MI PRÍNCIPE SI FUE UNA BESTIA. {En Edición}

quiero que dure

Me quedo acostada con la sábana que cubre lo necesario y lo veo como como entra con una gran bandeja de frutas y dulces.

- ¿Alimentarias a un batallón?

- No, alimentare a la mujer que amo, seguro estás cansada y tendrás hambre. - muevo mi cabeza en gesto de negación,- ¿Sueño? - le digo que no,- ¿Te duele algo? Quieres que te lleve al doctor?

Se trata de levantar y lo tomo del brazo hacia mi.

- Te quiero a ti.

Me sonríe y aparta la charola, fundiendo nos en otra ola de deseos que termina en besos desenfrenados y me lleva hasta su ducha haciéndome suya mientras el agua recore mojando todo mi cuerpo, me siento viva, libre, amada y por primera vez me siento yo, la yo soñadora y con ganas de vivir de nuevo y estás ganas me las está dando el, nos bañamos besamos comemos y me dice que quiere ir a un lugar conmigo y que no acepta un no como respuesta, asiento y me vuelve a besar.

Miró la hora y salí en la mañana de casa de Carla y ya falta poco para las siete de la noche, enciendo el teléfono y tengo llamadas perdidas tanto de mi padre como de mi amiga y un sin número de mensajes.

- Aló, -me dice papá,- cariño dónde estás, ¿ Te encuentras bien, te pasó algo, cómo estás amor? Dime qué estás bien y dónde para ir a buscarte.

- Papito estoy bien no te preocupes, dile a Carla que ya la llamo, no quiero que te alteres tuve que hacer algo muy importante y por eso demore, - mira a leo y me giña un ojo tomando mi mano y besándola,- después te llamo.

- Ay cariño mío, tenía mucho miedo de que te hayan dicho algo y hayas salido y sea una mentira y estuvieras en peligro. Sabes que te amo con mi vida amor y si te pasa algo me muero.

Lo escucho sollozar y me siento tan mal, yo también lo amo y sufriría sin el.

- Perdón papá, disculpame por preocuparte, te juro que no volverá a pasar.

- Está bien cariño perdoname tu a mi por meterme en tu vida, cuídate amor, ¿ Dime a qué hora vendrás? ¿Donde estas cariño?

Dudo si decirle o no así que me quedo callada por un momento pero le digo que estoy en casa de Leonardo.

Escucho como suspira y me dice que se lo pase.

- ¿Quieres hablar con el? - leo se pone serio y me tiende la mano para que le de el teléfono,- si está bien.

- Hola señor tenga usted una buena noche, sí señor, - escucho a mi padre del otro lado y le está diciendo muchas cosas y temo que sea algo malo,- sí señor. No señor pierda cuidado, doy mi vida por ella... Esta bien, señor. - le dice y hace una pausa,- quiero llevarla a un lugar para que se distraiga y despeje su mente y quería pedirle permiso, si claro que sí, no, no sera mucho tiempo solo unos días, mi casa... - leo se ríe y siento un poco de calma,- también usted, si yo le aviso cuando regremos. Esta bien gracias.

Me da el teléfono y le pregunto que dijo pero solo se levanta de hombros sonriendo y me dice que cosas de hombres.

- Cami sigues ahí.

- Si padre aquí estoy.

- Quiero que te cuides mucho y trata de descansar, olvidate de todo y solo disfruta, te amo mi princesa, nos vemos luego, besos... Te amo.

- También te amo.

Me cuelga y le pregunto a Leo que a donde vamos pero me dice que es sorpresa y que es un lugar que no visita desde hace mucho tiempo y hoy es un momento perfecto.

Llamo también a mi amiga y me dice que la decisión que yo tomé ella la respetará y más si se trata de mi felicidad y está segura de que leo lo sea. Pero re exhorta por no haberle avisado y evitar que se preocuparan dice que Estubo a punto de salirme a buscar a casa del indesiable con todo un escuadrón de policías y todo lo necesario para dar conmigo, me río de imaginar su cara y sus gestos dramáticos, me dice lo mucho que me ama y le digo lo mismo, antes de colgar dice que esperara con ansias mi regreso y quiere saber todo con lujos de detalles.

****

Salimos de casa y me lleva al centro comercial diciéndome que escoja ropa fresca sin importar el costo que el se encarga y que no piense en eso y que solo disfrute.

Tomo unos vestidos hasta las rodillas y dos para la noche, no se dónde me llevará pero es mejor prevenir, compre un bolso grande para que entre todo y unas sandalias.

Llegó caja y el también con muchas cosas en sus manos y en un carrito, me río al ver que compró despensa y unas botellas de vino y muchas cosas más y pareciera que fuera comida para un año.

Me pregunta si escojere algo más y le digo que no, pero él insiste y recuerdo mis dulces favoritos y los voy a buscar; regreso y el ya ha pagado todo así paga lo que llevo y salimos, tomamos carretera otra vez y siento su mirada sobre mí y sostiene mi mano entre la suya y la besa con delicadesa y pone música suave.

- Espero que te guste, - me dice.-

- Donde sea, que sea contigo, no sabes lo feliz que soy en estos momentos.

- Me alegras el corazón, amo verte feliz esa es mi mayor recompensa y podría pasar el tiempo que sea el dolor que sea y solo con el echo verte sonreír me bastaría para saber que la vida es bella por qué tú eres mi vida, te amo tanto mi hermoso ángel.

- Nunca en mi vida había sido tan feliz y tú eres el motivo de esa felicidad, te amo Leonardo, no necesito más tiempo para saberlo, solo verte y ver que eres tu.

Se estaciona en la orilla de la carretera y me toma haciendo que quede sentada en sus piernas y me besa con esa pasión que solo leí en las novelas y que pense que jamás me podría pasar pero que aquí estoy disfrutando y viendo cómo este hombre que pasó de una simple casualidad en un día que terminó con todo, sea mi más bella oportunidad, amo su forma de ser y esa manera tan peculiar que tiene de hacerme sonreír con el solo echo de pensar en el no importando en las circunstancias que me encuentre.

Mis ojos se emocionan al ver dónde estamos llegando y a lo lejos veo el mar en todo su bello explendor, cuando tenía 16 fue la primera y la última vez que estuve en el, llegamos a una casa enorme y el sonido de las gaviotas se funde el que generan las olas al encontrarse una con otra, el lugar es hermoso y mis ojos se llenan de lagrimas de inmensa felicidad al ver este lugar, siento que aquí puedo dejar mis penas y todas las angustias que me atormentan.

Me quito los zapatos y corro hasta sentir el agua en mis pies, paresco niña riendo y dando vueltas pero es que así me siento y sé que nada empañara esto.

Me quedo viendo a la nada y siento como me abrazan y veo a leo pero cuando lo voy a besar me toma en sus brazos y corre conmigo hacia el agua y reímos los dos. Pasamos un rato así y salimos hacia la casa, entramos y me enamoro más del lugar, todo está perfecto.

Esta casa es de el pero hace más de un año que no venía, pero paga para siempre esté limpia y ordenada, dice que se quisiera quedar a vivir en este lugar conmigo pero que lamentablemente los compromisos lo impiden pero me hace prometer que cada vez que tengamos oportunidad nos escapamos a este paraíso y le doy un si inmediato.

Sale por las cosas que están en el auto y aprovecho para recorrer el lugar, la vista perfecta que tiene hacia todo el majestuoso mar es lo que más me gusta, la sala en grande y muy bien amueblada, tiene tantas cosas pero me siento en una de las mesedoran que están en el balcón. Cuerpo los ojos y me estoy quedando dormida cuando lo siento acostarse a mi lado y jugar con mi cabello.

- Eres tan hermosa y tan perfecta que mi corazón no puede dejar de recitar versos de amor, ese amor que tú me brindas y por qué soy capaz de todo, solo basto un "hola"  para darme cuenta que es contigo que quiero estar y es en tus brazos que quiero dejar mis esperanzas mis sueños y todas mi ganas de vivir, eres como un bello amanecer dando entrada a un nuevo día, tus ojos son el ocaso que ilumina mi alma y me muestra el camino hacia mis sueños más anhelados.

- Eso es muy hermoso, - le digo.-

- Tu eres mi bella inspiración y al único ser que le soy capaz de entregar todos mis sueños anhelos y gans de vivir.

Me lleva hasta la habitación y le damos riendas sueltas a nuestro amor.