Parte 5: I'd bet my life

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_Narra Daryl_ 

Me invaden los resuerdos. No creo que pueda superar a Lenn, no después de lo que pasó ese día. ¿De qué carajos hablaban? ¿QUÉ JEFA? Creo que perder a Lenna me ha hecho perder la cabeza. 

Ya han pasado diez días y no consigo conciliar el sueño, tampoco cenar, almorzar, ni siquiera cuando estoy solo y nadie me jode. Por otro lado, creo que Amy es muy buena haciendome reir. Creo que en algún momento voy a conseguir olvidarla, o al menos, ya no sentir que su recuerdo me tortura. 

Salí hace dos días, y el Rick ya mandó a Amy a buscarme, junto con Maggie. Traté de que no me vieran, pero la extrañaba. Sí, creo que extrañaba a Amy. Ella era muy hermosa, buena y graciosa, como para no extrañarla. Cuando me pongo a pensar, y no es por comparar, creo que pasar todos estos días con Amy fueron mejores que el que pasé con Lenn. Digo, Lenna... Ya no es más Lenn. Ya volvió a ser Lenna. 

-¿Daryl? _Era Maggie, hablándole a un caminante que se movía por detrás de los árboles. De pronto, Amy se volteó y tenía un caminante al lado. Se le tiró encima, pero yo le disparé un flechazo directo a la cara_ ¿Daryl? ¡Rick va a matarte, idiota!_Me dio un empujón cariñoso_ ¿Por qué te fuiste? 

-Primero, no me hagas el efecto "ametralladora de preguntas", porque no pienso responderte ninguna. Segundo, no me importa; que me maten. ¡Soy un inútil! _Revoleé el cargador sin balas que me dió Maggie a quién sabe dónde_ 

Cuando Maggie se adelantó, a pedido de Amy, ésta se acercó a mí y me susurró en el oído " No creo que quieras que te maten" A eso negué con la cabeza y me limité a seguir caminando. o quería hablar de eso. Se hizo un silencio muy incómodo, porque no respondí, así que ella decidió romper el silencio. 

-¿Fue en verdad tan especial? _Giré mi cabeza hacia ella, haciendo que el silencio vuelva_ Mejor me guardo esas preguntas para mí, ¿Sabes? 

-No, está bien. Nadie se atreve a preguntar, pero sí... Creo que no puedo superarla aún. _Amy posó su mano en mi hombro, haciendo que casi salte del susto. La miré y ella asintió_ 

-Sabes que te apoyo. Siempre, no importa... Nada más importa, ¿Sabes? _Asentí. Le di un pequeño beso en la mejilla, y ambos nos sonrojamos_ Nunca vi  a ningún chico sonrojarse así. 

-Gracias, Amy. _Negó con la cabeza_ 

Llegamos al campamento, donde Rick nos esperaba. Cuando me vió, frunció el seño y sonrió.

-Te tengo una sorpresa, Daryl. _Ahora quien frunció el seño fui yo. No podía creer de qué mierdadas me hablaba_ Quiero decir.... Alguien confesó acerca de lo que pasó con Lenna. _Abrí los ojos cual platos. Ahora que estaba a punto de olvidarla, Rick se aparece con esto_ Podría interesarte... ¿Quieres saber? 

-No... No me interesa. _Rick se sorprendió. Me miró a los ojos y suspiró_ No quiero volver a perder nada más. Ya perdí todo lo que había querido. _Amy frunció los labios. No le había gustado. Por mi parte, comencé a caminar en círculos revolviendo mi cabello de forma desesperada_ 

-Igual quiero investigar. ¿Nos ayudas? _Me detuve en seco y pensé "Podría descubrir quién mierda mató a Lenna, o podría dejar todo en manos de Rick". Opté por invesigar, pero no porque siguiese importando: Lenna ya está muerta. Lo decidí de esa forma porque quería demostrar que ya no me afecta. Que ya no la extraño. Asentí_ Gracias. Siempre es bueno tener un poco más de ayuda, Daryl. 

Me fui a dormir. No quería pensar en nada más que en Le--- En nada. Lenna ya no está, no va a volver, y por má que yo quiera y la extrañe, se fue para siempre. 

Me quedé dormido ni bien apoyé mi cabeza sobre la almohada. Estaba agotado. El bosque no sirve para nada más que para encontrar animales idiotas, y personas putrefactas. 

Soñé. Soñé que Amy y yo estábamos juntos, cosa que no había soñado nunca. Ella y yo, contra el resto de los caminantes, el hambre, el sueño, la vida misma, y hasta la mismísima "jefa". Creo que aún sigo pensando en Lenna. Es que... No entiendo por qué alguie querría secuestrarla: Ella era hermosa, buena y .... ¡Un momento! 

Desperté. Abrí los ojos y vi la silueta de una mujer. Quizá me estaba perdiendo la cena, y alguien me la había traído. Froté mis ojos y pude ver algo que me sorprendió y mucho : ¡Era Lenna! 

-¿Lenn? _Pregunté, mientras trataba de despertarme_ ¿Lenn, eres tu? 

-Nunca me olvides. Eso es todo lo que puedo decirte. _Su imagen se desvanecía_ 

-¡Hey! ¡No! ¡Espera! _Dije, levantándome rápido de la cama, casi cayendo al suelo_ 

-Volveremos a vernos, pero debes asegurarte de que siga en tu mente _Dijo, cuando ya no la veía_ 

Ahí sí logré despertar como Dios manda. Aún era de día, y probablemente no habían pasado más de dos horas. 

Pasada la hora de la cena, me quedé mirado el fuego, aún prendido, tratando de buscar imágenes en él. Mi hermano solía hacerlo cuando estaba muy borracho o drogado. Quizá no hace falta tener químicos encima para poder apreciar alguna figura. 

-No me olvides _Sentí que alguien hablaba a mis espaldas_ Daryl, ¡Daryl! ¡DARYL! _Miré el fuego, y ahí estaba su rostro. Retrocedí dando un salto rápido hacia atrás, horrorizado_ 

-¿Daryl? _Era Rick. Giré mi cabeza hacia él, y aunque intenté tranquilizarme, en mi rostro aún se podía apreciar mi expresión de susto_ ¿Qué te pasó? _Negué con la cabeza_ 

-Nada, nada, nada...... 

-Podría apostar mi vida a que viste un fantasma, Daryl... 

¿Amor? _Daryl Dixon y tu_Donde viven las historias. Descúbrelo ahora