Capítulo 53 : Frenesí en la autopista

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- Entonces dices que apenas escapaste volviste a casa, ¿pero como es que supiste en donde estabas? – cuestionó la castaña curiosa apenas y todos se había reunido sentándose sobre unos viejos muebles para escuchar la historia.

- ¿O como es que escapaste? – Lincoln también pregunto curioso e intrigado.

- Les contaré la historia – dijo la pelinegra sentándose junto a su pareja en un mueble para dos.

Todos hicieron silencio y prepararon sus aperitivos para comer mientras escuchaban la historia que la joven Loud estaba por relatarles.
 
Narración de Lucy:
 
Lo único que recordaba antes de eso es que Lana me inmovilizó usando una cuerda ya que Lynn y yo estuvimos peleando, de ahí llegaron los del hospital y me sedaron, no supe la verdad cuanto tiempo permanecí dormida pero para cuando abrí los ojos ya estaba en una de esas habitaciones acolchadas mientras usaba una camisa de presión.

Lo primero que se me ocurrió fue librarme de mis ataduras, pensé de inmediato en ayudarme en los resortes de los colchones que me rodeaban, con eso a mi favor me dispuse de inmediato a retirar la esponja usando mis dientes.

Hice un desastre, la sangre que salía de mis encías salpicaba por los alrededores, las puntas salientes de los resortes me lastimaban con cada pedazo de colchón que sacaba, cuando por fin quité lo suficiente use los mismos filos para deshilar y romper la camisa de presión que traía puesta, de nuevo eso me tomo mucho tiempo, muchas heridas y mas sangre.

Una vez estuve libre pude pensar con mas claridad, ahora necesitaba una salida, pensé que la habitación debía tener ductos de ventilación escondidos en alguna parte, tuve que acercar mi oído a las paredes esperando hallar un sonido hueco o algo que me diera una pista.

Creo que tuve suerte ya que nadie en todo ese tiempo apareció para frustrar mis planes, me tomo otra gran parte de tiempo pero con esfuerzo lo conseguí, sin embargo necesitaba algo que me ayudase a retirar el bloqueo de una forma mas eficiente, pensé por un momento ya que no queria lastimarme aun mas la boca.

Entonces fue que recordé el acto preventivo que había tomado antes de empujar a Lynn por las escaleras, presionando fuertemente contra mi estomago me obligaba a vomitar, tras varios intentos fallidos por fin salió la funda plástica con un destornillador dentro, vino acompañado de un poco de vómito y sangre.

Era algo desagradable de ver pero no podía perder el tiempo así que me puse manos a la obra y empecé a destruir lo que se interponía a mi salida, actué rápidamente apartando los resortes que cruzaba, al fondo pude ver la rejilla la cual sin pensarlo 2 veces la retiré y me adentré al ducto restándole importancia a las heridas que me hacia al entrar.

Como en ese entonces estaba muy delgada me pude mover con mayor facilidad, tuve aún mas prisa en escapar ya que durante el trayecto escuché cosas que me asustaron como gritos, suplicas, risas malévolas y sonidos de maquinas extrañas; apresure mi paso hasta evacuar por la azotea.

Una vez allí pude mirar mi exterior solo logrando reconocer un espeso bosque, además ya había caído la noche por lo que no ayudó mucho, pero no era momento para pensar en eso, debía salir lo mas rápido que fuese posible de ese lugar, y la única manera parecía ser saltando de la azotea hacia el bosque para poder evitar la cerca electrizada que rodeaba a ese lugar.
 
No había tiempo para analizarlo mucho, tomé tanto impulso como me fue posible y a la carrera corrí hasta el borde y di el salto mas grande que pude, a pesar de eso tuve que pisar la cerca para dar otro salto hacia afuera, por un momento pensé que fallaría y que todo acabaría para mi en ese instante.

La corriente paso por todo mi cuerpo, sentí como cada musculo se entumecía en cuestión de solo segundos antes de que el mismo choque eléctrico me empujara fuertemente hacia un árbol cercano, de rama en rama fui cayendo sin sentir mucho el daño que me hacia pues había perdido parcialmente mi sensibilidad.

¿Segunda Oportunidad?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora