Chapter 27

10 1 0
                                    


–Y es por eso que Alysa estaba tanto conmigo, ella me ayudaba– le explicaba con media sonrisa –Lamento no pasar tanto tiempo contigo–

Cali y Liam cumplían 3 años de estar juntos. El último había querido preparar algo especial para la castaña, por lo que acudió a la griega, quien no dudo en ayudarlo. El problema fue que Liam no había notado el poco tiempo que había pasado con su novia, por lo que iba a disculparse por los próximos días.

La castaña, en cambio, se sintió un poco culpable al pensar que su novio simplemente se había olvidado de ella, por lo que cada que Liam se disculpara iba a entenderlo.

Algo que lograba que su relación fuera sana, era que siempre hablaban, si había algún inconveniente lo charlaban y aclaraban las cosas.

–Gracias por todo– corrió a un lado el desayuno y se estiró para abrazar al de ojos marrones –Te amo–

–Yo también te amo– correspondió cerrando sus ojos –Mi madre– dijo al cabo de unos minutos –Quiere verte para darte un regalo por tu cumpleaños– se separaron un poco –Se que han pasado unas semanas, pero tú la conoces–

La de ojos cafés sonrió, su suegra siempre se acordaba y le daba un regalo, Cali hacía lo mismo con esta –Bueno, gracias–

Yéndonos un poco más lejos, específicamente en el campus, una joven pareja se encontraba hablando.

–Esta tarde no puedo, tengo cita con la psicóloga– explicaba mientras caminaba.

–Tienes razón, lo había olvidado– respondió el azabache –Tal vez, luego de la cena– propuso, era consciente de que a la de larga cabellera aun le incomodaba hablar respecto a sus citas con la doctora Relish.

Jhon le daba su espacio, poco a poco la notaba mejor, cosa que lo hacía sentir mejor. Se sentía orgullecer con el progreso de Pía, cada que podía, intentaba ayudarla con lo que sea. Quizá tan solo se trataba de escucharla o simplemente hacerle compañía.

–Tal vez– respondió la de menor altura –Oye, cómo van tus clases de italiano?–

–Pues, Nico por fin pudo decir bien mi apellido– le sonrió –Pero además de eso, Tutto procede bene (todo va muy bien)–

Pía sonrió ante aquello y recostó su cabeza sobre el hombro del, tan solo por unos meses, menor de los dos. Sonreía porque poco a poco, todo se arreglaba y se acomodaba, poco a poco estaba más tranquila. Las citas con la doctora Relish estaban ayudándola mucho, estaba progresando.

Al principió creía que acudir a una psicóloga era solo para casos extremos de locura y no quería que la confundieran con una, una mala imagen de lo que los psicólogos hacia. Tenía muchos prejuicios y minimizaba su problema, cosa que supo entender que estaba mal. Entendió que acudir a un psicólogo no es malo, por su contrario, ellos te ayudan a mejorar, te escuchan y a veces necesitas desahogarte con alguien que no sea de tu entorno y para que te de su opinión desde otra perspectiva.

-.-

–Y con esto finalizamos– decía soltando un leve suspiro al final –Espero que te haya ayudado–

–Oh, claro que si– decía la de cabello azabache –Gracias por todo Harry– le dedicó una sonrisa.

El mencionado también sonrió, por fin había terminado esto. A pesar que explicarle a Santana no le molestaba, ya sentía que se había vuelto un poco molesto. Cada vez que estaba por pasar algún momento con Louis, ella aparecía.

Lo que si le parecía raro era que la chica aparecía justo en esos momentos, podía estar con cualquier otra persona, pero Santana solo aparecía si el de ojos verdes se encontraba cerca del castaño. Esa fue una de las razones por las cuales el par se encontraba un poco mas distanciado.

-Coláste Deliah- //L.S//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora