Capítulo 6

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No podía creer que Jason haya conseguido ser policia. Cuando salíamos, era el típico chico que pasaba de los estudios pero que mágicamente sacaba todo matrículas. Al principio creí que era un cerebrito, luego caí en la conclusión de que podía pasarse las noches estudiando para hacerse el chulo delante de sus amigos, pero luego descubrí que nadie es tan inteligente. Un día, mientras íbamos a su casa, recordé que me había dejado en móvil en la escuela, así que tuve que volver para recuperarlo. Me costó bastante lograr que Mathew, el portero, entendiera lo importante que era para mi mi teléfono y tras unos 15 minutos de discusión, me dio las llaves del aula. Jamás pensé que pudiera encontrar aquello en su pupitre.
Al entrar, cogí el teléfono el cual se encontraba en mi cajonera y, al alzar la vista, encontré una libreta tirada junto al pupitre de Jason. Me acerqué a cogerla.
"Repaso exámenes"
Pensé en dejarla allí, pero me di cuenta de que al día siguiente teníamos una importante prueba de Latín, así que me di a mi misma permiso para tomarla y llevársela a casa. De camino a esta me entró la curiosidad de como logró aprobar el examen de matemáticas de la semana pasada, es decir, nadie había subido del 5, ni si quiera aquellas personas que todos sabíamos que eran de media de sobresaliente; así qué abrí el cuaderno y descubrí el por qué de tanto 10 es su boletín, el por qué de su cara resplandeciente antes de un examen de tres temas de filosofía el cual le había arrebatado el sueño a medio instituto... salvo a él. Un 10. Pleno. Perfecto. Nadie sabía como lo había hecho. Nadie sabía cual era su secreto...Hasta ahora.
Después de eso me pidió que aquello quedara entre nosotros. El curso aun no había terminado y el ya tenía trabajo. Es más, tenía la vida solucionada.
-¿¡Alli!? -me preguntó.
-¿Jason? ¿Qué haces en NY trabajando de policía?
-En realidad no estoy trabajando, estoy ayudando a mi padre con tu caso. Dios mio, creí que no te volvería a ver.
-Pues aquí estoy -dije mientras sonreía de la manera más falsa posible. Por la manera en que me miró pude adivinar que lo había notado.
-Bueno, no tienes porque preocuparte, al tío ese le van a caer 20 años y si no, yo me ocupo de eso, recuerda que te debo una.
-Jason, si alguna vez me quisiste, haz lo que esté en tu mano por ayudar Jack.
-Creo que estás tan cansada que no piensas lo que dices, voy a traerte un café.
Y sin dejarme apenas tiempo para contestarle, se fue. Todos pensaban que estaba loca, que me habían hecho tanto daño que ni sabía lo que decía. Todos creían saber lo que pensaba, aunque solo estaban intentando convencerse a si mismos de que la pequeña Allison seguía siendo la misma. Todos debían saber la verdad, pero nadie me creería.
La puerta de comisaría se abrió tan de golpe casi derramo el café que minutos antes me había traído Jason.
Cuatro policías sujetaban a Jack llevándole hasta la celda más próxima.
-¿Dónde está la chica? -Preguntó el mayor de todos.
-Aquí. -respondió Jason señalandome.
Giró su cabeza y se quedo mirándome. Aquellos 5 segundos se me hicieron eternos.
-Ven.
Puede que aquella comisaría se caracterizara por tener policías de pocas palabras, aunque realmente aquello no me importaba mucho, es más, aquello me gustaba. Lo menos que necesitaba en aquel momento era que me agobiasen.
Me acerqué lentamente intentando que la manta que los policías me habían dado no se cayera.
-Dígame.
-Cuando el comisario Smith detuvo a su "amigo" -dijo resaltando las comillas- usted le proporcionó una información la cual no podíamos pasar por alto.
-Lo siento agente, pero no recuerdo bien lo que le dije.
-Pase aquella habitación de ahí. Mi compañero la espera.
Abrí la puerta y me senté en la única silla disponible.
-Buenas tardes, señorita.
-Buenas tardes, agente.
Entre nosotros se encontraba un ordenador el cual tenía la pantalla mirando hacia mi.
-Permítame. -dijo mientras pulsaba la tecla intro haciendo que una grabación, aparentemente nuestra, comenzara.
"-¡No! ¡No pueden llevárselo, él no ha hecho nada!
-Allison, no tienes porque fingir más, todo lo que te haya dicho es mentira. Solo te quería por el dinero.
-¡Ustedes no lo entienden, su padre es el que tiene todo esto montado, no él!"
Volvió a darle a la tecla. La grabación se paró.
-Ustedes no lo entienden, su padre es el que tiene todo esto montado, no él. -repitió.
-Exacto.
-¿Quién es su padre?
-¿No cree que si lo supiera ya se lo habría dicho?
-¡No hace falta ponerse así, Allison! Solo intentamos ayudarte.
-Mire, si quieren ayudarme, saquen a Jack de toda esta mierda. Él fue el que me sacó de todo aquello. Así que haced el favor de favor de sacarlo. Él puede ayudaros a encontrar a su padre.
-Lo siento, pero, aunque luego te ayudó, te ha secuestrado, y es nuestro deber hacer justicia.
-Justo sería que no me hubierais encontrado. -dije y salí dando dando un portazo.

The Last Song ClubDonde viven las historias. Descúbrelo ahora