Capitulo VI

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En una mesa de la biblioteca de la escuela, está sentada Sarah haciendo su tarea y frente a ella está Cameron ojeando un libro de ciencias. 

En cuestión de segundos, Cameron aparta su mirada del libro –el puede jurar que tantas letras le están empezando a provocar un dolor de cabeza– así que inconscientemente fija su atención en la entrada del lugar. 

Cameron levanta sus cejas y sorprendido, susurra—¡Mira quién está aquí!

La chica deja de mirar su cuaderno y gira su cabeza de inmediato, observando a Sofia entrar al lugar. 

Sarah le sonríe con timidez mientras golpea ansiosa el lápiz sobre la mesa. Pero no obtiene respuesta, ni siquiera una mirada por parte de la otra chica, pues Sofia parece estar muy ocupada buscando a alguien más. 

Sofia sólo da pequeños pasos mientras escanea todo el lugar con la mirada, observando persona por persona, pero nada. 

Búsqueda fallida.

—¡Deja de mirarla!—masculla Cameron –casi sonando como un regaño– pero Sarah en su lugar hace exactamente todo lo contrario, ella simplemente no puede dejar de mirarla. 

Por otro lado, Sofia decepcionada por no haber encontrado lo que busca, comienza a caminar hacia la puerta trasera de la biblioteca, pasando por detrás de Cameron. 

El chico gira un poco su cabeza para mirarla por encima del hombro—Parece que no se sentará con nosotros—musita mientras ve a Sofia abandonar el aula.

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La castaña intenta reparar su auto en compañía de Sabrina –no es como que en realidad ella es una experta sobre autos, es por eso que usa de guía un libro que su madre le prestó–, afuera del inmenso patio de su casa. 

Con el capó del vehículo abierto, Sofia está muy concentrada, apretando y aflojando algunas tuercas del interior. 

"Ella está decidida en arreglar su auto para así ya no tener que pedirle prestada la camioneta a su madre."

Sabrina aburrida de estar sentada sólo bebiendo una lata de Coca-Cola y mirar a Sofia, decide encender un pequeño equipo de sonido –de moderna tecnología– que está encima de la mesita al lado de ella, agarra el celular de Sofia (sin preguntar) y lo empareja con el aparato por vía bluetooth. 

En el momento en que Sabrina pone la música a todo volumen, Sofia salta del susto y suelta inconscientemente la herramienta de sus manos.  Make it Bum Dem de Skrillex.

—¡Comencemos la fiesta!—grita animada, se levanta y comienza a bailar como robot mientras Sofia en silencio la mira con fastidio. 

—Es hora de divertirnos, ¡Ven aquí!—la llama con su mano. 

Sofia suspira, se agacha para recoger la herramienta del suelo y vuelve a fijar su atención en el auto. 

—¿Podrías bajar el volumen un poco, Sabs?—se queja Sofia, volviendo a apretar tuercas—Algunas intentamos trabajar.

Sofia ni siquiera sabe lo que está haciendo para reparar su auto y eso le molesta aún más.  

Sabrina deja de bailar y arruga su cara—¡Eres una aguafiestas!—reprocha, caminando hacia el equipo de sonido. 

Sofia ríe. 

—¡Veamos que más tenemos aquí!—habla de nuevo, bajándole un poco el volumen y pasa a la siguiente canción. 

Sofia finalmente termina con las tuercas y camina hacia el otro lado del vehículo. 

—Puedo aceptar que me obligues a bajar el volumen, pero ¿Qué demonios es eso?—cuestiona Sabrina frunciendo el ceño tan pronto escucha una canción lenta sonar a través de los parlantes y se sienta nuevamente en la silla, aburrida y confundida. 

Nuestro amor es como el vientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora