Mentiras

Capítulo 3 | Recuerdo

Capítulo 3 | Recuerdo

Algo en tus ojos... Dime ¿Quién soy?

Sasuke

Lo recuerdo bien, recuerdo perfectamente aquel soleado día en que la vi por primera vez, tenía apenas doce años, y me encontraba con mis padres en la clínica de los Nara, porque tenía un muy fuerte dolor de estómago causado por la comida instantánea de Naruto, así que mis padres preocupados me habían llevado ahí, él lugar donde por suerte era atendido por uno de los mejores médicos, alguien en quien mi madre había puesto mi salud desde el día uno de mi vida. Ella entro acompañada de Yamanaka Ino, la rubia de ojos azules que estaba -por desgracia- en la misma clase que yo, ambas entraron, disculpándose con mis padres por la interrupción, y las primeras palabras que escuche de sus rosados labios se quedaron clavadas en mi memoria aunque fueran insignificantes —Disculpen la interrupción tan repentina, pero padre, el señor Nara nos ha mandado por la medicina de Shikamaru — Su voz era tan dulce, tan pacifica, como si tuviera el control de todo lo que pasaba alrededor. Ella ni siquiera se fijó en mi insignificante presencia, pero a mí, desde ese día me fue imposible no notarla.

La segunda vez que le vi fue en el colegio, cerca de un año antes de que entráramos a la preparatoria, a los difíciles 15 años, ella hablaba con Naruto durante el almuerzo, parecían llevarse realmente bien, ya que ella le dio la mitad de su almuerzo, no había cambiado mucho respecto a la primera vez que la vi, lo único diferente era que su cabello rosa era mucho más largo, pero su voz seguía siendo tan dulce como la primera vez. Después de eso, la veía en todos los lados posibles, caminando con algunas personas, en el almuerzo, sentada con personas que eran compañeros y amigos míos, y aun así, ella y yo nunca nos cruzamos de frente, ni hablamos, ni nada que se le parezca, nunca tuve una oportunidad real de ver su rostro de frente, y aun cuando la hubiera podido tener, solo podía observar sus bonitos ojos brillantes.

Tampoco conocía su nombre, o al menos no terminaba de quedarme del todo claro, debido a que Naruto solo sabía decir —Saku-chan— También, siempre fui consciente de que a él le gustaba ella, porque no sabía hablar de otra cosa que no fueran las diez mil maravillas que ella hacía cada día, más bien, todos a mi alrededor no sabían hablar de otra cosa que no fuera ella, sabía igual que era la mejor amiga de Ino, porque siempre tenía una cosa nueva que decir sobre su amiga, y escuché una que otra cosa de parte de Shikamaru, quien le llamaba, la hija del mejor médico en la clínica. Ella siempre estaba ahí, en cada vuelta que daba, y no, no es que la acosara ni nada, simplemente se volvía inevitable no notarla, siempre destacando en todo, siendo demasiado inteligente, siempre estando en todos los lugares que fuera posible, incluso me atrevía a decir que era una verdadera metiche de primera. Pero, ella dejo de aparecer en todos lados hace recién dos años, cuando ingrese a la universidad, y la gente a mi alrededor dejo de mencionarla, hasta un día antes, cuando Naruto dijo que era el día de decirle que se casaría con Hinata, no pude tener más en mente que la imagen de la chica sonriendo con Naruto, porque habría que ser tontos para no darse cuenta que ella también tenía sentimiento por él, me sentí instantáneamente mal por ella, y con deseos de golpear a Naruto hasta que se me cansara la mano. No tengo dudas sobre sí él es un buen sujeto o no, lo es, pero es demasiado estúpido para mi gusto.

Seguro que a su padre le parecía un negocio por demás perfecto casar a esos dos idiotas, y Naruto no se iba a oponer a unir la cadena de alimentos más importante con los imponentes restaurantes de los Hyuga, porque era perfecto para ambas partes lo vieras por donde lo vieras, aunque su corazón estuviera en otro lado.