De Padres e Hijos [TERMINADA]

Capítulo 3

Gandalf regresó por la noche, con una sonrisa en su rostro.

"Los elfos nos están esperando; nos quedaremos aquí hasta mañana". Dijo Gandalf y Bilbo asintió con cansancio. Beorn ya le había hecho una cama improvisada cerca de la chimenea; Bilbo acababa de esperar a que Gandalf regresara.

"¿Puedes ayudarme un poco? No creo que el sueño llegue ..." dijo Bilbo. Gandalf asintió y cuando Bilbo se acostó, puso la punta del dedo índice en la frente de Bilbo. Bilbo tardó solo unos segundos en quedarse dormido.

Cuando Bilbo se despertó a la mañana siguiente, ya había pasado el amanecer. Gandalf y Beorn estaban sentados a la mesa, almorzando.

"¡Buenos días, conejo!" Beorn dijo y se movió un poco para que Bilbo pudiera sentarse a su lado. Bilbo se frotó los ojos y gruñó en respuesta. Se sentó y comió todo lo que pudo, que no fue tanto. Solo quería irse.

"Cuando hayas terminado, partiremos. Tenemos que darnos prisa, si no recuerdo bien, los embarazos de Hobbit tardan sólo de cinco a seis meses". Gandalf dijo e hizo los preparativos necesarios. Beorn les prestó un caballo enorme, que era el más rápido de todos sus caballos. Bilbo se despidió de Beorn y Beorn dijo: "¡Que nos veamos de nuevo, Conejo! ¡Y asegúrate de llevarte a tu conejito la próxima vez que visites!"

Bilbo sonrió y asintió con la cabeza y Gandalf lo ayudó a subirse a la silla. Se despidieron de Beorn con la mano y tan rápido como pudieron continuaron su viaje.

Aún así, tardaron dos semanas en llegar a Rivendel. El vientre de Bilbo era realmente grande ahora, y apenas podía caminar sin tener dolores de espalda. Cuando atravesaron la puerta de Rivendel, Elrond ya los estaba esperando.

"Bienvenidos mis amigos. Les pediría que descansen y coman, pero me temo que debemos mirar a nuestro amigo Hobbit al principio." Dijo Elrond con su voz melódica. Condujo a Gandalf y Bilbo a través de Rivendel a una pequeña habitación.

"Acuéstate amigo mío. Tienes que relajarte y respirar, mientras yo intento determinar el estado de tu hijo". Elrond dijo y Bilbo hizo lo que le dijeron. Gandalf se sentó a su lado, listo para ayudar si era necesario. Bilbo estaba muy nervioso. ¿Y si algo andaba mal? No sobreviviría a eso. Amaba al pequeño ser dentro de sí mismo, más que a su propia vida.

Elrond se tomó su tiempo y examinó todo muy de cerca. Después de una hora más o menos dijo: "Parece que el niño está bien y creo que no pasará mucho tiempo hasta que nazca. Debo pedirle que se quede hasta que el niño nazca y esté lo suficientemente fuerte para viajar. Entonces puedes regresar a tu casa ".

"Gracias, Lord Elrond. Pero me temo que no tengo un lugar al que pueda llamar hogar. La Comarca tiene demasiados recuerdos para estar cómodos, y los otros Hobbits nunca aceptarían a un niño mitad Hobbit y mitad enano". Dijo Bilbo. Gandalf le había dicho a Elrond quién era el otro padre del hijo de Bilbo, cuando le envió la nota.

"Eres bienvenido a quedarte aquí todo el tiempo que desees, mi joven amigo. Tenemos algunos niños elfos aquí, que estarían muy felices de tener un pequeño medio Hobbit del que cuidar." Elrond sonrió y abrió la puerta para irse. Pero cuando abrió la puerta, dos pequeños elfos entraron directamente en la habitación. Bilbo recordaba tanto a los enanos que en realidad se rió un poco.

"Arwen, Legolas, ¿qué están haciendo ustedes dos aquí?" Preguntó Elrond y se alejó de la puerta. El primero en ponerse de pie era un chico joven, de largo cabello rubio, que parecía una pequeña versión de Thranduil, solo que mucho más agradable.

¡Ese debe ser el príncipe Legolas! Bilbo pensó y vio a la pequeña elfa ponerse de pie. De lo que debe ser Arwen, la hija de Lord Elrond.

"Lo siento padre, pero Legolas y yo vimos llegar a Mithrandir y al Hobbit y teníamos curiosidad". Dijo Arwen y Bilbo la miró con asombro. Su voz era como el sonido de suaves campanas.

"Yo también lo siento, Lord Elrond. Fue idea mía seguir. ¡No volverá a suceder!" Legolas dijo y se inclinó. Cuando volvió a subir, miró a Bilbo con abierta curiosidad. ¡Nunca antes había visto a un Hobbit!

"Está bien. Solo tenían curiosidad". Dijo Gandalf y le sonrió a Legolas. Legolas le devolvió la sonrisa y dijo: "¡Hola Mithrandir! ¡No te he visto en mucho tiempo!"

Gandalf se rió y dijo: "La última vez que pudo haberme visto fue hace tres años, y dudo que recuerde mucho de eso".

Legolas se sonrojó un poco, pero pronto sus ojos encontraron a Bilbo y dijo: "¡Debes ser el Hobbit del que todos hablan!"

"Bilbo Bolsón, a tu servicio, joven príncipe". Bilbo dijo y se inclinó lo mejor que pudo. Pero Legolas simplemente negó con la cabeza y dijo: "Legolas, a su servicio. Por favor, no me llame príncipe, Legolas está bien, Maestro Bolsón".

"Cuando me llamas Bilbo, te llamo Legolas". Bilbo sonrió y estrechó la mano de Legola. También intercambió saludos con Arwen, pero luego se volvió a acostar. Estaba bastante agotado. De repente, sintió un pequeño bulto en su vientre.

"¡Gandalf!" Bilbo jadeó y puso una mano sobre su vientre.

"¿Qué ocurre?" Gandalf preguntó preocupado y corrió al lado de Bilbo. Cuando vio a Bilbo llorando, su ceño se hizo más profundo.

"El bebé ... ¡Simplemente pateó o golpeó, no estoy seguro!" Dijo Bilbo, con una voz tan llena de emoción que Gandalf tuvo que sonreír. Legolas, que estaba a los pies de la cama, se volvió aún más curioso. Nunca había visto a nadie embarazada. Bilbo pudo ver eso, y con una sonrisa vacilante preguntó: "¿Quieres tocar?"

Legolas caminó lentamente alrededor de la cama y con cuidado posó una mano sobre el vientre de Bilbo. Solo unos segundos después, pudo caer un pequeño empujón contra la suya y una sensación de ardor lo inundó. Jadeó y se retiró, con los ojos muy abiertos. Se volvió hacia Elrond y dijo: "¡Lord Elrond, creo que he encontrado al que está destinado a estar a mi lado!"

Bilbo estaba muy confundido y Gandalf, Elrond y Arwen solo miraron a Legolas.

"¡Enséñame tu muñeca!" Exigió Elrond y Legolas corrió a su lado. Elrond empujó la manga de Legolas hacia arriba y miró fijamente el nombre, grabado en la muñeca de Legolas.

"Felicitaciones, Maestro Bolsón. Tendrá un niño". Elrond dijo y sonrió. Bilbo puso una mano sobre su vientre sonriendo y susurró: "¡Frodo!"

°Nota°
Una advertencia justa, Legolas actuará como el hermano mayor protector que todos desean tener hasta que Frodo tenga la edad suficiente