Capítulo Tres

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Sonrío girando mi cabeza hacia la derecha, escucho el sonido de la cámara tomando las fotos y el flash invade rápidamente la habitación. Cambio de posición varias veces, escuchando algunas de las indicaciones que el camarógrafo me hace. 

El sonido de una Love Alarm capta la atención de todos, como es usual. 

Mis ojos rápidamente viajan hasta Sun Oh, quien entra a la sala con un semblante serio, haciendo que mi corazón de un vuelco, debido a la preocupación.

- Terminemos por hoy- le digo a todo el equipo- Gracias por todo su trabajo- hago una reverencia y sonrío. 

Todos se despiden y comienzan a movilizarse, tomando sus cosas y saliendo de la habitación. 

Me acerco a Sun Oh con cuidado, notando que tiene la mirada perdida. 

- ¿Qué sucedió?- digo cuando me encuentro frente a él.

Sus ojos bajan hasta verme fijamente. 

- ¿Puedo dormir en tu casa hoy?- dice serio. 

- Por supuesto- digo inmediatamente- ¿Te sientes bien? 

Sun Oh asiente lentamente. Después de cambiarme, recoger mis cosas y cerrar el estudio, nos dirigimos al auto de Sun Oh y él conduce hasta mi casa. 

Mi celular vibra por una notificación, miro la pantalla y es un mensaje del señor Min Jae, el secretario del padre de Sun Oh. 

"Buenas noches, señorita Yuk Jo."

"Sun Oh no pasó la audición."

"Discutió con su madre y salió de casa."

"Sé que probablemente esté buscándola, por lo que le ruego que cuide de él por hoy. Es la única persona con la que él querrá hablar en estos momentos"  

Volteo a ver a Sun Oh, quien mira atentamente el camino, con una expresión seria. Al cabo de unos minutos llegamos a mi departamento, ambos entramos  y tomo una ducha rápida. 

Al salir, veo a Sun Oh en la cocina, intentando hacer unas tostadas en la sartén, pero por el aroma en la habitación y el oscuro color que parecen tener, puedo asumir que se quemaron. 

Sun Oh suelta la espátula frustrado. Me acerco a su lado y tomo una de las tostadas que están en el plato y la llevo a mi boca, ignorando que Sun Oh me pida que no la coma, dándole un pequeño mordisco. 

No sabe nada bien, pero sonrío masticando. 

- ¿Sabe bien? - pregunta con interés, niego con la cabeza. 

- No. 

Suspira y camina hacia la sala de estar. Dejo el quemado pan en el plato y lo sigo, notando que se sentó en uno de los sofás. Tomo sus hombros suavemente y les doy un leve apretón. 

- ¿Por qué no vas a tomar un baño mientras preparo algo de comer? 

Sun Oh voltea a verme y se queda quieto por algunos segundos,  para después asentir con la cabeza y caminar tranquilamente hacia el baño. 

Pasados unos minutos, termino de preparar fideos y Sun Oh sale del cuarto de baño con el cabello aun un poco húmedo, me ayuda a llevar los platos hasta la mesa y nos sentamos de frente para comenzar a comer.

- El señor Min Jae me dijo lo que sucedió. 

Sun Oh deja de comer por un momento y sus ojos vuelven a perderse por algunos segundos. 

>> Sé que tal vez no quieras hablar de eso y lo entiendo, solo no permitas que esto te haga pensar que no mereces seguir intentando. 

- Mi madre dijo que no podía hacer nada bien- responde mirando a la nada, ignorando lo que acabo de decir- Y creo que tiene razón.

¿Me amas?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora