—Alto. ¿El abuelo quiso...?
Tal vez esa parte no debía saberla, pero tenía derecho a conocer la verdad, aún y cuando hace algunos años, Lincoln había sido amenazado por Bernard sobre decirle alguna vez eso.
—Hija —le habló Sam—, en ese momento tu abuelo no sabía lo que hacía. Reaccionó por impulso.
—Pero él me ama. Hace un mes me regaló $100 dólares.
—Princesa, tu abuelo... Espera, ¿$100 dólares? Entonces así te pintaste el pelo y te perforaste, jovencita —terminó levemente molesto—. Bien, hablaremos de eso después.
Lina quedó avergonzada de evidenciar a su abuelo. Se supone que no diría nada y que quedaría como un secreto entre ambos. Pero pasado eso, siguió escuchando.
XXX
—Oye, oye viejo. Reacciona —se escuchaba a alguien tratando de hacer reaccionar a Lincoln—.
—Ah... mi... ¿qué...? —Trataba de articular aún sin estar del todo recuperado— ¡Sam!
Al levantarse de inmediato, notó a un chico, más o menos de su edad, junto a él. Era quien trataba de hacerlo reaccionar.
El chico era rubio, vestía una camisa verde y pantalones vaqueros.
—Oye, ¿te encuentras bien?
—Ah, Simon —al notar al hermano de Sam, sintió algo de vergüenza—. ¿Te... ya lo sabes?
Simon no expresó molestia, más tampoco felicidad.
—Sí, lo escuché y vi todo. Es difícil no enterarse de algo así cuando hacen una "fiesta" de la situación.
Lincoln bajo la mirada con vergüenza.
—Oye, lo lamento.
—Pues, honestamente no sé cómo debería sentirme. Pero creo que por lo que vi, ni mi hermana ni tu quieren que hagan eso.
—¡Cierto! ¡Tu hermana! —Gritó cayendo en cuenta de lo acontecido antes de perder la conciencia—. ¿Hace cuánto se fueron? ¿Sabes a dónde?
—Eh, eh... sí. Hace como cinco minutos —respondió el chico apresurado—.
—Debo... debo —se levantó con dificultad con la intención de ir a evitar lo que le querían hacer a Sam—... tengo que evitarlo.
—No estás en condiciones de caminar, además, aún no te digo a donde.
Lincoln se detuvo en la proximidad de la puerta, volteando a ver a Simon con desesperación. También se tocó la zona en la que fue golpeado, encontrando sangre en su mano. Tenía buena parte del rostro cubierta del rojo de esta. Más eso no lo hizo desistir.
—¿Que opción tengo?
—Puedo llevarte —ofreció él, tomando las llaves del auto de su padre—.
—¿Sabes conducir?
—Apenas. Papá me enseñó durante el verano —respondió cerrando su casa y dirigiendo a Lincoln al auto, un clásico VW Sedán—. Dijo que, en caso de emergencia, no dudara en hacer lo que debía. Sube.
Él joven sabía perfectamente a donde habían llevado a Sam, no había otro lugar que no fuera el hospital de su confianza, y aunque no tenía Licencia, tenía la excusa perfecta si algún agente de tránsito lo detenía. Aunque por su nula experiencia, no podía darse el lujo de ir a gran velocidad.
El camino, si bien no fue incómodo, tampoco fue ameno. Había cierta tensión en el ambiente entre los dos, ambos prácticamente de la misma edad y en situaciones tan diferentes.
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Pasado Complicado (TLH)
RomanceDisfruta esta magnifica historia llena de entretenimiento y esta completa