Prohibido Estar Contigo

Anhelo

El tiempo me parecía eterno, la angustia me estaba llevando al límite. No podía concebir el hecho que Ji estuviera mal nuevamente y que no pudiera verlo en el hospital de nuevo.

Al llegar hasta su apartamento, corrí directamente hasta este. Aquellos recuerdos volvieron, hacía mucho que no venía hasta este lugar a verlo.

—Hyun. — llamé.

No hubo respuesta, eso me desesperaba, ¿qué pasaría si el se había hecho algo? ¿y si el ya no estaba? ¿por qué Jiyong dijo aquellas cosas?

—¿Por qué quieres verlo? Creí que...

—El mandó un mensaje y temo por su vida. — susurré.

—Intentaré llamar al portero. —anunció antes de irse por el pasillo.

La desesperación me estaba consumiendo. No quería pensar en lo peor, traté de tranquilizarme un poco, de no pensar en nada malo. Estuve sentado en la puerta de su apartamento cuando lo vi llegar, el parecía distraído como si no supiera que hiciera.

Jiyong ha cambiado, su semblante se ve mustio, su piel es mas clara, está mas delgado de lo habitual, casi puedo notar como su clavícula se marca mas en su piel. En esa delicada piel que alguna vez toqué y marqué con mis labios.

Cuando llegó a la puerta, el no se había percatado de mi presencia, me levanté y ante el hecho el me observó sorprendido y con una sonrisa tímida me recibió.

No había preparado nada para decir sobre mi estadía en el lugar, ¿qué debería decir? No pensé mucho cuando el musitó.

—Seungri. — hubo un silencio entre ambos.

Hacía mucho no pasaba y creía haber dejado de lado los sentimientos hacia el, mi corazón late con fuerza y mis mejillas sé que se tornaron rosa  mientras el me daba su mirada peculiar, aquella que siempre me recibe con ese brillo especial.

—Hyun...yo...

—Si es por el audio, lamento haberte preocupado, estoy bien. — explicó y fue un alivio.

—Si, yo acabo de llegar y fue lo primero que escuché.

—Lo siento.— dijo cabizbajo. — Solo te causo problemas.

Ahi estaba ese Jiyong, el melancólico, no lo veía así desde hace mucho tiempo. Desde que tuvo su problema y junto a Dae fuimos a la comisaría para saber sobre los resultados.

—No es ninguna molestia Hyun. Yo quise venir...

—Seungri, ¿por qué estás aqui? ¿No has llamado a los demás?

—No tuve tiempo, solo vine con mi mánager.

—Oh...entiendo. ¿El está aqui?

—Si, el buscaba al portero. Quería venir a verte y no podía entrar.

Parecía una conversación algo incómoda. Es la primera vez que hablamos de esta forma desde hace tiempo. Pareciera como si apenas nos conociéramos, como si fuéramos unos extraños. Ji puso la contraseña e instó a que entrara dándome el lugar a pasar.