AIDAN GALLAGHER.
Miro a T/n mientras ella esta mirando el techo con un audífono puesto. Sonrío de lado mientras nuestros dedos se comienzan a mover al ritmo de "Bilie Jean",
- Que canción tan más explicita - me miró y después empezamos a reir. - sigo feliz por el iPod, ¿Cómo sabias que me gustaría más que los demás regalos?
- Te gusta la música - sonreí - me lo dijiste la primera vez que te quedaste a dormir conmigo, el día de las películas. - me sonrió cariñosamente. - aunque no lo creas - tome su mano y la lleve a mis labios para besar sus nudillos - pongo mucha atención a lo que me dices, y más si se trata de ti.
Y era verdad, T/n hacia que cada cosa que hacia o decía, se volviera preciada para mi, sabiendo que jamás lo olvidara, cosa que sólo pasaba con ella. Ambos nos quedamos mirando mientras la música seguía reproduciendo. Todas las cosas que habíamos hecho y pasado, se reprodujeron en mi mente, desde la primera vez que la vi en el parque, con lagrimas en sus hermosos ojos y con su rodilla raspada. Ese fue un suceso que marco mi vida para siempre, no me arrepentía de no haber obedecido a mi mamá, de no ser por eso, nunca me hubiera lastimado y ella nunca hubiera comprado las tiritas, tampoco la abríamos visto al salir. Sea lo que sea que la vida hacia para que nos volviéramos a ver, estaba totalmente agradecido por ello.
No había palabras que me permitieran expresar lo que sentía cuando estaba con T/n. Ya no me siento solo, aunque soy consiente de que jamás lo estuve. Siento que puedo hacer miles de cosas, por el hecho de que es T/n quien me infunde valor, no me siento listo para que esto termine, no quiero que esto termine, quiero que sea infinito y no finito, quiero que las circunstancias estén a mi favor, y me permitan gozar de esto todo el tiempo posible, hasta el día de mi muerte.
Trago duro cuando hemos aterrizado y tomado un taxi para llevarnos a casa. El miedo estaba recorriendo cada centímetro de mi cuerpo, el nudo en mi garganta me estaba haciendo imposible la tarea de poder respirar con normalidad, la inquietud azotaba mi cabeza y menaba la pierna de un lado a otro.
- Me la he pasado bien estas vacaciones, a todos nos sirvió... - deje de poner atención a mi madre para mirar a T/n.
¿Por que me sentía así? ¿Por qué sentía que las cosas entre nosotros van a cambiar? Este fue el mejor mes de toda mi vida, y ahora me encontraba aterrado con la idea de que las cosas entre T/n y yo cambiaran.
- Me la he pasado increíble, y supongo que Aidan también, por eso se a quedado sin palabras - dijo dándome un golpecito en el pie, regrese de inmediato a la realidad.
- Así es... Gracias por todo - mire a mis padres.
- Tu madre y yo regresaremos a casa, ha sido un vuelo algo largo, y con T/n queriendo vomitar fue cansado - T/n lo miro ofendida.
- ¿Qué cosa? - lo miro - fuiste tu el que estaba a nada de vomitar encima de Lauren - empezamos a reir - yo soy la que debería de estar cansada, junto con Lauren. Son como dos niños pequeños - reí cuando me miro y después tome su mano para besarla.
T/n me miro raro, ya sabia que algo me estaba pasando. Negue con la cabeza en respuesta a su mirada preguntándome si me sentía mal. Ella apretó los labios.
- ¿Me dejan acompañar a T/n a casa? - mire a mis padres - yo me la lleve, me sentiría mal si la dejo ir sola, además, quiero más tiempo con ella.
La mirada de mi madre y la mía se cruzaron en el retrovisor.
- Por supuesto, siempre hay que ser un caballero, supongo que también te entenderás con los hermanos. - asentí con la cabeza. Sentí la mirada de T/n encima de mi.
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She... Almas encontradas.
Teen FictionMi nombre es Aidan Gallagher. Soy un chico normal como cualquier otro... O bueno... Eso es lo quiero. Ser yo no es nada fácil, no cuando tienes a miles de personas que te siguen y no las quieres decepcionar. Sin embargo, en ocaciones creo y siento...