Yo mataría por ti

part 5

....ni siquiera sabía dónde estaba ,todo era muy raro ya que nunca había visto este lugar ,en ese momento se encendieron las luces.
  
  La claridad molestaba mis ojos, al parecer llevaba un buen tiempo con los ojos vendados o no se.

En ese momento apareció aquel chico pelirrojo, me di cuenta de que me encontraba en un sótano, el se acercó a mi.

  Pude notar que tenía un cuchillo en su mano derecha, se sentó frente a mi y se mantuvo observándome unos cuantos minutos que para mi parecían horas.
 
En ese momento se acercó más a mi y comenzó a pasar el cuchillo por mis brazos, cada vez lo hacía con más fuerza y brusquedad dejándome unas marcas en toda la piel.

Trate de gritar pidiendo ayuda pero me di cuenta que mi boca estaba tapada por algo grueso que no supe diferenciar, luego de esto el se marchó dejándome sola un largo tiempo.

  Horas después el regreso y Quito aquello de mi boca y también me desato, me tomó por el brazo y me llevó a una habitación, por el camino pude observar que estaba en una casa que a mi parecer era muy hermosa, el suelo era de una madera bastante clara al igual que las paredes, aquella habitación donde me encontraba era bastante amplia, sus paredes eran de un color lila muy bonito y tenía una encantadora decoración, dedico tomar una ducha y cambiarme con la ropa que aquel pelirrojo había dejado sobre la cama ya que la mía estaba muy sucia y desgarrada como si me hubiera pasado la noche corriendo en un bosque

Después de esto baje las escaleras donde me encontré con lo que parecía ser la sala, el estaba allí y en el momento en el que bajé me miró rápidamente.

-Mmm donde estoy *dije confusa*
-estamos en Panamá *río macabramente*
-jajaja muy gracioso, ya enserio donde estamos
-ya dije que en Panamá *se veía un poco molesto*
-como llegamos aquí *todavía estaba muy confundida*
-eso no importa, no podrás salir de aquí bajo ninguna circunstancia de no ser así tendré que matarte *frunció el ceño*
-No no me matarás *dije cortante*
-ya veremos

Después de oír estas palabras subí a aquella habitación y coloqué las manos en mi rostro, tomé mi teléfono y traté de llamar  a Carol oh enviar un mensaje pero para mi sorpresa al parecer si estábamos fuera del país por que mi teléfono no se encontraba localizable con ninguna línea.

    Al anochecer me acosté tratando de dormir unas horas y me dormí enseguida, pero a mitad de la madrugada mis sueños fueron interrumpidos por el grito de una chica al parecer suplicando por su vida...