¿Quién soy?
Bueno es complicado de contar más si eres un humano, ¿por qué lo eres, verdad? no importa si no lo eres. La cuestión es que desearas saber todo de mí, así que me presento gran terrestre.
Soy Aster, del planeta Umellens, Vine a la tier...
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Solo han pasado cuatro semanas desde la última vez que ví a Roux ser llevada por los centinelas de Umolland y ahora estoy sola en este mundo tan extraño y desconocido. Llevo días tratando de tomar la mejor decisión a este asunto y la única idea clara es la más equivocada.
Según las coordenadas que dicta mi mente estoy a unos 500 km de los humanos, esto es peligroso, los Umellens tenemos terminantemente prohibido tener contacto con los humanos ya que interferiría con su evolución, pero necesito arreglar esa brújula-portal para volver a mi mundo antes de que mis Cuarzus se acaben y ocurra una horrorosa catástrofe.
Temo por un posible contacto y solo me arriesgare en busca de objetos que puedan arreglar mi brújula-portal. El Sol aún no se ve en lo alto pero estoy en la estación del Sol o como le dicen los terrestres: es de día, estoy decidida y esperare a la estación de la luna para ejecutar mi plan con posibles futuras fallas.
Así que me distraigo con la bola peluda que al parecer encontró algo a lo que hincarle el diente, Sonrió. Por alguna extraña razón el conejo me persigue desde la vez que lo encontré de camino al río y sin saber porque me sigue a todas partes.
Un ruido se escucha cerca y mi instinto de depredadora me dice que huya, que no espere a ver cual es el peligro que me asecha, corro y en el camino cargo en mis brazos al usurpador porque temo que sea devorado.
Corro a gran velocidad, pero aun así ese ser me sigue las pisadas y escucho el rugir del animal así que sin voltearme sé que es un gato negro y grande.
Mis botas negras están empezando a desgastarse y que decir de mis trajes de supervivencia.
Mi instinto se activa y mis ojos cambian en segundos al azul eléctrico y veo el panorama completo, al parecer escogí la dirección equivocada y nos lleve aun tramo del bosque con grandes rocas que obstruyen el paso y cuando por fin llego, me detengo cerca de la gran roca.
Doy media vuelta y un puma me observa como su nueva presa, suelto la mochila y dejo el conejo en mis brazos en tanto no le quito mi mirada ni por milésimas al puma, este se va acercando más y más hasta tenerlo a diez metros de distancia.
El conejo se asusta tanto que me desconcentró mientras se remueve mucho en mis brazos y pierdo la vista del puma, Gran Error, este se lanza sobre mí y pierdo al conejos de mis brazos. Todo mi instinto esta en modo supervivencia, y mi mente en Nano-segundos analiza al puma, tiene una semana sin comer eso no me ayuda quizás por eso no perdió tiempo en atacarme.
Lo empujo con mi fuerza y sale disparado a cierta distancia no muy lejana a mí, intento levantarme pero el puma vuelve arremeter en mi contra y esta vez me araña en el brazo derecho pero lo golpe en el estómago asiendo poco efecto en el (esto no es un juego Aster, tienes que acabar con el) me digo mentalmente.
El gato grande ahora está encima de mi tratando de morderme pero con mis manos en su cuello distanciándolo de mi es un impedimento para que logre su cometido. Tendré que romperle la cabeza si quiero salir viva de aquí.
