Capítulo 12, De la felicidad y otras cosas.

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(PRESENTE)

Recién tenía un par de semanas de establecido el temporal de lluvias cuando todo se precipitó como una cascada en la casa de la familia Aihara, temprano por la mañana Yuzu se había levantado a vomitar por segunda ocasión, según ella los antojos eran parte normal de su embarazo pero la cantidad de sardinas marinadas que había comido en la noche anterior le hicieron ver lo contrario. Mei la seguía con la mirada por encima de sus lentes, establecía su agenda para no dejar pendiente alguno antes de ir al hospital, su ginecólogo las había citado para el medio día, este iba a ser el acontecimiento más importante para la pareja después de su boda hacía cuatro años y meses más, tenía todo listo con ella, esperaban el arribo de sus padres para acompañarlas al hospital y recargada en los almohadones de su cama escuchaba con un cierto gesto de incomodidad las arcadas con las que su esposa terminaba de pagar por sus pecados nocturnos.

- Yuzu, ¿Estás bien? ¿Quieres que te ayude? -le preguntó con cierta preocupación, recordar lo que hacía algunos meses antes ella misma había pasado no era agradable, pero como parte natural de un embarazo no le daba mayor importancia, una mueca de conmiseración era el único apoyo que podía brindarle en realidad, su esposa ya se limpiaba la boca con el cepillo por tercera ocasión e intentaba dar instrucciones a la de ojos violetas para iniciar el día, pero con la boca llena de espuma prácticamente era un galimatías lo que de ella salía.

- No Mei, ya estoy bien, -respondió Yuzu después de secarse la boca con la toalla, terminó de arreglarse y comenzó a maquillarse cuando tocó Udagawa a la puerta de la recámara avisando que recién habían llegado sus padres.

- Gracias, en un momento más estamos fuera, ¿puede pasar mi madre por favor? -le pidió Mei al padre biológico de su bebé y acto seguido las tres Aihara se encontraban en la recámara recogiendo lo necesario para su visita al hospital, el ambiente entre ellas era cálido y nervioso, se sentía la emoción flotando a su alrededor y sin embargo sus voces eran calmadas, hacían bromas entre ellas mientras eran supervisadas por Ume quien con la experiencia daba indicaciones a una y calmaba a la otra, afuera de la recámara los varones sólo podían hacerse los fuertes sin poder hacer más, la salida del departamento de Ober Grand fue todo un acontecimiento para la familia, no se podía esperar de otra manera.

Aihara Yume nació el 22 de julio a las 3:30 de la mañana, con un peso de 2.450 kg resultó ser la niña más hermosa del hospital, o al menos eso era lo que toda la familia y sus amistades pensaban, Yuzu sostenía entre sus brazos a la pequeña nena de pelo castaño, sus ojos grises y su carita arrugada y roja eran la cosa más maravillosa que jamás imaginó poder ver entre sus brazos, se acercó a Mei quien era asistida por los médicos y enfermeras para mostrarle el rostro de la recién nacida, con lágrimas en los ojos la pareja se sentía la más dichosa de mundo; no sentían que les faltaba nada para ser felices como nunca jamás, sólo la espera del segundo de sus hijos terminaría por coronar su dicha y eso era algo que sólo podían esperar con todo su corazón.

-Mei, Yuzu, ¿puedo pasar?

- Claro que sí, madre, adelante.

Ume se acercó del lado de su hija recién parida a quien tomó de la mano y dio un beso en la frente felicitándola por la hermosa nena, miró a Yuzu quien no podía dejar de llorar, le sonrió y sin mediar palabra extendió los brazos para tomar a la pequeña con la naturalidad de una madre ahora abuela. Las tres mujeres se encontraban felices de tenerse juntas para apoyarse, en ese momento entraron más enfermeras al cuarto y procedieron a atender nuevamente a la de ojos amatistas junto a su bebé, tomaron muestras de sangre, presión y otras para verificar que las cosas iban del modo correcto; en eso, leves golpes en la puerta llamaron la atención de las Aihara, por la misma se asomó el rostro cubierto de Harumi quien miraba ansiosa a las flamantes madres.

Citrus: Un paso a la vez.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora