Traición

Recuento.

-Cefalotina 1 gramo cada 8 horas, agréguele también Imipenem 1 gramo cada 24 horas, tiene 20 mil de leucocitos. Esta infectada. -

-Infectada pero viva, más viva que nunca. Kotestu Hagane Traumatologo. -
-Sakura Haruno, la eminencia de la medicina y... Cirujana Cardiotoracica.-

La habían ingresado al hospital una vez más, la diferencia es que ahora tenía seguridad en todos lados y su situación no era tan grave, solo estaba ahí para recuperarse más rápido. Sasuke le había llevado un montón de revistas y hasta su computadora, el tenía trabajo por lo de su hermano y en unas semanas le entregarían una medalla por su arduo labor en la Agencia de policías.

-Esta mañana un guardia me pidió que le mostrará todo lo que traia en mi mochila, se me cayeron unos condones frente a todos. - Kotestu el doctor, la examinaba minuciosamente.

- Ya sabes como es Sasuke el no comete un error dos veces, por eso es que el hospital tiene tanta seguridad. -

-¡Así soy yo! Jamas cometo el mismo error dos veces ¿Como estas Kotestu?- saludo el Uchiha desde la entrada.

-Sasuke, el que se la pasaba más tiempo en la facultad de medicina que en la de leyes. -

-Ese mismo, ahora podrías dejarnos solos, necesito hablar algo con esa bella mujer. -

-Ya esta, más tarde vendré. Esta de pre alta, podrá ir a casa en cuanto baje la infección. -

Sasuke miro a sakura y le sonrio amable, Kotestu salió dejando solos a la pareja.

-Kawaki ya fue aceptado en la casa hogar y pronto será adoptado.-

-Eso me alegra, espero que una familia lo reciba con el amor que se merece-

Sasuke tomo las manos de sakura y las besaba, agradecía tanto tenerla con vida y que ahora si podría corresponderle.

-Perdoname.-
-¿Por?-
-Por todo, por dudar de ti.-
-Pues si, aveces eres muy idiota...-

Sakura apretó los labios y mientras derramaba lágrimas le dijo aquella palabra que tanto le había costado decir durante mucho tiempo.

-Te amo sasuke.-

Sasuke la abrazo y beso su labios cuidando las heridas que tenía, se sentía vivo. Tenerla entre sus brazos lo hacía sentir vivo, la amaba tanto que no se había dado cuenta de que su felicidad dependía de ella.

-Volveremos a casa y te prepare la comida que te gusta. -

-No sabes cuanto deseo volver a dormir a tu lado.-

Los días pasaron la nieve caía pues ya era principios de diciembre, sakura fue dada de alta y ahora estaba en casa descansando. Se había propuesto limpiar todo, preparo un poco de te y arroz para sasuke. Miró las fotos donde estaba shikamaru y sonrío nostálgica por primera vez recordó la última conversación que tuvieron.

-Le he pedido a sasuke su permiso para casarme contigo.-

-¿Sasuke? pero no él es mi padre.-

-No pero... es el hombre que más te ama en el mundo. Incluso más que yo.-
Y si, lo era sasuke era la persona que más la había amado en el mundo la primera que le sonrio amable, y que nunca la miro menos.

Estaba sentada a la mitad de la sala, iba encender un cigarro cuando alguien llamó a la puerta. Se asomo por la rendija y pudo ver a Hinata Hyuga gon un canasto de fruta.

-Naruto no está aquí.-

-Lo se, vengo a verte a ti. ¿Puedo pasar?-

Sakura abrió por completo y la hyuga entró.

-¿y bien?- pregunto sakura confundida ante la visita de la futura emperatriz.

-He venido a pedirte diculpas, la verdad es que no debí tratarte así. Debo reconocer que eres una mujer valiosa y muy fuerte.-

-Tú también lo eres, solo necesitas un poco más de confianza. Disculpa aceptada. -

-Vamos a adoptar a kawaki. Naruto y yo...-

-Eso es maravilloso. -

-Entonces... ¿amigas?- Hinata extendió su mano en señal de amistad y sakura correspondió.

-Amigas...-

Hinata se fue y Sakura pudo quedarse tranquila hasta que llegara sasuke, por precaución y un poco de desconfianza dejo la fruta en la cocina y opto por no comerla. No es que no creyera en ella pero prefería esperar un poco de tiempo antes que aceptar cualquier obsequio.

Se puso una mascarilla y  sus audífonos, se puso la pijama un short y una blusa de tirantes, luego se recostó en la cama y levantó un poco los pies. Hacía mucho que no se sentía relajada y se lo merecia, ya había pasado por mucho.

Estaba casi por quedarse dormida cuando se escucho música afuera de la casa. Salió hasta el ventanal más grande y  pudo observar un montón de veladoras encendidas, "Space song" de fondo y al uchiha parado a la mitad de la nieve con un ramo de flores.  De puso un abrigo y sus pantuflas para salir corriendo hacia los brazos de su amado.

—¿y esto?—

—Bueno es qué... no te he pedido que seas mi novia y pues encontré estas veladoras en el super y pensé que seria buena idea... —

—¿Me estas pidiendo que sea tu novia?—

—Si, bueno yo quisiera que fueras mi esposa, de hecho traje un anillo que guarde por alguna parte de mi saco... aquí. Aquí esta...—

Sakura observo un pequeño anillo de fantasía, que parecía sacado de una caja de cereal. Misma que hace años habían compartido en el desayuno del orfanato, en uno de las visitas de la familia uchiha.

—¿No me digas que es..?—

—Así es, digo pienso darte algo mejor pero este anillo tiene un valor invaluable.—

Sasuke se lo puso en su dedo anular y sakura pudo recordar cuando de pequeños le había pedido con ese mismo anillo que fuera su amiga. Comenzó a llorar y luego lo beso.

—Se mi esposa, prometo hacerte la mujer más feliz del mundo.—

—Si... ¡si si quiero! ¡si quiero!—

—No te arrepentirás, voy a curar todas las heridas de tu corazón... lo prometo. —

—Tú ya me has curado por completo sasuke. —

Entraron a la casa y Sakura preparo el té, se sentaron cerca de la chimenea y abrieron un álbum de fotografías para recordar como era que se habían hecho los mejores amigos. Comenzaron a besarse, Sasuke recorría cada milímetro de piel de la pelirosa le acariciaba con tanta dulzura que sakura se deshacía de amor. Beso y mordió el inicio de sus senos le quito el abrigo y luego el sostén dejando al aire sus botones rosados, lamia y succionaba cada uno como un niño lo haría por alimento. Bajo por su abdomen y ahí se perdió en el pubis haciendo círculos con su lengua y estimulando la zona de la vulva con dos dedos, la pelirosa soltaba gemidos suaves y abrió bien las piernas para que el uchiha pudiera continuar. Comenzó a lamer con cuidado el inicio de su clitoris y está echo la cabeza hacia atrás con otra mano pego más al azabache para que continuará.

—¡Ah! No te detengas. —

Sasuke obedeció aumentando la velocidad sintiendo el próximo orgasmo de la pelirosa. Sakura extendió las piernas y sus paredes de contrajeron sudorosa y con dificultad se incorporo para quedar hincada ante el Uchiha le desabrochó el pantalón y luego lo bajo dejando al aire su erección, comenzó a lamer de arriba abajo y con la otra mano acariciaba su abdomen. Sasuke gemia ronco pero no dejaba de mirarla, estaba perdido en lujuría, por qué  sakura lo era todo podía ser amor y dulzura pero de la nada volverse una experta en en sexo.
Metió completo el miembro erecto del azabache y comenzó a lamerlo como si fuera un caramelo. Por poco se viene en la boca de la mujer, pero justo a tiempo la acostó para penetrarla de golpe, sakura amarro sus piernas a la espalda de su uchiha y el comenzo a embestirla muy fuerte. Los gemidos eran cada vez más audibles hasta que ambos sintieron sus fluidos combinarse como respuesta a su orgasmo.

Ahí se quedaron mirándose uno a otro, como si fueran criaturas hermosas y extrañas. Por qué su amor era difícil de entender, pero solo bastaba eso, una mirada para decirse cuanto se amaban.