto. Ósea, por Naoto es que, el resto de Shipp de Takemichi son posibles (¿?).