Soy Un Monarca

Capitulo 4: Cambio de Marea

El día había comenzado bien para Aguilar, esperaba haber podido ayudar a su pupilo hablando con el director en la escuela para que el acoso hacia él se redujera en lo más mínimo, y si no lo hacían, estaba listo para arremeter con todo su equipo de abogados.

Su plan era llevarlo a Estados Unidos cuando acabe su año, aprendería Inglés y sería capaz de recuperarse, no tendría problemas para entrar en una buena escuela, y con la recomendación que pensaba darle, mucho menos.

Pero eso tendría que esperar todavía, primero tenía que asegurarse de su seguridad, le había pedido a Ramirez que pasará por la escuela de Izuku para traerlo acá y preguntarle cómo fue su idea.

El teléfono de su oficina sonó, realmente no esperaba una llamada, pero en cuanto vio el número, no pudo evitar sentir que algo andaba mal.

— Señor, Izuku, está mal, muy mal, ahorita mismo nos dirigimos al hospital, le enviaré la ubicación en unos momentos — Fue lo único que escucho antes de que la llamada se cortará.

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Aguilar se preguntaba porque la vida parecía empeñada en patear a Izuku cada que podía, literalmente era ver a un niño indefenso recibiendo toda la basura de la vida.

Ya estaba en el hospital, y ya tenía preparado a una parte de sus abogados listos para arremeter legalmente contra la escuela, solo faltaba la declaración de Izuku, y tardaría.

Porque si, el chico tenía varios huesos rotos, en los brazos y las piernas generalmente, tal parece que de alguna manera se las arreglo para no golpearse tan fuerte la cabeza ni la espalda, lo cual se salvó de una parálisis o incluso la muerte.

Poco después llegó la familia Yaoyorozu, principalmente por la preocupación de Momo, ya que no sabía nada de Izuku desde hace unas horas, básicamente ya era rutinario hablar en cada momento para ellos 2, y podían considerarse buenos amigos.

Cuando el no le aviso que ya estaba en casa como habían quedado que harían para estudiar conceptos de economía en conjunto, Momo no pudo evitar sentir que algo andaba mal, y al pasar las horas ese sentimiento creció.

Y luego, solo pudo sentirse mal cuando supo por su padre que Izuku estaba en el hospital por un incidente en su escuela, ¿Qué más tenía que pasar el chico que la salvó?.

Habían pasado unas horas, y el señor Aguilar recibió la noticia de que ya podía ver al chico, a la par, mientras pasaba el tiempo, buscó a algún tutor que Izuku pueda tener, y lo encontró, Sasaki Mirai, a quien reconoció como un Pro-Hero y Sidekick de All Might.

Después de eso entró a la habitación en la que se encontraba Izuku, encontrándose con un panorama desolador, el niño tenía una mascarilla que le suministraba oxígeno, y ambos brazos y piernas totalmente vendados.

Su tono de piel era un poco pálido, lo suficiente para notar que había tenido una hemorragia, y quien sabe cuanto tiempo había pasado antes de que le encontraran, se encontró suspirando antes de darse cuenta y saliendo de la habitación.

— ¿Cómo está el joven, señor? — Preguntó Ramírez a la par que lo vio salir.

— No muy bien, cuéntame bien lo que pasó — Respondió Aguilar mientras se recargaba contra la pared, pasándose un pañuelo por la frente.

— Cuando llegué a buscar al joven Izuku y no verlo por ningún lado, decidí entrar en su escuela, cuando lo vi, estaba en el suelo, con sus fracturas y algo de sangre, totalmente inconsciente, y sin nadie que le prestará atención, fue en ese momento que me apuré a llamar a emergencias y poco después a usted —