BIGBANG

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Tomé aire y por un minuto cerré mis ojos, con mi mano toqué la manija de la puerta para abrirla y seguido entré.

—Siéntate. — ordenó.

Su voz es firme, su mirada seria. Me observó hasta que tomé el lugar para sentarme frente a el. Se acomodó en su silla poniendo sobre el mueble sus codos sobre este y sobre sus manos su mentón.

—Jiyong.

—Señor...

Dejó la acción primera, me observó de manera fija y pasó hasta mi un sobre manila.

—Abrelo.

Tomé el sobre abriendo y sacando el contenido de este. Eran las fotos con Ri, parecía que se volvía a repetir la historia de la misma manera.

Dirigí una mirada de molestia hacia el, sabía qué se venía.

—Quisiera tener una explicación, pero estas fotos hablan mas por sí mismas, ¿no es así?

—No hay nada que explicar. — respondí.

Dejé sobre el mueble las fotos, el tomó una de estas y la puso frente a mi.

—Bonito anillo. — su mirada fue hasta mi mano.

—No voy a dejar de...

—No hables. — pidió.— No voy a hacer nada ahora, he visto que el tiene el anillo también.

—Eso no tiene nada de malo.

—Solo es un anillo, ¿no es así?— comentó.— Decías eso hasta que dejó de ser así y comenzó a importarte de verdad, en como afectaba contra ti.

—Eso es pasado, ¿esta era su cita? ¿para eso me hizo venir? Si lo hice fue porque usted como los demás obligaron a que hiciera todo esto.

—Si, si fue así. No obstante, no puedes culparnos de lo que ya estaba destruido.

—No, no lo hago, pero ustedes me presionaron hasta llegar a ese punto.

—No lo niego, pero debes reconocer que si eso no hubiese sido de tal forma, tu y el ni siquiera se podrían ver ahora, lo sabes.

Tenía razón, aunque odié que se entrometieran, también he de admitir que sin esa ruptura no habría cambiado nada. Habría seguido la misma situación entre los dos hasta acabar por completo, hasta lograrnos destruir mas de lo que ya estábamos y eso habría sido un caos.

Me observó de nuevo y tomó una foto de las que estaban en el sobre. La observó por unos minutos y se dirigió a mi.

—Parece ser que se arreglaron bien, una mirada dice mas que mil palabras.

La foto, esa noche salimos juntos,  pero no nos dimos cuenta que alguien nos perseguía para ser fotografiados.

—Me hice cargo de esto, no saldrá a la luz. Lo tengo controlado.

—Eso acordamos.

—Con respecto a lo que tratamos sobre el, cuando sea el momento volverá a sus actividades. Ahora debemos enfocar lo demás en el álbum.

—Lo haré.

—Solo una recomendación.— pidió. — Disimula llevando a cualquiera de los demás. No hay nada mas que tratar por ahora.

Me levanté y despedí de el. En cuanto estuve en el ascensor sonreí como un niño a quien sus padres le dan lo que el ha querido tanto. Entré al estudio en medio de una gran oscuridad, buscando encender la luz.

—Me hace recordar a alguien. — escuché.

Observé hacia atrás, era Seung quien me observaba con una bebida mientras quería entrar.

Prohibido Estar Contigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora