Odioso.

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Chifuyu Matsuno suspiró con pesadez, para después ver fijamente a su esposo a la cara. Ya había pasado más de las cinco, lo que significaba que, ahora ya no tendría ni una sola pizca de tolerancia por su "jefe". El Omega lentamente se acercó a su esposo, para después dejarle ir una bofetada. Baji no se notó sorprendido por ello, Chifuyu siempre hacía eso cuando se enojaba con él. Lo único que lo desconcertó fue el motivo, a lo mejor había hecho algo que lo enfadó sin darse cuenta. El motivo del enojo del Omega era que, su esposo estuvo de boca floja para alardear en la reunión de hoy y, le había dicho a sus socios una que otra cosa de su secretario.

Aunque estaban casados, Chifuyu le pidió que mantuviera su matrimonio en secreto. El Omega no hubiera querido que sus padres supieran que "estaba relacionado con su jefe" de esa manera. De seguro se avergonzarían de él por creer que cayó tan bajo.

-Desgraciado -agregó avergonzado recordándole lo que el alfa había comentado de él en la junta con sus socios. Baji lo vió desconcertado, sus secretarias se habrían sentido halagadas de lo que él hubiera dicho de ellas pero al parecer Chifuyu no toleraba eso, el Omega se notaba ofendido y muy avergonzado. El alfa sólo rodó los ojos restándole importancia, pensando que el Omega sólo exageraba.

-¿Qué? Pero si sólo dije que...

-¡Cállate! No lo digas -gritó con enfado, el Omega se sentía tan denigrado ¿Acaso Baji no conocía el significado de la palabra discreción? ¿Cómo se atrevió a hablar de su intimidad en la cama tan a la ligera?-. Soy tu esposo, lo que tú y yo hagamos es asunto nuestro -mencionó enojado, mientras sentía sus ojos humedecerse.

El Omega era tan profesional que, estuvo guardando todo el día sus emociones para este momento. Sí, para el momento que Baji y él no eran jefe y empleado. Chifuyu esperó tanto tiempo para encararlo, el Omega no toleraba eso, era una gran falta de respeto viniendo de su esposo. Baji se sorprendió por la reacción del Omega, Chifuyu rara vez se quebraba delante de él.

El omega siempre actuaba rudo y que podía con lo que viniese. Chifuyu se maldecía por sentirse tan vulnerable en este momento, maldito Baji y su indiscreción. El alfa lentamente se acercó a él, odiaba cuándo su Omega se ponía así. Chifuyu sintió cómo el más alto lo abrazaba. Aunque a veces Baji podía ser un desgraciado, era el desgraciado que amaba. El Omega correspondió al abrazo del alfa. Tenían un gran tiempo casados pero, su relación era un secreto, aunque Baji nunca comprendió el porque debía permanecer ocultos, ante la sociedad lo de ellos era algo normal.

Pero Chifuyu sabía que, eso sería algo vergonzoso para él, se supone que le hizo la promesa a su madre de que jamás se casaría con un alfa y que en su lugar sería un secretario respetable. Qué trabajaría por y para él. El Omega jamás pensó en acabar así, casado con el peor jefe del mundo, con Baji Keisuke. Pero, poco a poco se dió cuenta de que Baji Keisuke era una gran persona. Aunque su relación fue muy difícil al inicio, el alfa parecía no querer renunciar a él, lo quería y amaba, aunque claro, el alfa demostraba su "amor" de una manera muy extraña.

En defensa de Baji; él jamás tuvo una relación seria y mucho menos un matrimonio, así que, no sabía cómo actuar con su esposo. Por lo general siempre difamaba a sus secretarias de esa manera y ellas nunca dijeron nada de ello, simplemente se fueron y ya. Pero, desde que conoció a Chifuyu, parecía tener una pizca de empatía por alguien más. Se preocupaba por el omega. Ese sentimiento siempre fue extraño para Baji Keisuke.

-Lo siento -fue lo primero que soltó el alfa al ver que su omega había dejado de sollozar. Chifuyu sentía un poco de consuelo al saber que le pidieron perdón, pero aún así, la humillación no se iba tan fácilmente. El Omega se separó lentamente, para después limpiar sus lágrimas.

-Está bien -susurró mientras sacaba un pañuelo de su bolsillo -. Vamos a casa -añadió para volver a su tono neutro. Baji asintió, para después dirigirse hacia la puerta, Chifuyu lo siguió sin decir ni una palabra. Aunque Chifuyu le haya dicho que estaba bien, el alfa sabía que, el Omega seguía enfadado con él.

Al día siguiente, el Omega siguió cómo de costumbre, le sonrió a su esposo y actuó como si nada hubiera pasado. Aunque en sí, la noche anterior cuando volvieron a la casa del alfa, el Omega no le dijo nada y simplemente se fue a dormir a una de las habitaciones de huéspedes de la mansión. Baji aunque le hubiera encantado seguir hablando del tema del día anterior, sabía que el Omega lo evadiría como siempre. Chifuyu siempre le había dicho que, si quería hablar un tema personal con él, debían esperar hasta después del trabajo; lo cual fastidiaba a Baji.

-De acuerdo Chifuyu ¿Qué quieres para perdonarme lo que pasó ayer? -cuestionó serio mientras veía al omega servirle el almuerzo. El Omega sólo se encogió de hombros y fingió una sonrisa.

-Asuntos personales fuera del horario laboral, Keisuke-sama -añadió, era más que obvio que no hablaría con su alfa en este momento, Baji solamente frunció el ceño, maldita sea con su Omega y sus políticas. El alfa gruñó para después iniciar a comer.

-Me vale papa tus políticas -añadió molesto mientras lo veía fijamente a los ojos -. Yo soy tu jefe, el que manda, sin mencionar que, soy tu maldito alfa -eso último lo dijo en un susurro. Chifuyu de inmediato borró su sonrisa, aunque le encantaría decirle un montón de cosas a su esposo, esperaría para el anochecer. El Omega se limitó asentir con la cabeza, aunque Baji ya había captado la indirecta.

-Tiene toda la razón, Keisuke-sama -añadió ofreciéndole una sonrisa malévola que hizo estremecer al alfa -. Pero, por el momento me gustaría disfrutar mi hora de almuerzo a gusto -añadió para llevar un bocado a su boca -. Y estoy seguro de que usted también.

Baji suspiró con pesadez, leyendo entre líneas "Deja de joderme". El alfa conocía bastante bien a su esposo, aunque ambos estaban casados tenían una relación muy rara. Después de comer, ambos siguieron trabajando como de costumbre. Cabe mencionar que, Keisuke Baji estaba frustrado y, el hecho de que el Omega lo estuviera ignorando cómo esposo le dolía y lo molestaba mucho. Chifuyu por otra parte, quería hacer sentir mal a Baji, quería que el desgraciado pagara por tener una lengua tan larga; para alardear de su intimidad cómo si nada delante de esos asquerosos alfas.

Sí, el maldito de su esposo había hablado de su intimidad y de su relación cómo si chifuyu hubiera sido una puta barata. Cosa que el Omega no estaba dispuesto a tolerar.

Después del día laboral, Keisuke suspiró con pesadez para ver cómo su esposo se sentaba en el sillón de su oficina. Baji estuvo desesperado para que el día laboral terminara de una vez por todas. Matsuno lo estuvo evadiendo cómo esposo y solamente se limitaba a hablar cuándo era de trabajo. Chifuyu sonrió al ver a su esposo. El Omega sabía que, el alfa se enfadaba cuándo no le prestaban la atención que quería.

-¿Y bien? -cuestionó al ver cómo el alfa se acercaba a él y lo veía fijamente a los ojos -. ¿Hay algo de lo que quieras hablar, Baji? -sonrió. El alfa de inmediato se sentó a su lado, para después agachar la cabeza.

-Lo siento -acción que sorprendió a Chifuyu -. De verdad lo siento -volvió a repetir. Baji estaba sumamente arrepentido, el hecho de que el Omega se hubiera notado distante con él, le dolía. Era sumamente insoportable. A Chifuyu le hizo gracia, era la primera vez que, Baji le hacía una reverencia -. Perdóname, por favor -a Baji que le importaba dejar su orgullo de lado, no iba a tolerar otro día sin que Chifuyu lo tratara como su esposo, sin que ambos comieran a gusto platicando, sin que el Omega dejara que aunque sea besara su mano en el trabajo.

-Baji -susurró para tomar su mano. El alfa sintió tanta tranquilidad, eso era una buena señal -. De acuerdo -añadió, para después besar la mano de su esposo, Baji se sintió aliviado, Chifuyu parecía que lo había perdonado realmente. El alfa sonrió para levantar la vista, solamente para encontrarse con una mirada asesina en el rostro de su esposo -. Pero, si vuelves a andar de desgraciado otra vez, diciendo esto y lo otro de mí;  renuncio.

Pregunta: ¿Cuál creen que sea la pareja más "sana" de esta historia? Recuerden que hay tres. :)

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