Le Sang De Dieu courait Dans ses Veines I

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▪ Los vientos eran calmados al contrario del fuerte y veloz humo negro que se expandía a lo largo de la extrema vegetación roja, absoluto silencio que presionaba la cordura de los observadores lejanos, los nervios se convertían en acero tan pronto como los rayos del sol se despedían ocultándose detrás de la montaña que observaba el escenario. Una ventisca fría aviso el invierno y la era de hielo aproximándose, el frío subió por las espaldas de los observadores que duró tragaron esperando cualquier pisada entre las hojas secas en el suelo ▫

▪ Levanto la mira y rezo mentalmente para que todo fuera certero, viento inexistente pero un frío fuerte, silencio absoluto y presión en la escena, tomar el miedo como método de de ataque resultan factible y la presión inminente de morir a manos de una bala carcomia la cordura de todos, fue ahí cuando le avisto y supo que su destino estaba sellado, cuando su reloj marcó un nuevo minuto todo quedó en un sonido sordo; Un francotirador había abatido a un uniformado de wille ▫

▪ Cantando su baja y con una sonrisa en su rostro que tan pronto como la hizo tan pronto desapareció al ver como un láser de un intenso color verde apuntó e en un intento desesperado de escapar del tirador se lanzó entre el césped; grito de dolor y se retorcía entre su propia sangre que se sincronizada y se alejaba con el agua de un pequeño arroyo. Observó con dolor su pierna solo para darse cuenta de un enorme agujero en su pierna derecha, cojeando intentó pararse pero cayó al suelo producto de un tiro en su cabeza ▫

────Tirador eliminado, coordenadas 66° al norte de la ciudad de montreal. Refuerzos en mi posición────

Entre sus suspiros que intentaba calmarse entre el ahora ya presente frío sabía que era hora de retirarse del lugar o moriría de hiportemia, para hacer el menor ruido posible rodó entre el césped hasta llegar al arroyo pequeño que era más manchado por la sangre que bajaba del abatido. Dio un salto y cruzó el arroyo para subir entre la densa arena; las cigarras y grillos chillaban entre la noche fría, su cuerpo cansado le obligaba a descansar entre ramas que se cruzaban con árboles ▫

▪ De su pequeño bolso tomó un sorbo de su agua que ya empezaba a escasear y le obligaba a ahorrarla responsablemente ante un escenario tan horroroso como es la guerra, los grillos no dejaban de hacer su propio sonido que le hacia imposible escuchar pasos o algo cercano por lo que tendria que alejarse de ahí y caminar hasta el punto de extracción del helicóptero de su escuadrón; al final el escuadrón se separó por una emboscada y cada quien tomó su camino entre la tundra Canadiense ▫

El metal frío de las empuñaduras y culatas de su armas empezaban a helarse con el creciente frío que se aproximaba, su corazón palpitaba al mil por hora y la adrinalina le consumía en un mar obsoleto de escape donde estaba encerrado intentando sobrevivir; intento levantarse pero la sensación caliente y mojada bajaba por su pecho hasta su estómago empapando la zona. Volvió a la realidad cuando sintió el su sangre saliendo de su pecho, tenía que llegar cuanto antes al helipuerto o moriría en el frío invierno sin siquiera despedirse de su familia ▫

────Sargento franforct le estamos esperando, el helicóptero ha llegado a la posición designada. Favor de llegar cuanto antes────

▪ Grata su suerte al no escuchar ni siquiera la hélice de algún helicóptero o si quiera una luz entre la tensa noche que envolvía los brazos del frío que cada vez amedentraba con fuerza y los vientos empezaban a ponerse gélidos, la sensación le recordaba que seguía vivo y no se rendiría hasta llegar a su destino; se recargo en el árbol y fuertemente se levantó con ayuda de sus piernas hacia arriba con ayuda del tronco enderezado su postura. Caliente su pecho y estómago que el dolor sólo era ciego y se sentía tan irreal ▫

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