Primer Día.

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-Vane....cariño....¡VANESSA!-gritó mi madre.-Cariño, despierta ya. Sino, llegarás tarde a tu primer día.- dijo mi madre esta vez más dulce.

-¿Ehh? Ahhh...sii, ya voy.- respondi.

A duras penas me levanté y ne dirijí al guardarropa. De ahí, saqué (multimedia). Al poner todo sobre mi cama, entre al baño. A los 25 minutos salí y me puse aquel conjunto, cepille mi cabello, me puse una bincha de trenza en medio de la frente y me apliqué brillo labial. Me pare frente al espejo y un fugaz recuerdo de mi antigua yo paso por mi mente. Por un milisegundo creí que era esa Vanessa de antes.. Vanessa, ya no eres ella. Eres diferente. Ella quedó en el pasado. Me repetía eso una y otra vez en mi cabeza hasta que un zumbido me sacó de mis recuerdos. Era un mensaje de Zack. Zack era un chico que conocí en el equipo de Soccer, el y yo nos volvimos grandes amigos. De hecho, es mi único amigo varón. Zack es una cabeza más grande que yo, tiene el cabello castaño claro, ojos avellana y un MUUY buen cuerpo. Él vendría a mi Instituto y al parecer estaba...¿emocionado? ¿ansioso? ¿asustado? Tal vez...
Mensajes de Texto:
Zack:
Buenos Días Vane!!
Estoy muy emocionado! ¿Qué crees que deba ponerme? ¿Mi camisa Azul de cuadros o la roja con cuadros? -Zack
Vanessa:
Buenos Días, Zack.
Yo estoy bien, Gracias por preguntar.
Zack, no importa que te pongas, te ves bien con todo;) Y te aseguro que nadie te juzgará. Tranquilo, todo saldrá bien. Solo sé tu mismo;) -Vane:)
Zack:
Gracias Vanessa. Eres la mejor, te quiero. Nos vemos en unos minutos...Bye:) -Zack
¡¿Pero que Carajos?! Todavía faltaba como una hora para entrar al Instituto y este me dice que nos vemos en unos minutos. "Si que está demente" pensé.

Guardé mi celular en el bolsillo de mi pantalón, agarré mi mochila que estaba en un rincón de mi cuarto y cerré la puerta apenas salí. Bajé las escaleras y un delicioso aroma me hizo embobarme por un instante. "Mi madre hizo mi desayuno favorito". Al llegar a la cocina, mi mamá estaba frente a la estufa y al darse cuenta de mi presencia se voltió a verme de arriba a abajo luego, me sonrió como nunca.

-Te ves hermosa, hija.- dijo sonriente.

-Gracias, mamá.- respondí.-Pero tengo hambre y más ese rico olor me da más hambre.- dije sobando mi estomago ahora plano. Mi madre se limitó a reír y me colocó un plato de huevos revueltos con tostadas, fruta y jugo de naranja. Mi favorito. Solo le dediqué una sonrisota a mi mamá indicandole un "Gracias" y empezé a ingerir.

Al terminar, dejé mi plato y el vaso en el lavaplatos y fuí a cepillarme los dientes. Al terminar sentí mi telefono sonar, lo saqué y Zack me llamaba. Deslizé mi dedo a la derecha y respondí:

V: Hola, ¿Que pasa, Zack?

Z: Sal de tu casa.

V: Pero ¿Qué...?

Z: Que salgas, he dicho.

V: Está Bien.

Colgué y salí de mi casa. Y ahí estaba Zack con su ¿Auto?

-¿Es tuyo?- pregunte asombrada.

-Ahora si.- me respondió con su inmensa sonrisa.-¿Nos vamos?- preguntó.

-¿Vamos al Instituto es esa belleza?- pregunté aun más impactada.

-Claro que si. Y no acepto un no como respuesta.- dijo sonriendo.

Solo asentí y me adentre a la casa de nuevo, busqué mi maleta y me la colgue en la espalda y me dirigi donde mi madre.

-Mamá, ya me voy.- afirmé.

-¿Cómo? ¿Con quien?-preguntó.

-Con Zack, Mamá. En su auto nuevo.- le respondí.

-De acuerdo, hija. Que te vaya bien- me beso la frente y me abrazó. Mi madre es una persona increíble y es una guerrera; todo lo que ha pasado y aun asi puede sacar una sonrisa todos los días. Ojalá yo fuera asi de fuerte que ella...

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⏰ Última actualización: Mar 12, 2015 ⏰

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