Narra Lincoln:
Y así fue como Lisa y yo nos hicimos tan juntos y como creamos esta arma escondida, decidimos no decir nada a nadie por que nuestro invento resultó ser muy peligroso incluso para usarlo como arma de defensa personal, si le hizo eso a los árboles y a sus poderosas raíces no me imagino lo que podría hacerle a un suave y blando cuerpo humano, el proyecto lo terminamos una semana antes de la llegada del Señor Grimm a la casa Loud, y decidimos llevarla a la ya ahora nombrada “Lanza fuerzas” , talvez no fue la mejor idea, la teníamos muy bien escondida en nuestra habitación, hasta que un día después de volver con mi equipo de desarticular una operativo que pensaba distribuir drogas por toda la ciudad, fui llamado a la oficina principal la del Señor Grimm, cuando entre me di en cuenta que Lisa ya estaba ahí sentada en una de las sillas frente al escritorio y que atrás de mi jefe se encontraba un chico al que no había visto antes, vestía con una especie de toga con capucha que evitaba que su rostro sea visto, antes de que yo pudiese articular una sola idea, mi superior tomó la palabra.
- Lincoln, siéntate por favor - fue lo que dijo mi jefe a lo que yo enseguida acaté a su orden y me senté a lado de Lisa quien permanecía en silencio y con la mirada algo baja, así que me comencé a preocupar y ya mi cabeza queria crear escenarios de lo que había pasado pero antes de crear una idea si quiera mi jefe tomó la palabra de nuevo.
- Lincoln puedes decirme por que tenían esto en su habitación y nunca me contaron sobre ello – dijo comenzando a sacar algo del cajón de su escritorio, estaba algo nervioso, pero mis ojos se abrieron como platos cuando vi lo que tenia mi jefe en su mano, era el “lanza fuerzas”, comencé a sudar y mi boca comenzó a hablar por si sola.
-Pe...pero...como..como la consiguió...que hace usted con eso...quien entro a mi habitación...para que.. – fui interrumpido por una respuesta de mi jefe.
-Pues el que me trajo esto, fue este chico de aquí – dijo señalando al sujeto de toga – yo le pedí que fuera y buscara tu expediente para ascenderte, pero también me trajo esto...pero Lincoln aun no respondes a mi pregunta – me dijo mirándome firmemente sin nada de enojo pero aun así estaba muy temeroso.
De nuevo comencé a pensar que harían con nosotros estaba mas que seguro de que ya la habían probado y que querían una explicación, seguramente nos despedirían e informarían de esto a las autoridades por crear un arma muy poderosa y ocultarla, pero ese era el secreto de Lisa y de mí, y ese sujeto extraño la tomó como si no fuera nada, estaba comenzando a sentir ira y ganas de golpear a ese tipo hasta cansarme, esa “arma” es algo muy especial para nosotros, es el trabajo que nos llevo mucho tiempo, esfuerzo y dedicación pero que también fue la causa que nos hizo ser tan unidos, al parecer a Lisa ya le habían preguntado lo mismo que a mi y estoy seguro que respondió lo mismo que yo pienso en responder.
- Y bien – dijo Señor Grimm y ahora si ya se notaba algo ansioso así que tenia que contestar si o si antes de empeorar las cosas para mi y Lisa.
Tome aire y le respondí a mi jefe.
-Es que eso es un proyecto que yo y mi hermanita comenzamos a crear cuando aún éramos solo unos niños, eso significó mucho para nosotros, gracias a eso nos hicimos muy unidos, significa mucho para ambos , por eso la manteníamos en secreto es como un recordatorio de lo que nos unió de ese día en adelante – le respondí con la mayor sinceridad posible escondiendo mi temor.
- Pero están consientes de lo que es capaz esta arma – dijo únicamente alzando una de sus cejas.
- Así es señor, es muy peligrosa, esa es una de las otras razones por las cuales la teníamos en secreto, si cae en manos equivocadas puede ser catastrófico – le respondí a mi jefe explicándole nuestras razones.
ESTÁS LEYENDO
¿Segunda Oportunidad?
Fiction généraleEl mundo ya no es como antes, todo se a visto afectado por la corrupción del gobierno que se a aliado con la religión; se a dado lugar a las guerras el mundo se a vuelto un lugar en el que reina la anarquia. Las personas mas poderosas disfrutan mien...