Narra alex....Pasaron días desde la muerte de mis padres, ya había pasado su velorio y yo ni siquiera pude asistir, no hubo necesidad de enviarme a un orfanato ya que Carol se hizo responsable de mí.
Ella vivía sola con sus dos hijos mellizos de 5 años Jack y Cody,
aunque yo también era una niña no me agraban los otros niños, siempre pensé que eran un fastidio y sin duda alguna lo son.No he salido de la habitación que me asignó la amiga de mi difunta madre, tampoco he comido nada en días y no paro de llorar ni siquiera me presenté en la escuela en la última semana .
Hoy era martes y no había parado de llover, me encantaba el tiempo lluvioso y pasaba horas observando aquellas gotas de agua desde la ventana.
Sentí dos toques en la puerta de la habitación, era Carol.
-Hola Alex puedo entrar? *preguntó abriendo la puerta*
-Ya estás adentro, qué quieres? *dije fría*
-Primero que todo, estás en mi casa así que te comportas de buena manera, y solo vine a ver si querías comer algo
-A mí no me vengas a decir cómo tengo que hablarte *la observé con resentimiento*
-Sí, sí te digo y es más cada vez que me hables en ese tonito tendrás un castigo.
- Por favor, *reí* conmigo no te van a funcionar tus estúpidas e insignificantes amenazas querida. *dijo Alex irónicamente*
-eres solo una niña ridícula y mal educada *diciendo esto se retiró*
En serio creo que empezamos con mal pie, y en serio se atrevió a amenazarme ? Yo podría parecer solo una niña insignificante de 10 años pero ella no se percata de lo que hay en mi retorcida mente.
Creí que ya era hora de comer algo y salir de esa habitación así que me dirigí al comedor donde se encontraba la rubia y sus dos hijos comiendo.
-Decidiste unirte a nosotros *Habló Carol*
Solo la ignoré y comí un poco de lo que había servido en la mesa, comencé a comer tranquila sin observar a nadie y sentí de nuevo la voz de aquella mujer.
-A mi no me ignores niña estúpida, me parece que mereces un castigo *habló ella*
-No eres digna de mi atención querida *dije aún comiendo*
-Bien, quiero que hoy limpies mi casa y laves la ropa mía y de mis hijos y no dormirás hasta terminar con esto * dijo Carol disgustada*
-Que cres que soy Cenicienta o qué? *dije indignada*
Ella sin responder a mi pregunta solo me indicó donde estaban los utensilios de limpieza y yo acepté, que más iba a hacer , no podía hallarme vulnerable ante ella y su horrible familia y no me quedaba de otra. Yo elaboraría un plan pero ella se tendría que arrepentir de cómo me habló.
Comencé a limpiar con pereza y sin ganas, en definitiva ni siquiera tenía sueño o me encontraba cansada ya que me había pasado días en la habitación acostada, en ese momento mis pensamientos fueron interrumpidos cuando ví a la rubia pasar por delante mío.
-Oh Alex veo que te esmeras, te gusta limpiar? *dijo con una risita entre sus labios*
-Que te pasa, crees que hago esto por amor al arte *comente aún sin mirarla*
-Huy querida creo que no has limpiado bien *diciendo esto arrojó una bebida al suelo que llevaba en sus manos*
Ni siquiera tenía ganas de discutir solo me quedé limpiando y así hice durante 3 meses, ella siempre me ponía castigo y me tenía de criada. Hace un mes había sido mi cumpleaños número 11 y solo me ordenó limpiar pero hoy seria el día en que eso cambiaría, llevaba meses planeando mi venganza y la llevaría a cabo hoy en la noche, en definitiva mis padres me enseñaron a eliminar pequeña basura por un motivo, nada fue en vano.
8:46 PM
Carol ya estaba preparando sus cosas para meterse a la ducha en lo que sus hijos ya dormían y yo supuestamente limpiaba, esperé a que se adentrará a bañarse.
Ya ella se encontraba dentro de la tina tarareando una canción y yo sabía que este era el momento, era hoy o nunca.
Fui hacia el baño y ella me miró raro.
-Que haces aquí niña, no ves que me estoy bañando o lo de inútil te volvió ciega? *cuestionó ella*
Yo solo le dije
- inútilmente acabaré con tu miserable vida.
Diciendo esto tomé una plancha de cabello, la coloqué en la corriente y la lancé a la bañera dejando que Carol se electrocutara quedando ya muerta, observé como de sus fosas nasales corría aquel líquido carmesí y solo salí de ahí.
Ahora le tocaba a los pequeños mellizos, con ellos no gastaría tanto mi tiempo ni dedicación solo tomé un arma que tenía Carol en su caja fuerte y le disparé a los dos en la cabeza mientras dormían.....
ESTÁS LEYENDO
Yo mataría por ti
RomanceJessi Browns era una chica universitaria de 18 años con una vida común y corriente. Su madre murió de leucemia hace tres años por lo cual fue a vivir con su padre Jorge; este, a pesar de quererla mucho, se pasaba la mayor del tiempo en su trabajo...