Todos me miraron raro. Era más que obvio que nadie había sido informado, así que saqué la carta que escribió su entrenador aceptando ser la gerente del grupo.
Todos me miraron, y después de leer la carta se les formó una sonrisa a todos.
-En ese caso lo siento- se disculpó el ojiazul - Soy Paolo Bianchi, y estos son Marco, Vento, Raffaele y Angelo.
-Encantada- respondí con una sonrisa.
-Justo ahora íbamos a entrenar- dijo Paolo
-Voy en seguida, primero me gustaría guardar todo lo de la maleta- dije un poco tímida por todo lo que había pasado antes.
- yo te enseño tu cuarto, de mientras chicos- Paolo se dirigió a los demás- id yendo sin nosotros, vamos ahora.
Los chicos asintieron y salieron, dejándonos solos a Paolo y a mí.
Subimos las escaleras y abrió la puerta de una de las habitaciones.
- Este será tu cuarto. El mío está a la izquierda y al otro lado está el de Gianluca- dijo - le conocerás ahora, no te preocupes- sonrió.
- gracias por todo Paolo- sonreí de la misma forma.
Salió del cuarto para dejarme guardar las cosas, y de mientras me quedé pensando en qué me había pasado.
Nuestra conversación fue tan seca... Normalmente no paro de hablar. ¿Porqué sólo podía sonreír como tonta cuando estaba el?-Serán los nervios, Laia, no te empieces a montar ideas raras en la cabeza- dije para mí misma.
Organicé todo lo que tenía que organizar y cogí una de mis libretas y un lápiz y salí lo más rápido que pude.
~Paolo Bianchi~
Cuando salí del cuarto de nuestra nueva gerente me agarré el pecho.
Me iba demasiado rápido y no sabía porqué.
No podía negar que era muy guapa.
Tenía el pelo castaño con reflejos pelirrojos y los ojos eran de un color miel precioso.-Deja de pensar en eso ahora Paolo, tienes que ir al entrenamiento- dije para mí, y salí corriendo rumbo al campo.
Cuando llegué pedí que pararan todos de entrenar, y les expliqué lo de la nueva gerente.
- Algo nos había dicho ya Angelo- dijo Gianluca- pero no nos han avisado, ¿Seguro que es una gerente de verdad?
-sí, nos enseñó la carta y esa letra era la del entrenador- respondí.
Paramos de hablar cuando la vimos correr hacia aquí con una libreta y un lápiz en la mano.
~Laia Arai~
Bajé las escaleras del campo y fui directa a donde estaban los chicos.
-¡p-perdon por el retraso!- grité haciendo una reverencia.
-N-No hace falta que te disculpes así Laia- dijo Paolo, algo incómodo por la reverencia que hice.
-Lo siento...- dije tímida.
-Bueno, este es el equipo que representa a Italia- dijo sonriendo.
Todos se presentaron, y empezaron a hablar de fútbol entre ellos.
Usaban palabras complejas que sólo un experto en el tema sabría qué significan. Y yo era una experta en el tema.
Me miraban de vez en cuando, creo que piensan que no tengo ni idea de lo que hablan, pero no era así. De todos modos, no me metí en la conversación y solo empecé a pensar en super técnicas según lo que hablaban.
Escribí los nombres de todos en la parte de atrás del cuaderno y por delante empecé a escribir las super técnicas que se me ocurrían.Paolo no dejaba de mirarme, pero el parecía fuera de la conversación. Como si sólo estuviera atento a mí, y en cuanto me di cuenta de eso los colores rojizos empezaron a invadir mi rostro.
-Se acabó el tiempo de descanso- dije
Todos me miraron, prestándole atención.
-Como el entrenador no está, yo tomaré ese mando. Gianluca, Raffaele- giraron a verme - Quiero que probéis esto.
Les enseñé el cuaderno. Se quedaron mudos cuando vieron que era parecido a las tácticas de las que estaban hablando.
-un ataque combinado entre centrocampista y delantero. Os permitirá evadir a los demás que vayan a venir a robar el balón si es que vienen muchos. Se llama agujero negro.
Todos se quedaron sorprendidos. Supongo que es lo que tiene que llegue una gerente de la nada y que encima planee una super técnica así de la nada, pero en verdad ya estaba casi lista cuando llegué. La idea era que la usaran Jack y Harley, pero no pudo ser...
-Pero no os entrenareis aquí, tenéis que ir al mar- todos me miraron sorprendidos.
-Pero no pueden entrenar en el mar, es de locos- dijo Paolo.
-Para conseguir esta super técnica se necesita un control del balón increíble, y el mar es el mejor campo para aprender a controlar el balón y juntar su alma con él.
Todos se callaron y les di el balón a Gianluca y a Raffaele para que fueran a la costa a practicar. -Los demás, ya deberíais de estar entrenando-
-¡Sí!- dijeron todos al unísono.
No quería parecer dura en mi primer día, pero sé cómo es Mark y los chicos, y si no hago algo desde ya, por muy buenos que sean los italianos, van a perder.
Me quedé preparando las botellas de agua y las toallas para todos, y cuando terminé empecé a apuntar todo lo que veía en la libreta.
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no dejes de amarme (Paolo Bianchi)
FanficLaia Arai. Amiga de los integrantes del Inazuma, tiene un accidente de tren mientras iba camino a su casa. Por motivos personales tuvo que cambiarse de país, y acaban viéndose las caras otra vez en el FFI, sólo que esta vez se encuentran a una Laia...