Citrus: Un paso a la vez.

Capítulo 3: Un nuevo camino, una misma mirada.

Aiko

El timbre sonó fuerte y prolongado, se escuchó que alguien decía del otro lado del aparato:

- ¡Hola, buen día!, ¿es aquí con Aihara Mei y Aihara Yuzu? Mi nombre es Asuka Aiko, soy la persona asignada por la academia a la señorita Yuzu ¿es así?

La voz que salía por el interfono era un misterio, sonaba con un tono muy bajo y grave para ser de mujer, pausada pero firme, al momento que se abrió la puerta la sorpresa para ambas chicas fue unánime ante la presencia de una mujer joven, no mucho mayor que ellas, de pelo castaño claro, casi rubio y agarrado en una coleta trenzada en parte por detrás hacia un lado, sus ojos azules grandes como el hielo profundo bajo un par de pestañas enormes, de rostro ovalado perfecto y un cutis suave como el cristal, la edad que aparentaba no podía ser mayor a los veintiocho años pero su mirada y el tono de su voz mostraban un alma mucho más madura, como de alguien que ha vivido más vidas en una sola, vestía un coordinado que hacía juego con su tono de piel nívea, pantalón con pinzas y cinturón ancho, un par de botines de tacón bajo de color azul oscuro, la blusa cerrada en un cuello de tortuga, de manga larga y una chalina a cuadros escoceses que hacían juego con el calzado en el mismo tono que sus ojos, esos ojos que enmarcaban una sonrisa discreta pero sincera.

- A-adelante, si, bienvenida, soy Aihara Yuzu, ella es mi hermana Mei, - contestó sorprendida y fascinada Yuzu por la presencia de la mujer que se encontraba en la puerta.

- Bienvenida Asuka-Sensei, por favor pasa, -le indicó Mei también desconcertada por la belleza de la chica, aún sin las botas su estatura era algo de considerar sacando poco más de diez centímetros a la altura de la ex presidenta.

-Muchas gracias chicas, con su permiso, -indicó siguiéndolas por el pasillo dejando el aire impregnado a gardenias, -"un delicioso aroma", -pensaron ambas.

- Después de la bienvenida y presentación inicial las tres se sentaron en la sala del departamento, mientras Mei preparaba el té, Aiko-san sacó sus referencias, así como la carta de asignación y las puso sobre la mesita de centro esperando el momento para comenzar a platicar, momentos después de dar un sorbo a su taza y de que Mei y Yuzu hubieran leído sus documentos tomó un respiro y preguntó:

- ¿así que las dos lo llevan como pareja entonces?

-"¡...!"

- U-un momento, ¿¡a qué se refiere con eso!?, -preguntó Yuzu con el rostro enrojecido como la grana, Mei sólo pudo abrir los ojos desmesuradamente mientras trataba de comprender la pregunta formulada a rajatabla por parte de la desconocida que las miraba con una ligera sonrisa en sus labios escondida detrás de la taza de té.

- Vamos, vamos, no se asusten, me refiero a que están ingresando juntas a la universidad al mismo grado, ¿es cierto eso? –les preguntó un poco más divertida con la situación.

- Bueno sí, se supone que ingresamos juntas a la universidad, desafortunadamente mis resultados en las pruebas de ingreso no fueron suficientemente buenas para estar en el mismo grupo que el de Mei, -dijo Yuzu habiendo pasado el susto inicial con un dejo de tristeza profunda, sabía que seguiría su sueño de estar junto a su hermana, pero ahora una pequeña línea las separaba, una delgada franja de distancia se interponía entre ellas como el inicio de algo más grande que conforme pasara el tiempo iba a poner a prueba su cariño y los sentimientos más intensos entre ambas.

- Ya veo, -comentó Aiko-san, -se dice que la exigencia para esa universidad fue de las más difíciles, ¿en verdad quedaste muy por debajo?

- Siete créditos, -respondió Mei, tan sólo fueron siete créditos, -mientras bebía un sorbo a su propia taza sin mirar a Yuzu.