Celos

452 51 2
                                    

Y a si fue sakura estaba a primera hora en la Agencia de policías junto con Sasuke, habían recopilado todas la evidencias y ahora trabajarían en conjunto para encontrar al líder de esos hombres. Esa misma noche el emperador y el primer ministro  se reunirian en una cena importante, sasuke debía asistir y por obvias razones también sakura.

—¿Estas segura de que quieres hacer esto?— le pregunto pregunto uchiha antes de entrar al hospital.

—Si— suspiro la pelirosa— yo se que no puedo ayudar a todas la mujeres del mundo pero no quiero que otra pase lo mismo que yo, Nadie se merece ese infierno. —

—Te admiro tanto y estoy feliz de que puedas colaborar con nosotros. Solo no te expongas tanto ¿vale? —

—Vale. — Sakura sonrio amable y luego miro decidida la recepción  del hospital  —bien, aquí voy. —

—No olvides que tenemos una cena importante hoy. —

—Estaré puntual, querido novio. —

Sakura entro al hospital pidió informes y pudo ver a la mujer. Realmente estaba grave, le habian destrozado la cara y al igual que ella le habian fracturado varias costillas. Se acercó a una enfermera y le pido el expediente,
Una herida de aproximadamente 10 centimetros poco profunda debajo de su seno izquierdo. La mujer de 19 años apenas, media 1.60 centímetros aproximadamente y pesaba 47 kilos, había gestado hace apenas unos meses, era rubia y con los ojos amielados.

Su nombre era Shion.

—Hola— saludo sakura en un tono de voz bajo para no asustarla.

—¿Usted también viene a decirme que eso me saco por salir sola tan noche?—
La mujer apenas podía articular palabras.

—No, yo no vengo a juzgarte. Se lo que se siente que te digan eso, creen que por qué somos mujeres no tenemos permitido salir de noche y que nosotras nos lo buscamos. —

—Al fin alguien me entiende. — la mujer respiro con dificultad e intentando tomar la mano de sakura. — El policía me habló de usted.—

—A eso vengo a ayudarte, vamos a atrapar a la hombres que te hicieron esto y a encontrar a tu bebé.— sakura la sostuvo y derramo algunas lágrimas.

—Ya no me queda mucho tiempo mi hijo se llama kawaki tiene apenas unos meses. Por favor encuentralo, hay una mujer en la penitenciaria del sur ella tiene información  sobre el prostíbulo.—

Dicho eso la mujer cayó en paro, el personal médico intento reanimarla
pero no había nada más que hacer por ella.

Sakura salio por un momento las emociones la dominaron  pero luego recupero su cordura. Camino por un jardín de tokyo y se encontró con una anciana que apenas si podía cargar sus bolsos.

—Señora, déjeme ayudarle —

—Gracias querida, ya los años no me ayudan. ¡Pero qué bonita eres!— Exclamó la viejecilla. — El hombre que tiene tu corazón debe estar agradecido con los dioses. —

—No yo ...— sakura se ruborizo.

—Ese muchacho sasuke es el indicado para ti, ya no te engañes y acepta que lo amas como él a ti.  Pero recuerda todo a su tiempo. —

Sakura miro extraña a la anciana como sabía el nombre de sasuke y por qué hablaba tan segura.

—¿y si le hago daño? ¿Si lo arrastro a mi maldición?—

La anciana le entrego un pequeño amuleto a la haruno y esta se sorprendió.

—¿Un Omamori?—

Traición Donde viven las historias. Descúbrelo ahora