Willow (8)

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Un gruñido me hace despertarme

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Un gruñido me hace despertarme.

Mi corazón late con fuerza y cuando mis ojos intentan abrirse una fuerte luz me deja ciega unos segundos.

Ava se mueve sobre las sábanas, ocultándose bajo ella para que el sol no le caiga más.

Me quejo por el dolor de cuello y miro enojada a la rubia porque tiene las dos almohadas, una bajo su cabeza y la otra abrazada, dejándome a mí durmiendo en el piso y nada más.

Le quito mi almohada y le pego con ella pero la rubia ni se inmuta y sigue durmiendo.

Bostezo tocando mi cabello tratando de ver más allá de los pelos.

Miro la vista, los edificios a lo lejos y el sol saliendo dentro la montaña de en frente.

Giro mi cabeza hacia mi derecha, mirando el espacio vacío donde Declan estaba acostado unas horas tras.

Volteo hacia atrás dándome cuenta que mi auto ha desaparecido.

Palmeo las sábanas tratando de encontrar mi celular.

Miro la hora y agradezco que aún tenemos tiempo para ir a casa a darnos una ducha antes de ir al colegio.

El mensaje de Declan despidiéndose de mí a las 2 am me hace sonreír.

Le pido que le diga a Wesley que llegaremos en 20 min para que nos tenga algo de comer.

Dejo caer mi celular en las sabanas y vuelvo a ver a Ava.

Sonrío al verla, su rubio cabello, sus mejillas rosadas por estar expuesta a la fría noche y su ceño fruncido como si tuviera una pesadilla.

Me acerco a ella y la abrazo. Comenzando a darle besos por toda su cara para despertarla.

Ava se queja un poco pero empieza a abrir sus ojos, dejándome ver sus claros ojos verdes siendo iluminados por el sol.

—Es hora de irse.—susurro, la chica asiente antes de abrazarme con sus brazos y piernas impidiendo que me mueva.

Me río un poco, quejándome por su fuerte agarre.







Ava bosteza poniéndose bien el suéter antes de meter la última almohada al baúl y cerrarlo con fuerza.

La rubia se sube al auto y suspira somnolienta antes de mirarme y sonreír.

—No puedo creer que vinimos aquí por Artie.—dice luego de un rato, frunzo mi ceño, analizando lo que dijo y dándome cuenta que es cierto.

—No volverá a pasar.—decimos las dos con una mueca de asco antes de reírnos.

Skins: Willow & DeclanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora