Fᴀᴍɪʟʏ (Wᴀɴɢxɪᴀɴ)_Tʀᴀᴅᴜᴄᴄɪᴏɴ

↪ CAPITULO 9 ↩

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En el camino de regreso a Lotus Pier, Wei Ying se sintio abatido. No abiertamente, pero lo suficiente como para que Lan Wangji lo notara.

Wei Ying estaba desesperado por tener éxito en cambiar su destino para mejor y eso pesaba mucho sobre él. Quizás porque la última vez que fue responsable de proteger a alguien de una muerte segura, los rematentes Wen, murieron a pesar de sus mejores esfuerzos.

Lan Wangji sabía que la lógica no sería suficiente para sofocar la preocupación de Wei Ying, por lo que optó por lo que mejor sabía hacer: predicar con el ejemplo. También estaba preocupado, pero considerablemente menos que su alma gemela y esperaba que su calma actuara como un bálsamo para Wei Ying.

Esperaba que su regreso a Lotus Pier ayudara aún más.

(...)

En Lotus Pier, Lan Xichen ya estaba esperando, convocado por la carta de Lan Wangji sobre su compromiso, con los obsequios apropiados y una delegación completa de personas. Fue muy conveniente, ya que una reunión estratégica inmediata entre los líderes de la secta solo se convocaría a una sesión tan pronto como Wangji y Wuxian se refrescaron después de su viaje.

Con la voz cargada de auto recriminación, Wei Ying comenzó a hablar de su fracaso. Cuando se quedó en silencio, Madame Yu resopló con desdén.

"Pensar que vendería su alma tan fácilmente. No es tan digno de respeto como pensaba".

"Todos desean ser aceptados", dijo el líder de la secta Jiang. Wei Wuxian se puso rígido. La noción era correcta, pero que el líder de la secta Jiang no estuviera de acuerdo con su esposa después de que ella habló no presagiaba nada bueno para la conversación. No era ningún secreto que Madame Yu odiaba cuando él la contradecía, especialmente frente a otras personas.

Especialmente cuando no había aceptación entre los dos. Wei Ying se acercó más a Lan Wangji, quien leyó su incomodidad y, a su vez, se acercó más a él, ofreciéndole su apoyo silencioso.

"Sea como sea", Lan Xichen habló con calma, considerando cuidadosamente en la atmósfera de la habitación, "Wuxian tiene razón. La devoción de Zhao Zhuliu aún puede resultar un factor determinante para acelerar el conflicto que se avecina, en caso de que informara a su maestro y Wen Ruohan decidiera actuar contra nosotros".

"Así que sí les cree", comentó Madam Yu, con los ojos clavados en Lan Xichen, quien lo soportó con gracia y una leve sonrisa.

"No tengo ninguna razón para negarle a mi hermano mi confianza", respondió con calma, llenando el corazón de Lan Wangji con calidez. "Ni Wuxian, para el caso. Ambos son hombres jóvenes de fuerte moral. El concepto de viaje en el tiempo es ciertamente ... extravagante pero ciertos hechos nos llevan a mí y al tío a aceptar que ninguno de los dos mentiría sobre asuntos tan serios como la guerra entre los clanes de cultivo sin estar seguro de su veracidad".

"Wei Ying no es una persona confiable. Tiene una inclinación a portarse mal", dijo Madam Yu con calma, para consternación de todos menos de Wei Ying, quien exhaló suavemente y arqueó la boca en una mueca que casi parecía una sonrisa.

"Aunque no conozco a Wuxian desde hace mucho tiempo", dijo Lan Xichen, sin sonreír, pero persistiendo en el uso familiar del nombre de Wei Wuxian, "me pareció un joven alegre con un gran peso sobre sus hombros. Quizás travieso pero protector sin falta. Creo que llamarlo poco fiable sería una injusticia, Madam.

Madam Yu tarareó pensativa.

"Preferiría morir antes que dejar que Wen Ruohan toque Lotus Pier, o Cloud Recesses para el caso", dijo Wei Ying. "Pero eso haría infeliz a Lan Zhan. El problema real es que, en caso de un ataque, la secta Wen tiene suficiente gente para enviar tanto aquí como a Gusu al mismo tiempo, y Wen Ruohan tiene dos hijos".