Eran las once de una fría mañana de un domingo.
El pelinegro abrió los ojos lentamente, adormilado.
Seguia aferrado a chifuyu mientras este solo dormía encima de su pecho y con un edredón grueso, debido al frío invernal.
Observó tiernamente como su chico dormía, tan tranquilo como un ángel.
-hey, pequeño, despierta-
Comenzó a acariciar su cabeza con cuidado para despertarle.
Chifuyu movio la cabeza negando, haciendo pucheros y frunciendo el ceño mientras se aferraba mas al cuerpo de baji.
-venga, es tarde, se nos va a pasar la mañana- dijo, sonriendo tiernamente.
El rubio por fin empezó a abrir los ojos, miro hacia arriba y abrazó el cuello del azabache, apoyando su cabeza en el hombro del contrario, como si fuese un bebé.
-hace frío- dijo chifuyu volviendo a mirar a baji.
-si, lo hace, pero mikey me ha escrito, llevan un rato esperándonos en la cafetería de siempre, quieren hablar de algo-
-pero yo quiero quedarme aquí y quiero que me abraces para que no tenga frío y quiero que... me des cariño- acabo con un sonrojo
-yo tambien quiero, pero tenemos que ir, no podemos aislarnos del mundo, pequeño- dijo el pelinegro, acariciando la mejilla de chifuyu -ademas, luego iremos a mi casa a dormir y estaremos juntos por la tarde-
-bueno, me sirve- respondio, restregando su mejilla en la mano de baji.
El pelinegro sonrió tiernamente.
-vamos a vestirnos, que no llegamos- dejó un beso en la boca del rubio y se levantó para vestirse.
Se dirigió un momento a su casa para agarrar ropa más cómoda que la de ayer, poniéndose un chándal de color gris.
-pasas el día y la noche fuera de casa, vienes por la mañana y te vuelves a ir, ¿algo que tengas que contarme?- dijo la madre de baji entrando a la habitación del pelinegro.
-no no... bueno, si, pero ya te dije que te lo contaría más adelante- respondio baji.
-no, no puedo más con la intriga, hijo, llevas un par de semanas que estás como en las nubes, pero en el buen sentido, desde que te dieron el alta hace dos dias no vienes prácticamente a casa, ¿estás saliendo con alguien?, porque no creo que mikey y tú os aguantéis por tanto tiempo- dijo con una sonrisa cálida.
-n-no es eso...- dijo sonrojado.
-si, ahora dilo hasta que te lo creas- respondio la madre, burlona -¿quien es? ¿es linda?-
Baji se puso nervioso por un segundo y miró hacia abajo, de repente recordó a chifuyu, recordó su sonrisa y como de bien le hacía sentir, recordó que estaba completamente enamorado, sonrió tiernamente con un pequeño rubor y un brillo en sus ojos un tanto especial.
-si, es la persona más linda de todo el planeta- dijo aun con la cabeza gacha.
Su madre se percató de la mirada de su hijo, lo miro sonriendo levemente y con ternura.
-debes de quererla demasiado- dijo sin apartar su mirada del azabache.
-no te puedes llegar a imaginar cuanto-
-¿y ya salís oficialmente? ¿o te tienes que declarar?-
-ya salimos, desde hace un par de semanas-
-¿y como es? ¿rubia o morena? ¿de que color son sus ojos?- siguió y siguió preguntando.
-mama, ya, no me interrogues- respondió irritado.
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Nuestra otra vida (baji x chifuyu)
RomantikBaji no muere y se resuelven los conflictos de kazutora y la toman