Todo comienza con Josta, un pequeño demonio nacido en un pueblo llamado «Kordan», que al morir sus padres por un extraño accidente quedó al cuidado de su hermana mayor, Magy, su única compañía y familia desde que sucedió ese desafortunado acontecimiento. Excluyendo ese fatídico evento, podría decirse que tuvo una infancia con relativa normalidad... sin embargo, Josta no era del todo normal, ya que él había nacido con un casi nulo poder mágico, lo que lo hacía muy débil a comparación con el resto. De todas formas, esto no impidió que Josta tuviese una única habilidad: «bloqueo», una habilidad muy básica que él sabía usar en su máxima expresión, haciéndolo casi inmune al daño, pero que, gracias a su bajo poder mágico, quedaba terriblemente cansado después de usarla una vez en toda su capacidad y poder.La personalidad de Josta se basaba en una seria y poco expresiva, ya que él prefería leer un libro antes que socializar, lo que dio como resultado una gran timidez y problemas para interactuar con otras personas que no fueran su hermana. Aunque por fuera pudiera parecer frío e indiferente todo el tiempo, siempre disfrutaría mucho de los chistes malos, escuchar a los demás y compartir sus conocimientos con quien esté dispuesto a escucharlo. Y era que a veces transmitía un aura de severidad y extrema rectitud, pues con esa habitual expresión de seriedad plasmada en su rostro y su particular gusto por la indumentaria elegante, normalmente conformada de un pulcro traje negro, camisa blanca, chaleco, corbata, y zapatos negros de charol, no daba imagen de ser alguien con el que podrías relacionarte con facilidad.
Vivía en una gran casa cerca del bosque «Trilo» y a unos cuantos pasos del cementerio del pueblo, por esto mismo las personas creían que era el sepulturero del lugar y siempre que alguien moría era a él a quien buscaban para darle un digno entierro al cadáver. A Josta esto no le molestaba, de hecho, lo veía como un buen oficio para él, ya que con de esa manera ayudaba a su hermana con el dinero.
Ya que Josta fue débil desde siempre, durante su etapa en la escuela falló toda prueba que incluyera poder mágico, lo que hizo que no destacase en la mayoría de las pruebas ya que en éstas se requería de un poder mágico al menos decente, cosa que él no tenía, y era por esa misma razón que se sentía casi inútil, lo que contribuyó a su personalidad apagada y fría, a veces demasiado pesimista. Pero ese hecho no lo detuvo en las clases de combate con armas, pues si bien no era el más dotado, quedó como uno de los diez mejores, siendo su lugar el décimo puesto; una posición baja pero digna de reconocimiento tomando en cuenta su lamentable debilidad, con la que tenía que lidiar día a día, también añadiendo que fue un puesto que pudo lograr con arduo y exhaustivo entrenamiento. Josta se caracterizó por esforzarse el doble y sobre-exigirse con la finalidad de poder sobresalir entre sus compañeros, entrenando una cantidad considerable de tiempo durante y después de cada clase, más del que cualquiera estaría dispuesto a hacerlo, y siempre supo cómo usar bastante bien la estrategia para lidiar contra sus oponentes en los combates escolares organizados por la institución. Del mismo modo, tuvo un buen desempeño en la clase de alquimia, debido a que siempre leía los libros de ciencia, historia, medicina, y fantasía como pasatiempo; sus pociones eran buenas pero no las mejores, éstas requerían ser imbuidas con magia, además de seguir el procedimiento mágico para que fueran efectivas... magia que el no poseía, y que por consecuente, lo dejaba en desventaja frente al resto.Como Josta no socializaba, era común pensar que era raro, y debido a su timidez le era casi imposible sacar un tema de conversación, sin mencionar que ser uno de los pocos demonios que quedaban, además de emanar un aura lúgubre no ayudaba a ser sociable. Sin embargo, a Josta siempre le gustó ayudar a la gente, de modo que en toda ocasión llevaba consigo unas pociones de curación instantánea hechas por él y finalizadas con la ayuda del poder mágico de su hermana. Si veía a alguien herido en el entrenamiento, él mismo lo curaba con ellas, lo que hizo que sus compañeros le tuvieran algo de confianza, y así, a pesar de ser tímido y distante, ganara unos cuantos amigos en lo que restaba de su período escolar; pero, el tiempo siempre a de pasar y por ende, se vio forzado a despedirse de sus amistades, porque justo después de la graduación estos se fueron de la academia, tomando cada quien su rumbo y Josta no los volvió a ver, quedando en completa soledad otra vez.
El tiempo transcurrió, y ahora un crecido Josta sin nada que hacer se decidía por ir a la biblioteca para leer un libro. La biblioteca era uno de sus lugares favoritos por ser muy espacioso, silencioso, tranquilo y lleno de libros interesantes que esperaban a ser leídos por él, además de que en esa librería trabajaba su hermana, lo que él consideraba conveniente ya que si se aburría podía ir a hablar con ella un rato.
En ese sitio Josta conoció a Hans, un arqueólogo y explorador, que fue como un mentor para él, logrando cautivarlo con sus muchos conocimientos sobre el mundo y la raza demoniaca. Gracias a sus enseñanzas Josta supo que los demonios eran capaces de vivir cientos de años y que poseían muy buenas habilidades mágicas, así dándole un golpe bajo a su ya destrozada autoestima. Josta, reconociendo el vasto conocimiento que tenía su mentor sobre el mundo y las razas, le preguntó si sabía el por qué él poseía un poder mágico casi nulo siendo un demonio; ante esto, Hans quedó atónito, ya que era la primera vez que había oído algo así. Cuando Josta le mostró su poco poder Hans le dijo que nunca había pasado algo como esto, ni que habían registros de ningún demonio mas débil que un humano, siendo Josta el primer demonio más débil en ese mundo. Al momento de escuchar eso, Josta se lo tomó con bastante calma, de antemano sabía que era el más débil y por tanto dejó de molestarle hace años.Por lo muy curioso y poco común del tema, Hans le preguntó si éste sufría de mala suerte con constancia, a lo que Josta contestó que la mayoría de las veces que estaba con su hermana todo era normal, pero que cuando estaba solo tendía a tropezarse, golpearse, perderse, entre otros muchos eventos desafortunados. Y ese fue el dato que necesitaba Hans para plantearse una hipótesis de lo que podría estarle pasando; éste le contó, que todas las criaturas del mundo tenían a un ser que decidía su destino por encima de ellas, alguien que manejaba sus vidas y que la mayoría de las veces actuaba como un juez imparcial, pero que éste no tenía mucho control en el destino o la fortuna de los demonios gracias a sus grandes habilidades mágicas; por lo tanto, Josta al carecer incluso de habilidades mágicas promedio para un humano, era muy susceptible a tener demasiada mala suerte.
Josta se sorprendió ante aquel relato, era algo increíble de escuchar y también de creer, no cualquiera lo escucharía con tanta atención como él mismo lo hacía. Otro ya lo hubiese tildado de loco por afirmar que un ser más allá del entendimiento de cualquiera pudiera ser capaz de controlar algo tan intangible e improbable como lo era la suerte o el destino de las personas y el resto de criaturas; pero, Josta sabiendo que se trataba de Hans, alguien con tanta sabiduría y madurez, además, de ser consciente de todos los sucesos fantásticos que ocurrían habitualmente en su mundo, le daba motivos a Josta para darle credibilidad. Le preguntó si existía alguna forma de alejar esa mala suerte de su persona, y Hans, con rostro serio, le responde que la única manera para hacerlo sería destruyendo al ser que controla el destino, pero le advierte que todavía no era el momento para siquiera pensar en hacer algo como eso, añadiendo después:-Todo aquel que intente cambiar su destino sólo encontrará la muerte.
Luego de esas palabras, Josta quedó algo desmotivado, tendría que lidiar con su mala suerte el resto de su vida y no había nada que pudiera hacer para remediarlo sin comprometer su propia existencia. Hans, que notó su desaire ante la situación, le comentó que en algún momento le avisaría el cómo y en qué circunstancias sería propicio ir a cambiar el destino, después de todo él sabía que Josta tenía un arma secreta, algo que nadie más tenía o podría tener, pero le aclaró que mientras que siga habiendo paz habría que esperar.
Dejando todo claro, Josta regresó a casa a hacer la cena y relajarse, esperando el "momento" establecido por su mentor.

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Demonic Journey
Narrativa generaleCada cosa tiene un comienzo, ya sea algo bueno o malo. Así mismo, cada ser viviente, enfermedad, cura, afección o condición tuvo un inicio o alguien que se bautizó como "el ser primigenio". En este mundo, las artes mágicas cobran una gran importanci...