Sentencia de amor

Capitulo 3

Capítulo 3

A la mañana siguiente salen muy temprano al aeropuerto para tomar su vuelo con destino a Barcelona.

Después de documentar y pasar todos los filtros se encuentran en la sala de abordar ambos inmersos en su mundo hasta que escuchan por el sonido aeropuertal la indicación de que tienen que abordar su vuelo.

En el avión a pesar de que sus asientos están juntos solo hablan lo necesario y mayormente su conversación gira en torno al caso.

Unas cuantas horas transcurren del vuelo cuando Lexie decide ir al baño a ponerse más cómoda finalmente sería un largo vuelo y no tenía ganas de pasarlas incómoda y menos cuando vio que de los dos era la más arreglada contrarió a lo que pensó Mark había optado por prendas cómodas y no por su característico traje.

Después de un rato Mark vio a su asistente volver del baño con un atuendo que parecía ser su pijama pensó en lo bien que lucia aquella prenda y lo mucho que le gustaría quitársela.

Las horas transcurrieron hasta que ambos cayeron dormidos y sin darse cuenta ella recargó su cabeza en el hombro de él mientras que él recargó su cabeza encima de la de ella, cualquiera que los viera podría pensar que eran una pareja.

•••
Después de un largo vuelo y debido a la diferencia horaria al llegar a Barcelona ya es la mañana del día siguiente.

Al llegar al hotel Lexie se adelanta a la recepción para checar su reservación mientras Mark no pierde la oportunidad de coquetear.
Recepcionista: buenos días, ¿en que puedo ayudarle?
Lexie: tengo una reserva a nombre del señor Sloan. Mark Sloan
Recepcionista: permítame ir a ver
Lexie: gracias
Recepcionista: efectivamente ha reservado la suite presidencial
Lexie: —preocupada— pero... definitivamente reservé dos habitaciones
Recepcionista: si, la suite presidencial tiene dos dormitorios

Lexie creyó haber reservado dos dormitorios en cuartos distintos esto definitivamente podría ser un problema.
Lexie: ¿hay otras habitaciones disponibles?
Recepcionista: no, señorita, casi nunca tenemos disponibilidad de última hora y menos en esta época del año
Lexie: ¿ni si quiera una habitación más barata?
Mark: —ve que Lexie tarda demasiado así que se acerca— ¿porque tardas tanto y que es eso de una habitación más barata? , ¿no usaste la tarjeta de crédito que te di?
Lexie: lo hice, pero tenemos un pequeño problema parece que nos he reservado la suite del penthouse para compartir
Mark: —con fingida indignación— Lexie, soy tu jefe. Este es un viaje de trabajo pensé que los límites eran claros
Lexie: —asustada— ¡lo son! No quise...
Mark: —con un poco de diversión en su voz— si no te conociera mejor, pensaría que estás tratando de seducirme
Lexie: —molesta— ¡señor Sloan! ¡Eso es falso! Yo... —Mark le hace una seña para que guarde silencio mientras suelta una carcajada inmediatamente su tono de voz se vuelve divertido— no voy a mentir, seducirte me ha pasado por la mente ¿tu no lo has pensado?
Mark: tal vez... pero no mezclo negocios con placer. Así que por favor, comportarte en mi suite
Lexie: ¿tú suite?, ¡es mi reservación!
Mark: y mi tarjeta de crédito. Como sea me quedare en mi lado y tú en el tuyo
Lexie: trató hecho —sonríe amigable—
Recepcionista: —aliviado— perfecto, permitan que el encargado les muestre su habitación.

Bien dicen que entre broma y broma la verdad se asoma y ese par confeso más demasiado.
•••
El botones lleva sus pertenencias a las habitaciones y cada uno elige sus habitaciones dentro de la suite.

Estando Lexie en su habitación intenta ordenar sus pensamientos esto era lo que menos necesitaba una puerta era lo único que los separaría mientras que el baño lo compartirían era demasiada la incertidumbre en aquel momento.