Se encontraba en el piso más alto del edificio, no había dejado de pensar en ella y estaba bien, cualquiera se volvería loco con una mujer así.
Naruto Uzumaki parecía la ser persona más amable de todas, pero incluso él tenía su lado obscuro. Las llamadas constantes de un número bastante conocido lo sacaron de sus pensamientos impuros.
-¿Si? Estaba ocupado por eso no contestaba ¿cuando vuelves? Vale iré por ti solo avísame antes, Chao yo igual. -
-Señor- lo llamaron desde la puerta -Ya esta listo lo que pidió-
-Muy bien, llévalo directamente hasta hokkaido con la Doctora Sakura y dile que va de mi parte. -
-Si señor-
Por otro lado Sasuke habría pasado el día en casa pues su madre Mikoto le preparo su platillo favorito "Oniguiris"
-Están deliciosos, mamá. -
-Los prepare especialmente para ti y guarde un poco para que se lo lleves a Sakura. -
-Gracias ma, me llevare a shiro quiero que haga un poco de ejercicio ya esta todo gordo. -
-Sasuke ¿hablaste con Itachi? -
Un silencio incómodo invadió el lugar, si bien se sabía Itachi y Sasuke tenia una relación áspera desde que se había casado con Izumi, de pequeños eran inseparables ahora cruzaban muy pocas palabras. Itachi había estudiado Economía y sería el próximo primer ministro cuando su padre se retirara. Sasuke de lo contrario planeaba postularse como ministro de estado en Hokkaido esto con la finalidad de ayudar a la comunidad y sobretodo a su amiga. Izumi le había metido la idea a Itachi de que sí Sasuke se casaba con Sakura su padre le dejaría el puesto a su hermano y no a él y eso no podía pasar. Fugaku le tenía gran aprecio a Sakura pues había curado mikoto cuando está enfermo. Además de que sasuke era mucho más responsable y trabajador que Itachi.
-Me voy mamá, te quiero. Despideme de papá, dile que le deje unos documentos en su despacho.-
-Sasuke-
El azabache salió de la cocina, tomo a su perro algunas maletas y las subió a su camioneta, apreciaba mucho a su hermano pero se estaba volviendo un tirano y eso no le gustaba nada.
Manejo hasta el aeropuerto y tomo un vuelo privado, no veía a Sakura desde que la llevó a la cita con el Uzumaki y por alguna razón se sentía algo celoso. Admitía que su amiga merecía conocer a otro hombre y enamorarse, pero tenía un mal presentimiento sobre todo eso. Así que se permitió hacer algunas llamadas.
-Kiba, te envié un archivo revisalo, y por favor necesito toda la información posible sobre esa persona. -
Llego hasta la comunidad y antes de entrar al consultorio de Sakura compro unas rosas para su amiga, iba a entrar pero se detuvo cuando la vio perdida en sus pensamientos mirando una foto de ella y su difunto novio. Tenía un pasado trágico y a él le dolía su dolor, sus ojos siempre se apagaban cuando se ponía a recordar todo una vez más.
-Buenas tardes, ¿podrían atenderme? Tengo herido el corazón.-
-¿Apoco si tienes? - le contestó Sakura desde su escritorio
-Claro que tengo- Sasuke se acerco para saludar a la pelirosa y entregarle las flores. - Toma .-
-. ¿Y esas flores?-
-Son para ti-
La pelirosa se sonrojo y por alguna razón su corazón comenzó a palpitar rápido, Sasuke tenía una sonrisa maravillosa y cada que ella lo veía se sentía tranquila.
-Están bellísimas, eres un lindo. Gracias- Sakura las recibió
-También vino shiro a visitarte pero se quedo en tu casa. -
-Me encanta cuando lo traes, me pone de muy buen humor. -
-¿Sigues pensando en Shikamaru?.- el azabache tomo la foto.
-Aun me duele que no este.-
-A mi también, era mi amigo.-
Se quedaron en silencio, tomo su mano y luego le dio un toque en la frente. - Es hora de irnos -
-vale-
Manejo hasta la casa de sakura, estaba silenciosa,con lo bien que la conocía ella estaba triste y confundida. Encendió la radio se escucho "happier de Olivia Rodrigo" una de sus canciones favoritas, Sasuke miro a sakura y acomodo su cabello detrás de su oreja haciendo que esta se estremeciera.
-Me gusta como se ven sus mejillas, pareces una ardilla.-
-No soy una ardilla-
Sakura sonrío nostálgica y Sasuke detuvo el auto a la mitad de la carretera, se podían observar las recientes siembras en los campos de arroz.
-Perdón - El uchiha hablo
-¿perdón? ¿porque?-
-Por no poder protegerte, si hubiera hecho algo...-
-No fue tu culpa-
Sakura comenzó a llorar, y el uchiha con ella. Un dolor que para él era más bien culpa y que todas las noches lo atormentaba, la abrazo y beso su frente, no iba a permitir que nadie le volviera a poner las manos encima.
Hacia 6 años que su novio había muerto en un atentado, una noche mientras salían de una fiesta unos maleantes los habían asaltado, sasuke se había ido antes, así que no pudo presenciar nada. Shikamaru había sido asesinado intentando defender a Sakura, quien fue golpeada y abusada sexualmente. La habían dejado cerca de un barranco creyendo que también había muerto pero esta logró caminar hasta la que ahora era su clínica y ahí la habría ayudado una mujer de nombre tsunade y kakashi "su padrino" como ahora lo llamaba.
Cuando Sasuke la encontró estaba en muy malas condiciones, le facturaron varias costillas, tenía moretones en todo el cuerpo, y la nariz y el labio rotos. Pero a ella no le dolía eso, a ella le dolía el alma, se sentía sucia. Sasuke la llevo a su casa y ahí la cuido hasta que pudo sostenerse de nuevo en pie. Le juro que nunca más la iban a volver a tocar y que cuando encontrara a sus voladores los iba a matar. Shikamaru también había sido su amigo de la infancia y justo unos días antes de su muerte le había confesado que planeaba casarse con sakura y que esperaba su aprobación ya que ella lo veía como su familia.
Sasuke la tomo del rostro, le limpio las lágrimas y la volvió a abrazar.
-Vayamos a casa, quiero prepararte algo de comer. Siempre te pones feliz cuando cocino.-
- Es que cocinas muy bien-
Los dos rieron y luego sakura tomo la mano de sasuke.
-Sasuke kun tu eres todo lo que yo tengo en esta vida, gracias por estar aquí. -
-y luego dices que yo soy el cursi-
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Traición
FanfictionSakura Haruno una doctora de un pueblo pobre, se infiltra en una cárcel de máxima seguridad para encontrar al jefe de la mafia yakuza. En el camino se enamora del hijo de emperador de Japón y su vida se vuelve un caos descubriendo también el incond...