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Narra Taehyung

- ¿Por qué soy tu inspiración?

- Y-yo... - no sabía que decir, no le iba a decir que me gustaba ¡claro que no lo hare! - Jungkookie, yo...eres una persona muy linda y tu belleza, para mis ojos no existe nada mejor...es decir, eres muy hermoso Kookie, para mí tienes una belleza increíble y que para mis ojos nadie pasa tú belleza.

- Eso es muy lindo de tu parte - sus mejillas tomaron un leve color a carmesí, que cada vez se le empezaron a colocar cada vez más rojas. Kookie se dio cuenta y miro hacia otro lado. Es tan tierno. - ¿Tae continuamos?

- ¿Quieres hacer algo?

- ¿Qué?

- Algo como ver películas, pintar o... ¿ya te quieres ir?

- Mmm...¡Películas!

- Okey, veamos pelis. ¿Quieres que te lleve a tu casa cuando se termine la peli?

- No, ya es mucha molestia. Además tus padres deben de venir y cuando llegue no quiero estar aquí. -dijo lo ultimo en voz baja y algo mas tímido.

- Kookie, yo no vivo con mis padres. Vivo solo.

- ¡¿VIVES SOLO EN ESTA GRAN CASA?!

- Si. -dije aguantando la risa.

- Yo vivo en la residencia de la escuela.

- Cuando te echen vives conmigo.

- ¿QUÉ?

- Solo bromeaba. -hice una cara algo neutral y al mismo tiempo pervertida. Kookie me quedo mirando como procesando lo que acababa de hacer con los labios entre abiertos.

¡DIOS SUS LABIOS, LOS NECESITO PROBAR!

- Viviré contigo. -¡¿QUE?! ¡¿HABLA ENSERIO?!...Ahora era yo el que estaba sorprendido ¿Qué hago? ¿Qué le digo?

- Y-yo no sé qué decir.

¡Claro que no tenemos que decir, nuestro omega nos acaba de decir que vivirá con nosotros!

No es nuestro omega.

Aún.

- ¿Tae?

Nos habla idiota. ¡Responde! Si no reaccionas lo hago yo.

Lo hago yo.

- ¿Cuándo traerás tus cosas?

- N-no lo sé...-Kookie se calló y empezó a mirar a la nada, después de unos minutos hablo. - Podemos iniciar hoy. - dijo en un tono casi inaudible que casi escuche. Mi lobo corre de un lado al otro, ambos estábamos felices.

- ¿Ahora te parece bien traer lo que más necesitas?

- Si. -dijo tímido.

Ambos salimos de mi casa, le insistí a Kookie que fuéramos en mi auto, pero él se negó rotundamente y dijo que prefiere caminar y, ¿Quién era yo para no hacerle caso al omega?. Llegamos a su apartamento era una residencia algo sombria, entramos y subimos el ascensor. Llegamos a su apartamento número 503, muchos pisos para ser sincero. Entramos y me senté, mientras esperaba a Kookie recoger todo. Una chica entro al apartamento de Kookie. ¿Quién era ella? 

- ¡Oppa!

¿¡OPPA?!, Kookie salió corriendo a escuchar esa voz. No se le veía feliz, para nada feliz.

- ¿Quién te da permiso para entrar a mi apartamento? -pregunto ocultando su enojo.

- Oppa, lo siento. La puerta estaba abierta y quise ver. -la chica se acercó al menor, pero este retrocedió unos pasos

𝓣𝓾 𝓨 𝓨𝓸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora