Amiga imaginaria [Jenlisa] [Finalizada]

Capitulo 3

La noche reina por todas las calles, jennie es arropada por su madre quien le lee un cuento con la esperanza de que su pequeña caiga rendida, deposita un beso sobre su frente antes de finalmente salir de su habitación dejando la luz de su lámpara de noche encedida a sabiendas qué su hija le temia un poco a la oscuridad. Jennie se remueve de un lado a otro intentando buscar una posición correcta para poder dormir. Últimamente conciliar el sueño le resutaba más difícil y no entendía a que se debía.

Es una niña, no se supone que los niños a esas edades caen rendidos. No lo comprende incluso si ha bebido dos vasos de Leche para poder tener un sueño profundo o si se ha dedicada a contar ovejitas pero siempre se detenía en la oveja número cinco por que la confundía con la cuatro, ella solo sabia contar hasta el cinco así que repetirlo le abruma, nada habia funcionado e incluso a pensado en contarle a su madre. Suspira abrumada, tomando una linterna de sus cajones mientras sujeta con una mano su cuento favorito, aun no ha aprendido a leer así que solo se intriga por los dibujitos haciendo expresiones sutiles en cada página.

El ruido de la ventana llama su atención, bajando sus mantas para observar detenidamente, algunas piedras golpean su ventana y ella no deja de sentir nervios y un poco de miedo. Así que a pasos lentos camina en dirección a la ventana, teme lo peor pero entonces, su temor se desvanece y observa a aquella ruidosa pelinegra saludarle. ¿Que hacia ahí? Ella podría jurar qué son cerca de las 9 de la noche, ¿por que esa niña estaba fuera de su casa? ¿Su madre no le vigila?

Su habitación esta en el segundo piso, así que el pensar en saltar por la ventana sería una idea demasiado tonta a menos que ella quisiera romperse el brazo como a los cuatro años o en los peores casos morir. Así que le hace una señal indicandole qué espere mientras camina hasta su puerta abriendola lentamente para evitar hacer ruido, camina de puntillas y es sigilosa mientras avanza hasta la puerta tracera, es la única que esta abierta y en la cual logra llegar. Camina hasta donde la pelinegra espera sonriendole animada.

—¿Por que Estas aquí?—Le pregunta entonces cuando esta cerca de ella. Se abraza así misma pues el frio es abundante.—Es tarde, ¿No deberías estar durmiendo?

—Tu tampoco estas durmiendo —Le recriminó, tomando asiento en el pasto y la castañita de igual modo tomo asiento a su lado.

—¿Como supiste donde vivía?

—Te vi entrar después del colegio —admitio entre una risita.—Yo vivo por ahi—Señaló una de las casas del fondo pero la castaña no pudo distinguirla correctamente.—No podía dormir así que decidí venir a verte..

—¿Por que no puedes dormir?—Le miro curiosa pero la menor se encogio en hombros, suspirando.—¿Tu mamá no se dio cuenta de que saliste?

—Ella no esta en casa—platicó.—Supongo que es por eso que me cuesta dormir, se fue hace un día, solo quiero verla—Su voz fue disminuyendo.—Pero ella no vendrá..

—¿Por que no?—ladeo la cabeza intentando resolver sus dudas.

—Mama esta en el hospital —Su voz titubeo sintiendo sus ojos hormiguear.—Papá está con ella cuidandola—Su mirada es baja, la pequeña solo juega con sus manos sin saber que decir.—Creo que mama esta grave pero no se, siempre qué pregunto el no responde..

La castañita no aparta su mirada de ella, incluso si no le conoce de nada siente un poco de pena por ella, entendía su situación más que nadie por que sus padres también hacían lo mismo, la diferencia en ella era qué al menos su madre pasaba algunos momentos con ella y que ambos estaban bien de salud por lo cual no tenia que preocuparse de nada. Piensa en qué palabras decirle intentando recordar algunas qué su madre le ha dicho cuando se cae o se golpea.

—Ya ya..—Su voz salio suave intentando imitar el tono de su madre, dando pequeñas palmaditas en su espalda.—No tienes que estar triste, los adultos son un poco reservados—La menor alzo timidamente su rostro hasta ella.—Piensa en qué volverás a ver a tu mamá ¿Si?—La pelinegra asiente ante su repentina ternura.

La niña que esta mañana habia mojado su vestido esta ahí siendo tan dulce con ella mientras no deja de consolarle.

¿Como podrían ser la misma personas?

Lisa limpia sus mejillas asintiendo ante sus palabras, la castañita aparta sus manos de ella mientras regresa su mirada hacia abajo. La pelinegra sujeta su mano y es capaz de verle sobresaltarse. Esta fría, como siempre.

—Lo siento..—murmura apenada separandola de ella.—No se por que mi cuerpo es tan frío.

—Tal vez es el clima—Se deshace de sus guantes colocandolos en las manos de lisa.—Esto ayudara —Su sonrisa es amplia mientras le mira. —Deberías volver a casa, la noche es oscura y algo tenebrosa, puede salir un fantasma por ahí —aquello último le hizo sentir nervios mirando por ambos lados.

—Esta bien, no es la primera vez que salgo de noche y tampoco le tengo miedo a los fantasmas, algunos son amigables —Le resto importancia sonriendo mientras se siente orgullosa de si.—Pero tienes razón, tu debes ir a dormir jennie.

—Mi nombre—murmuro enfocando sus ojos brillantes en ella.—Te acordaste de mi nombre—Le sonrió entonces.-pense que lo olvidarias..

—No creo que pueda volver a olvidarlo—Le correspondió su sonrisa.—Eres La única que puede verme y me gusta eso, ademas somos amigas ¿No?

Jennie asintio, mientras le sonrió de manera enérgica, sus ojos se encontraron con los de la contraria mientras su calidez era notoria. Si, aun era demasiado pequeña para comprender la referencia de sus palabras, por que solo quizas no estaba mintiendo.

Hola ._.

Creo que no había publicado una nota jiji xd bueno solo para hacer algunas aclaraciones; primero la historia será corta, como de unos 15 capítulos o si no es que menos, Intentaré contarles la historia,por que con el pasar de los capítulos se confundíran mucho y se que el titulo de la historia de por si ya dice demasiado pero-

En el final se resolverá todo.

Tercero o cuarto emm..pues gracias por darle amor y apoyar y nada, que tengan un excelente día y espero que les vaya muy bien ♡