- Mamá no digas eso ni en broma- le dijo Lu.
- ¿Por que no te atreves a aceptarlo?-.
- Porque uno, no es verdad y dos, tengo novio y lo amo-.
- Ay aja y seguramente porque amas a Luis te andabas besando con otro-.
- Mamá por dios, mañana regresa Luis y lo invité a comer a la casa, te pido por favor que no vayas a hacer ningún comentario de este tipo porque me mata eh me mata y no creo que me quieras llevar flores a un panteón todos mis cumpleaños-.
- Uno, nunca permitiría que te tocara un pelo porque primero lo mato yo antes de que el te haga algo y dos, prometo no decir nada- dijo y Lu sonrió.
Después de comer su fueron a sus respectivos trabajos y Lucero se dispuso a hablar con Manuel para arreglar sus problemas.
Empezaron a grabar sus escenas y cuando les dieron un pequeño descanso Lu supo que era el momento indicado.
- Rosy ¿Viste a donde se fue Manuel?- le preguntó a una de las chicas de staff.
- Si Lu, se fue a su camerino- respondió y Lucero le agradeció mientras se encaminaba al camerino de Manuel.
Llegó al lugar, tocó la puerta y entró al escuchar el "¡Pase!" de Manuel.
- ¿Lucero?- dijo al verla. Había sentido una punzada en el pecho al escuchar su nombre y no su apellido al igual que el tono frio y seco con el que lo había dicho.
- Espero no agarrarte ocupado- dijo apenada.
- Para nada ven siéntate-.
Lucero se sentó.
- Bien, dime, ¿Qué te trae por aquí?- preguntó el bastante serio.
Ella suspiró.
- Manuel, no quiero que sigamos así de distantes- dijo- quiero que volvamos a ser los de antes porque, lo extraño- confesó.
- Sinceramente, yo también lo extraño, y mucho- dijo el.
- Entonces, ¿Volvemos a ser los de antes?- preguntó con una sonrisa.
- ¡Claro que si Hogaza!- respondió en el mismo con de siempre, el que ella tanto quería- Al respecto con el tema, me quiero disculpar contigo por lo que paso el día del aventón-.
- Ya todo quedó olvidado- dijo Lu sonriéndole.
Todo el resto del día volvieron a ser los mismos, los de siempre, Manuel y Lucero.
Al siguiente día Lucero no tenía grabaciones pero paso toda la mañana grabando los capítulos de toda la semana siguiente del programa.
Luis llegaría a las tres y a las cuatro comerían juntos.
Pasaron las horas y por fin terminó. Se fue directo a su casa para revisar si ya estaba todo listo para la comida.
- Buenas tardes- dijo al llegar.
- Buenas tardes señorita- le respondió una de las empleadas.
- Buenas tardes mi niña- le dijo su nana, Amelia.
- ¿Cómo van por aquí?- preguntó asomándose a la cocina.
- Muy bien, ya tenemos lista la ensalada y la lasaña, solo falta que el pastel salga del horno, decorarlo y listo- le informó Amelia.
- Perfecto, ¿Cuánto le falta al pastel?-.
- Unos cinco minutitos-.
- Okey, iré poniendo la mesa y en un momento vengo para ayudarte con el pastel nana-.
- Si niña-.
Lucero puso la mesa y regresó a la cocina. Amelia ya tenía montado el pastel y le estaba untando el betún.
- ¿Te ayudo con las fresas?- le preguntó Lu.
- Por favor-.
Terminaron con todo y metieron la ensalada y el pastel al refrigerador mientras que la lasaña la volvieron a meter al horno para que conservara su calor.
El timbre sonó y Lucero corrió a abrir. Era Luis.
- Hola linda-.
- Hola- respondió ella con una sonrisa un poco fingida.
- ¿Me extrañaste?-le preguntó mientras la abrazaba fuertemente.
- Si-.
- Que fría eh- dijo- ya no me voy a ir tan seguido porque cuando vuelvo me encuentro con una novia algo amargadita y seriecita-.
- Perdón es que estuve toda la mañana grabando el programa y estoy algo agotada pero mejor pasa que la comida se enfría-.
Unos minutos después llegó Doña Silvia.
- Perdón el retraso pero el trafico estaba terrible- se disculpó.
- No se preocupe señora- dijo Luis.
- Hola Luis, me alegra tanto que hayas vuelto- dijo con la sonrisa mas falsa e hipócrita que Lucero había visto en su vida.
- ¿Comemos?- preguntó Lu riendo nerviosa.
Comieron muy a gusto y gracias al cielo, Doña Silvia evitó sus comentarios sobre Manuel que tanto disfrutaba hacer para molestar a su hija.
Después del postre pasaron a la sala a platicar con café.
- Oye nena, se me olvidó preguntarte- Doña Silvia miró a su hija- ¿Manuel y tu arreglaron sus problemas?-.
Lucero se quemó con su café.
- Ya te habías tardado mamita- pensó.
Luis las miró extrañado.
- ¿Qué Manuel?- preguntó.
- Manuel es el protagonista de la telenovela- le respondió Lu.
- Ah, o sea es con el que te besuqueas-.
- Luis, por dios, llevo mas de un mes trabajando con el y te recuerdo que todo es actuación- le explicó- y respondiendo tu pregunta mami- la miró acusatoriamente- si, ya hablamos y resolvimos todo-.
- Que bueno- respondió.
- ¿Puedo saber que es lo que tenían que arreglar?- preguntó Luis.
Lucero no sabía que responder, obviamente no le diría la verdad porque sabía perfectamente que Luis iba y mataba a Manuel y de paso también a ella.
- Pues nada de mucha importancia, tuvimos algunos roces y pues discutimos un par de veces pero como no queremos que nuestras tonterías afecten la novela decidimos hacer una tregua- mintió.
- Oh esta bien- dijo muy poco convencido.
Luis se fue después de un rato y mientras conducía a su apartamento iba pensando en lo de hoy. Decidió tomar sus precauciones con el tal Manuel. No permitiría que ningún imbécil le quitara a Lucero.
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Solo te puedo amar a ti
Fiksi Penggemar(Solo tú 2) Lucero y Manuel Mijares se conocieron cuando ella fue a ver el set de grabación de la telenovela del momento con su mejor amiga y al verlo quedó totalmente flechada, los años pasaron y ella creía haberlo olvidado pero al reencontrarse co...