En un mundo en donde los poderes destacan, habrá una persona capaz de alterar la realidad de todos, literalmente.
Nunca combines la tensión mental y emocional, todo puede salir mal.
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Todos los personajes le pertenecen Kōhei Horikoshi, el...
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Atsuko se encontraba a un lado de Deku escuchando el análisis que daba de la primera pelea, y es que una vez que un equipo ganara, ella entraría al gimnasio para poder ir contra ellos. Qué mejor que escuchar las fortalezas y debilidades de los alumnos en heroísmo que de su mejor amigo fanático de quirks.
—¿Te sientes preparada?
Preguntó el chico de cabello verde una vez terminó de anotar toda la pelea entre el primer grupo, el cuál había sido victorioso la clase A. Su amiga le miró por un momento y asintió, para luego volver su vista al frente.
—Creo que sé más o menos cómo manejar este ejercicio... aunque quisiera saber si puedo escapar ante el quirk de Shinso. —admitió en voz baja eso último, logrando sorprender a su amigo.
—Si no fuera por... mi quirk — dijo Izuku para evitar hablar de los vestigios. — No podría librarme del lavado de cerebro.
—Solo un golpe o algún movimiento para liberarme, ¿No es así? — él asintió. — Ya veo, ¿me prestas tu block un rato? —Izuku asintió y le dio su libreta. — ¿Me puedo quedar con esta hoja? — señaló la hoja en blanco, logrando que Izuku le mirase extraño, pero aceptó dejándola que la arrancara.
—Atsuko. — llamó Aizawa, quien estaba al lado de Vlad King, la mencionada solo se levantó del suelo, le guiñó un ojo a su mejor amigo y caminó hasta ellos, a lo que todos los alumnos le prestaron atención, porque entendían que ella sería su próxima contrincante en caso ganaran. — Habrá dos reglas, la primera es que no usarás tu energía escarlata durante la prueba, al mínimo uso de esta, el equipo contrario tiene la victoria.
La adolescente se cruzó de brazos, no estaba contenta por aquella regla, su energía escarlata era como un sexto sentido que le advertía del peligro o los ataques, ya que con ello podía detener a la persona o cualquier objeto a medio metro de distancia.
— Lo decimos para que no acabes este entrenamiento en un instante y de tal manera que evites gastar toda tu energía. — explicó el profesor de cabello negro, a lo que Atsuko asintió, aceptando tal regla.
—La segunda regla es que no deberás acceder a los recuerdos de tus compañeros, queremos que respetes por esta vez su privacidad. — dijo Vlad King, a lo que ella nuevamente asintió, ya que le parecía comprensible dicha regla.
Tampoco es que quisiera que husmearan en su cabeza.
—Por último, si acabando el tiempo no has atrapado siquiera a tres de tus compañeros, ellos ganan. — Atsuko chasqueó la lengua. — Pero eso no significa que los demás deban escapar, ellos tienen la misión de atraparte. — advirtió a los demás que escuchaban las reglas.
—De acuerdo, profesor. — aceptó ella. —Deséenme suerte. — dijo esta vez mirando a Momo y a Izuku, quienes pudieron ver sus ojos de color rojo, dejándolos confundidos, se suponía que no debía hacer uso de energía escarlata, más sus ojos volvieron a la normalidad.
