viernes, viernes; geto suguru

4.1K 275 34
                                    

Geto había llegado a la conclusión de que se estaba enamorando de tí meses después de que se volvieran mejores amigos. Había sido algo inesperado, y de cierta forma, no deseado. No quería arruinar su amistad, no quería que al enterarse comenzaras a tratarlo distinto, pero ¿realmente quería seguir siendo tratado como un amigo? ¿Le bastaría seguir siendo solo tu amigo? 

"Estás muy callado" dijiste con un tono suave, caminando a su lado. Era viernes, ambos regresaban de sus respectivas misiones y se dirigían a la habitación de Geto para ver una película, como siempre. 

"Sólo estoy cansado" Mintió el pelinegro, dejando salir una incómoda risa. Entrecerraste los ojos, mirándolo fijamente por un par de segundos antes de volver a dirigir la vista al frente. Geto era una persona muy seria, y lo sabías, por lo que decidiste dejarlo en paz. Por ahora. 

Suguru abrió la puerta de tu habitación, se hizo a un lado y te dejó pasar. Agradeciste con una sonrisa. Dejaste caer tu mochila al suelo, mientras te lanzabas a la cama, dejando salir un pesado suspiro. Estabas agotada. Geto vio cómo un pequeño sobre caía del bolsillo de tu falda. Un sobre rosado, con tu nombre escrito junto a un corazón, la levantó y le dedicó una pensativa mirada. 

"¿Otro admirador secreto?" preguntó él, intentando ignorar la punzada en su pecho.

"Ni tan secreto" reíste, tomando el sobre de sus manos, abriéndolo por primera vez desde que lo recibiste "Me lo dio Gojo durante la misión"

Gojo. Aquel poderoso hechicero con el que Geto llevaba compitiendo desde que estaban en primer grado. Apretó la mano formando un puño hasta que sus nudillos se volvieron blancos. Quería decir que le sorprendía, que no lo esperaba, pero no era así. Cada semana recibías una interesante cantidad de cartas, confesiones, y dependiendo la intensidad de la atracción, cajas bento. Geto había logrado esconder su incomodidad con éxito, pero al ver la carta firmada por el estúpido albino, sintió su cuerpo y mente llegar a un límite. Te observó por un par de segundos en silencio, viendo cómo leías la carta con una leve sonrisa. Al terminar, la guardaste nuevamente en su sobre, depositándola en el cajón, junto al resto de ellas. 

"Gojo Satoru, huh" dijo Geto, mordiendo su mejilla por dentro "¿Será él el afortunado?"

"¿Eh? No, todos menos él" dijiste alzando una ceja, sorprendida ante su pregunta. "Es insoportable, además, Utahime está enamoraaada de él. Código de chicas." Reíste mientras ponías una mano sobre tu pecho. 

Geto no le encontró ninguna gracia a tu broma. 

"¿Si no fuera por Utahime estarías con él?" dijo él, sin sonreír. 

"¿Qué? Geto, ¿qué te pasa ahora con esas pregunt-"

"Contesta." Ordenó él.

"¿Qué te sucede?!" interrogaste, visiblemente molesta por su actitud. "Ya te dije que no, no sé por qué te importa tanto, yo no me meto tanto en TU vida amorosa" lo apuntaste con el dedo índice. 

Geto suspiró, dejándose caer a la cama. Guardó silencio por un par de segundos, inseguro sobre cómo actuar, qué decir. Quizá había sido muy tonto al pensar que tendría una oportunidad sabiendo que todo hechicero en Japón estaba detrás de tí. Negó con la cabeza, rendido, finalmente entendiendo su posición. 

"Estoy muy cansado" dijo él, quitándose los zapatos, metiéndose entre las cobijas.

"Es viernes." Escupiste, molesta. "Siempre vemos películas los viernes." 

"Hoy tendrá que ser la excepción." dijo él, sin mirarte. 

"Bien." dijiste seca, con frialdad. "Supongo que ser un completo imbécil sí es muy cansado." 

jujutsu kaisen; one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora