Nuestra otra vida (baji x chifuyu)

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Perdón si hay faltas de ortografía, no he revisado el capítulo<3

Nueve y media de la mañana.

El rubio comenzó a abrir los ojos lantemente cuando sintió pequeños besos recorrer toda su cara y a ratos su boca, sabía muy bien quién era.

Cuando los abrió del todo, pudo encontrarse con las orbes color miel de su keisuke mirándole directamente.

El pelinegro abrazaba la cintura del rubio con ambas manos, tenían sus cuerpos totalmente pegados y aún estaban desnudos por lo sucedido anoche.

-Buenos días bonito- dijo baji cuando chifuyu lo miró.

El pequeño sonrió levemente, agarró y apretó con una mano la cara de baji y acercó sus bocas.

-Buenos días- dijo cuando se separaron -¿que haces despierto tan pronto?-

-quería invitarte a una cita- respondió, con dificultad, pues chifuyu seguía apretándole los cachetes.

-¿tan temprano?-

El pelinegro asintió.

-los demás seguramente escucharon todo ayer... prefiero ahorrarme la incomodidad- dijo baji, pegando su frente con la del contrario -ademas, quiero que pasemos el dia juntos, así celebramos tu cumpleaños a nuestra manera-

Chifuyu lo miró con ternura y sonrió.

-me parece bien... pero tendríamos que irnos ya, ¿no?-

-si, vamos a ducharnos rápido y nos vamos-

Se metieron a duchar a la vez, saliendo relativamente pronto del baño.

Ya eran las diez de la mañana.

Se pusieron los bañadores y unas camisetas cualquieras, estarían en la playa, solo que algo alejados de la cabaña.

Baji agarró una sombrilla y una bolsa, dentro metió una manta grande, toallas, chaquetas por si luego hacía algo de frío, cartas, dulces para desayunar, agua, peyoung yakisoba y bebidas.

Bajaron al piso de abajo para salir, intentando hacer el menor ruido posible, encontrándose que kazutora y takemichi estaban sentados en el sofá, durmiendo y con los mandos de la play en las manos, al parecer estuvieron más tiempo que los demás y se quedaron dormidos.

Para suerte de la pareja, no se despertaron.

Al salir de la cabaña, Baji agarró la mano de chifuyu para comenzar a alejarse de la casa.

Fueron bastante lejos de esta, a esas horas obviamente no había gente en la playa, por lo que pusieron la manta y sombrilla al lado de la orilla.

Al terminar, se sentaron para ver el mar, el agua era totalmente brillante y cristalina y a aquellas horas por la mañana podían oírse los diferentes cantos de los pájaros, también resaltaba el ruido de las olas y el olor a mar, era todo demasiado bonito.

Ambos observaban como el agua fluía tranquilamente en un silencio cómodo.

Pronto, a chifuyu comenzó a entrarle suelo, por lo que soltó un gran bostezo.

-¿tienes sueño, peque?- le dijo baji, secando la lagrimita que salía por su ojo debido al bostezo.

-si, alguien ayer no me dejó dormir y ese alguien me ha despertado a las nueve de la mañana- respondió con falso fastidio, mirándole mientras sonreía ladeadamente.

Baji rió y se posicionó entre las piernas de chifuyu, para tumbarse y apoyarse en el abdomen del pequeño, restregando su cara en el mientras sonreía cual niño pequeño y acariciaba la espalda baja del rubio.