Capitulo 10 "Secuestró"

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Esa mañana el medico le había dicho que había evolucionado muy bien, Naruto y kiba la habían visitado en varias ocasiones y las enfermeras la ayudaban en casi todo. De Sasuke ni sus luces y eso la preocupaba no solo por qué lo extrañaba si no por qué temía que Itachi le hiciera algo.
Esa mañana una enfermera entró a su habitación, era nueva o al menos eso creían por qué nunca antes la había visto.

-Buenos días señorita sakura ¿como amaneció hoy. -

-Bien, creo. Buenos dias-

-Bueno si le interesa saber llamo su novio Sasuke para preguntar como estaba.-

-Enserio- a sakura se le llenaron los ojos de lágrimas -

-Si dijo que la extrañaba y que esperaba que la dieran de alta para venir por usted.-

-¿Eres nueva cierto? No te había visto.-

-Si es mi primer día, Mi nombre es Naoko. -

-Mucho gusto Naoko, soy la doctora Sakura. -

Era un domingo de noviembre y hacia mucho frío, habían trasladado a la emperatriz aún hospital de stanford así que la seguridad había bajado. A la entrada de urgencias habían un hombre con un ramo de flores que estaba buscando la entrada al piso de cirugía donde estaba sakura.

Naoko salió de la habitación de sakura y pudo ver al hombre merodear por los pasillos.

-¿Disculpe busca a alguien?- pregunto la enfermera.

-Si, puede llevarme con la señorita sakura, le traigo unas flores de parte de su novio Sasuke. -

-Pase por aquí. Señorita sakura la buscan. -

El hombre y la enfermera entraron a la habitación, sakura estaba leyendo un libro pero cuando levanto la mirada se quedo helada.

-Hola sakura te acuerdas de mi.-

-Deidara. -

-Cuanto tiempo, sigues preciosa. Ahora te voy a pedir que te levantes y me acompañes. -

Sakura dio un trago, era obvio que las intenciones de Deidara no eran buenas. Miro a la enfermera que estaba igual o más nerviosa que ella y luego con mucha cautela paso su mano por debajo de la sabana para tomar su arma sin que se diera cuenta.

-No se puede llevar a la paciente hasta que autoricen los médicos.-

-Tiene razón la autorización de los médicos. Le voy a agradecer que se vaya quitando el uniforme y se lo de a la enfermita. -

Deidara tiro el ramo de flores y saco su arma para apuntarle directamente a la enfermera quien con gritos de desesperación pido auxilio, gritos que fueron ahogados de inmediato con un disparo en la cabeza y luego apuntarle a sakura.

-¿Que haces imbecil? ella no te hizo nada. -

-Linda no tengo tu tiempo, levántate y acompáñame ya sabes a lo que vine ¿no?-

Sakura se sentó a la orilla de la cama bajo un pie y luego el otro muy despacio como haciendo tiempo, con la otra mano escondió su arma y cuando estuvo por fin de pie, camino hasta donde estaba deidara puso su mano en el pecho del este para dispararle en el abdomen.

-Pudrete en el infierno.-

Sakura corrió por el pasillo como pudo, pues sus heridas aún no habían sanado por completo, no tenía tiempo para lamentarse lo hecho hecho estaba. Al llegar a una de las esquinas del pasillos se tropezó, no supo en qué momento pero la vista se le oscureció por completo y sintió su cuerpo flaquear.

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