Capítulo 3

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Capítulo 3, La Horda.

Había llegado el día, al atardecer intentaron escabullirse de la horda y entrar al campamento, en el caso de que eso no funcione se enfrentan a ella.

Todos estaban nerviosos pero decididos, Boruto había estado monitoreando el área y pudo confirmar que doscientos cuarenta y tres monstruos merodeaban por los alrededores.

Para su suerte las otras Hordas estaban muy lejos de la zona y les tomaría dos días llegar a la escena, hoy ellos tendrían que hacer su movimiento, no podían demorarse más tiempo.

"¿Todos tienen todo listo?"

Preguntó el hijo de Atenea a su grupo. Todos ellos le asintieron y él en respuesta hizo lo mismo.

En esta semana se aseguró de que todos ellos supieran lanzar kunais y shurikens de forma decente. En este área Annabeth y Grover demostraron tener un talento natural en especial su hermana.

Por el lado de los dos Semidioses mayores Boruto se centró en sus posturas al igual que su defensa. Si bien no era perfecto por lo menos ahora los dos sabían bloquear y desviar ataques de forma adecuada.

"Bien, recuerden esto. Ante cualquier emergencia entren en formación diamante y peleen defensivamente. Annabeth y Grover serán el apoyo a larga distancia, Thalia lo será a media y corta y tu Luke serás un luchador de cuerpo a cuerpo."

Mirando al hijo de Hermes este asintió afirmativamente, el grupo había estado practicando sus estrategias y todos ellos sabían como aportarían al equipo.

"Bien, por mi parte yo me encargare de los grandes grupos. Ahora en marcha, pronto el sol se pondrá..."

Dijo el rubio mientras se daba la vuelta e ingresaba en las profundidades del bosque, de cerca todo el grupo lo seguía con sus respectivas armas a mano.

Los sonidos del metal contra el metal se podían escuchar en el taller del dios Hefesto. Como siempre el dios de la forja estaba diseñando nuevos inventos para el Olimpo, el legendario inventor hubiera continuado su trabajo si un pitido no lo hubiera interrumpido.

Al levantar la mirada él vio una luz naranja parpadea.

~"Mhm, con que ya están cerca. Bien tendré que avisar al resto, es una lastima estaba a punto de terminar este autómata..."~

Pensó el dios de la forja para sí mismo, en un chasquido la suciedad de sus ropas desapareció y en un destello de luz el dios dejó el lugar reapareciendo en la vacía sala del consejo Olímpico.

Por una votación impulsada por Atenea el consejo se reunirá para ver como los semidioses lidiaban con los monstruos enviados por Hades.
Si bien Hefesto no le veía sentido a esto la diosa le pagó para que construyera un sistema satelital de alta definición para poder contemplar la pelea.

Ella realmente estaba muy confiada de que sus hijos lo lograrían y otros dioses simplemente estaban curiosos por ver en acción las extrañas habilidades del hijo de la diosa virgen.

Volviendo a chasquear sus dedos Hefesto hizo aparecer una pantalla gigante en la sala para posteriormente elevar su poder y convocar al consejo Olímpico.

En tan solo todo el consejo más Hestia estaban presentes en el lugar, incluso la reina del Olimpo estaba ahí pues esperaba que las criaturas mataran a la ropa sucia de Zeus.

"Hefesto, gracias por cumplir con mi pedido."

Dijo Atenea en agradecimiento.

"No me lo agradezcas, me pagaste para que te lo hiciera."

El frío hijo de AteneaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora