Capitulo 21

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Capitulo 21
Pueden escuchar esta canción hasta que lean que el ascensor se detiene.

Lexie junta lo más rápido que puede todas sus cosas del escritorio y camina al ascensor mientras que en su cabeza no deja de repetirse la voz de Bokhee diciéndole a Mark que en la noche tendría una cita a ciegas causando que su corazón latiera con más fuerza y es con esa misma fuerza con la que presiona varias veces el botón del ascensor esperando que esté llegue pues solo desea salir de ahí antes de que sus lagrimas tengan oportunidad de escapar.

Los segundos se hacen eternos hasta que por fin el ascensor abre sus puertas.

Lexie entra al ascensor sin dejar de pensar en que todo lo que pasaron, en que esa ultima noche en el barco y esas promesas fueron una perfecta mentira del imbecil de Mark causando que sus ojos empiecen a verse llorosos al tiempo que el elevador esta por cerrarse pero una mano lo impide abriéndose paso.

Mark: Lex, espera
Lexie: ¿qué estás haciendo?  —las puertas del ascensor se cierran—
Mark: impidiendo que te vayas
Lexie: ¿porqué?
Mark: no había terminado de hablar contigo
Lexie: pero yo si —enfadada—
Mark: —se rinde— no fui completamente honesto contigo. Hay otra razón por la que voy a tener una cita con otra persona
Lexie: —voltea los ojos— no me interesa escucharla
Mark: por el amor De Dios. ¿Podrías dejar de ser tan terca por una vez en tu vida? —va rompiendo la distancia entre ellos causando que ella quede atrapada entre la pared y su alta figura—

Aquella acción hace que el estómago de Lexie de un vuelco y que sus piernas se debiliten. En su cabeza vuelve el recuerdo de aquella maldita primera vez en ese ascensor y como fantaseaba con algo así pero entonces vuelve en si y se regaña mentalmente por permitirse fantasear cuando se supone debería estar furiosa.
Mark: —desconcertado— ¿no hay respuesta? —claramente se encuentra sin palabras así que se limita a sacudir la cabeza— bien, porque ahora es momento de que me escuches. No puedo estar cerca de ti sin volverme loco. No puedo sentarme en mi oficina todo el día, sabiendo que estás al otro lado de la pared. Maldición ni si quiera puedo estar en el mismo edificio que tu sin sentir deseos de ir a besarte, llenarte de mimos y también de sacarte la ropa. No se lo que me haces pero no confío en mi mismo cerca de ti y ahora que definitivamente estás fuera de los límites... —se extiende hacia abajo y le quita un mechón de pelo del rostro... luego cierra los ojos como si se estuviese conteniendo— tenía que hacer algo, cualquier cosa para sacarte de mi mente. Estaba aterrado de quien quiera que le haya dicho a Vega se diera cuenta. Tengo la cara perfecta de póker en la corte pero cuando tú estás cerca no tengo remedio. Salir con otra persona parecía una buena forma de recuperar mi compostura pero aún así estoy parado aquí, con ganas de besarte. —golpea el botón de parada de emergencia, deteniendo el ascensor—

Lexie encuentra en sus ojos la verdad y esta consiente de lo arriesgado y sexy que se siente todo en ese momento y Mark de limita a pasar las yemas de sus dedos por sus ojos limpiando los rastros de las pequeñas lágrimas que habían escapado. El aire entre ellos se siente tan electrificado, los ojos de ambos se oscurecen a causa del deseo y es tan evidente la forma en la que pueden leer los movimientos del otro.

Lexie con un brazo rodea el cuello de Mark y con la otra mano acaricia su cuello mientras que Mark la tiene tomada por la cintura y después de tanto sus labios se encuentran en un beso que necesitaban más que al mismo aire.

Lexie: —se separan un poco para tomar aire— ¿cuanto tiempo pasará hasta que alguien se alerte de que el ascensor se ha detenido?
Mark: cinco minutos, máximo
Lexie: entonces será mejor que lo hagamos rápido

Sentencia de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora