En un mundo en donde los poderes destacan, habrá una persona capaz de alterar la realidad de todos, literalmente.
Nunca combines la tensión mental y emocional, todo puede salir mal.
_________
Todos los personajes le pertenecen Kōhei Horikoshi, el...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Tres días habían pasado desde el ataque en el bosque, en donde Atsuko y Bakugo habían sido secuestrados por la Liga de Villanos. Ninguno de los dos podía hacer uso de sus respectivos quirk al estar completamente inmovilizados. Asimismo, en aquel tiempo Shigaraki intentaba convencer a los dos adolescentes para que se unieran a ellos, pero ninguno daba respuesta, no fue hasta que al tercer día que decidieron llevar a ambos hacia el bar, en donde se encontraba toda la Liga.
Lo único que ambos pudieron escuchar fue la conferencia de prensa por parte de la U.A. en donde se encontraba el director Nezu y los profesores Aizawa y Sekijiro Kan pidiendo disculpas por lo sucedido en aquel día.
—Que raro... ¿Por qué critican a los héroes? —preguntó Shigaraki a los dos estudiantes de la U.A. — Solo trataron con las cosas un poco mal, ¿Es porque su trabajo es proteger? Todos cometen uno o dos errores, ¿Se supone que sean perfectos? Los héroes de hoy son demasiados rectos. ¿No creen?
—Cuando reciben compensación para proteger a la gente, los héroes dejan de serlo. — habló Spinner ante lo que había visto en la televisión. — Es lo que Stain enseñaba
—El extraño sistema de transformar la vida de la gente en dinero o gloria... la sociedad que se apega a las reglas... los ciudadanos que culpan a los perdedores en vez de alentarlos... —Atsuko escuchaba atenta a su relato, pero tenía ganas de estornudar por el polvo, posiblemente si hacía eso ganaría la risa de alguien o un castigo. — peleamos para preguntar: ¿Qué es un héroe? ¿Qué es justicia? ¿Esta sociedad en verdad es justa? Haremos que todos piensen. Pensamos en ganar, también te gusta ganar, ¿Verdad? —la mirada de Bakugo fue dura, era obvio que Shigaraki lo había estudiado, todo para que pasara a su lado.— Dabi, remueve sus ataduras
El mencionado giró su cabeza hacia el líder de la Liga de Villanos, mirándolo incrédulo, sabiendo que aquella era muy arriesgada
—¿Eh? Este chico se va a volver loco contra ti, ¿Sabes?
—Está bien. Lo trataremos como un igual, ya que lo reclutamos. Además, en esta situación, sabe si puede ganar o no, ¿Verdad, estudiante? — dijo Shigaraki mirando esta vez a Atsuko, sabiendo que su compañera era la que estaba en riesgo en caso de que él quisiera hacer algo en su contra.
Dabi no dijo nada al respecto, él pensaba que era mejor convencer a la adolescente que al rubio cenizo, puesto que ella se veía más vulnerable a que aceptara. Aún tenía muchas dudas, y al parecer Shigaraki no estaba, en ese momento, a responderlas.
—Twice, libéralo. — ordenó el villano al hombre de traje blanco y negro.
—¿Qué? ¿Yo? —cuestionó él con confusión.
—Hazlo.
—Rayos... — resopló con molestia, tampoco quería que Bakugo le explotara la cara en caso quisiera responder.
—Me disculpo por usar métodos tan bruscos, —habló esta vez Mr. Compress, mientras Bakugo escuchaba con desinterés a los villanos. — pero entiende que no somos una turba queriendo cometer delitos. No te raptamos por accidente.
