—Suga, creo que es bastante tarde para ti —Me excusé delante de aquél chico—, creo recordar que vivías con tus abuelos en un lugar alejado de la ciudad. ¿No debes volver a cuidarlos? Podrían estar preocupados por ti si volvieses muy tarde.
Mis dedos se enredaban entre sí con ansiedad y mis pies no se decidían entre una sola posición.
Suga me observó en silencio por tal vez, cinco segundos; ladeó su cabeza y sonrió finalmente calmando mis nervios.
Por un momento pensé que se había molestado, ¿Fuí demasiado obvio al intentar que se retirase de mi hogar?
—Lo siento, fué mi error venir sin previo aviso, sobre todo, arrebatar un poco de tu tiempo sin tener en cuenta en que podrías estar ocupado —Se puso de pié—. Lo siento, Hobi. La culpa es mía.
Mi corazón se estrujó, su sonrisa se había transformado en una mueca de tristeza y su mirada decayó.
Aquélla expresión me había golpeado como una gran puerta estrellándose contra mi rostro; ¿Cómo pude ser tan idiota para lograr que Suga se sintiera así?
Era un imbécil.
—No, yo-...
—Está bien, es tarde y pronto la noche me atrapará si no me apresuro; no tienes que disculparte conmigo por nada, la próxima me aseguraré de venir temprano. —Habló mientras se encaminaba hacia la puerta.
Seguí su paso con rapidez.
Me sentía una basura, había arruinado un buen momento con Suga, el chico que me gustaba desde el primer día. ¿Por qué debí dejarme llevar por mis instintos? Sólo debí relajarme y seguir la corriente.
Maldición.
—Siento que fuí un poco brusco en cómo dije las cosas, lo lamento. No quise realmente echarte, fué un malentendido. —Bajé la cabeza con arrepentimiento y suspiré.
De pronto, tan rápido como cerré mi boca, una suave caricia llegó a mi cabeza. Sus dedos jugaron un poco con mi cabello y tiró de un mechón logrando que me quejara.
—Estamos a mano.
Levanté la cabeza y observé su rostro ahora sonriente, mi cuerpo se estremeció ante la hermosa expresión del contrario.
Definitivamente quería ver ésa sonrisa plasmada en su rostro por siempre. Sentí que debía hacer lo que sea para que jamás se borrara.
[...]
—¿Bromeas? ¡No puedes!
Taehyung me observó de manera severa; se negaba a que quisiera intentar dar un paso al frente con aquél lindo chico Suga.
—¡Es ilógico!
—Es un fan. Claro que no puedes, Hoseok. ¿Acaso conoces sus intenciones? ¿Qué tal si resulta un fraude e intenta obtener información sobre tí para usarla en tu contra? —Su rostro se contrajo en una sería expresión.
Suspiré.
Meses atrás, Jungkook fué quien a cada movimiento que daba, me advertía sobre su peligro transformando todo en algo negativo.
Vamos, Tae tenía completa razón, pero estaba seguro de que Suga no era ése tipo de persona; apostaba por él.Era una ternura, quizás si se lo presentara, cambiaría de opinión.
—Puedo confirmar que realmente no es malo —Levanté mi móvil mostrando su contacto—. Tiene mi número y jamás ha ocurrido algo mal-...
—¡¿Le diste tu número?!
—¿Quién dió su número? —Se apareció Jimin por nuestra mesa.
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soy tu admirador nro.1° ✦.ꜜ叛逆 yoonseok
Fiksi Penggemar◡̈ -㌧ donde hoseok conoce a un chico que dice ser su admirador nro.1°. wr;; obsesión