¡Buenas, buenas!
¿Cómo están? Yo estaba ansiosa por publicar este capítulo.
Perdonen que el capítulo haya sido tan corto, no tuve tanto tiempo para escribirlo.
Ahora si... vamos con la historia.
Cambio y fuera.
Capítulo 3
Secretos, secretos y más secretos.
— ¡Por favor Aaron me encantaría conducir!— Hazlo... pero no con mi auto.
Sus manos se aferraban al volante con decisión mientras en la radio pasaban canciones viejas.
— ¿A donde vamos? —pregunté finalmente fijando mi vista en el precioso paisaje.
— Primero, a buscar a tu hermana.
— Prefiere que le digan pecas. —afirmo sin saber porque mierda lo hacia.
— Bien... iremos a buscar a pecas. Luego reunirás tus cosas, las de ella, y nos iremos de este pueblo de mierda.
Port Townsend, Washington. Un pueblo asqueroso. Todos nos conocíamos entre todos y mi vida apestaba así que ni siquiera cuestioné o me opuse a su idea, solo estaba algo... sorprendida por su decisión.
— Pero... mi padre... yo...
— Tu padre es un alcohólico drogadicto que se la pasa fuera de tu casa y no tiene caso que te dejes maltratar así por él.
Ni me inmuté. Su mandíbula estaba tensa al igual que el ambiente, en silencio, uno incómodo.
— ¿Qué te hace pensar eso? —pregunté enfadada por la forma en la que se dirigió a mi padre e incomprendida sobre como mierda sabía que era drogadicto si yo nunca se lo había comentado.
Puso sus ojos en blanco y levantó la manga de mi remera hasta quedar por los codos dejando al aire los morados.
— Conozco bien esos golpes. No se si crees que soy ciego o tonto.
Su humor había cambiado repentinamente. Estaba sudando y parecía totalmente tenso. Su ritmo de la respiración estaba agitado como si hubiera corrido una maratón y estuviera realmente cansado pero extrañamente con energía.
— ¿Qué te sucede? —pregunté finalmente con el entrecejo arrugado.
Bufó.
— ¿A mi? Tú eres la que oculta todas esas heridas. No yo.
Extrañamente eso me hirió un poco.
El auto se detuvo con determinación mientras esperábamos en una calle desolada con árboles a sus lados. Bosques.
— Espera aquí. —me ordenó bajando del vehículo caminando hacia la arboleda.
Pff, si claro.
Finalmente lo vi desaparecer entre los árboles. Y lo seguí.
Mis ojos encontraron su acción repentina provocando que entrecierre la vista como si eso me permitiera observar mejor lo que estaba haciendo.
De su bolsillo sacaba una bolsa pequeña y blanca. Me bastó solo ver el envoltorio para saber que era.
— ¿Eso era lo que estabas evitando que vea? ¿Por eso estabas tan raro todo el camino? —pregunté finalmente cuando lo inhaló.
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𝘿𝙖𝙧𝙠 𝙋𝙖𝙨𝙩𝙨
AdventureAsesinatos, Romance, Miedos, Engaños... recorren esta historia, la cual protagoniza Spencer Windsor. Una chica la cual está en su último año apunto de graduarse, pero Aaron White tiene otros planes para ella... ¿Te animas a averiguar cuales son?