Recuerda #2 °Yeonjun Y Tú°

LII

CAPÍTULO FINAL

*Narra ____*

-Buenos días - saludé entrando a la cocina y viendo a Lucifer sirviendo el desayuno. Me agrada que él siga siendo quien haga las comidas de todos los días.

-Hola - saludó sin mirarme.

Cuando estuve sentada frente suyo me examinó con demasiada atención, tanta que llegó a inquietarme un poco. Lo miré buscando una respuesta por parte suya, pero no hizo más que mantenerse en silencio.

-¿Pasó algo? - inquirí esperando a que deje de mirarme.

-¿No lo sabes? Ah, bueno, entonces debería mantenerme en silencio, supongo - murmuró mirando su taza de café.

-¿Saber qué? Habla ya - insistí mientras él negaba lentamente -. Dime...

-¡No puedo! Creí que ya te lo habían dicho... - miró mis manos -, aunque ya estoy seguro de que no fue así - entrecerró los ojos -. Llega temprano luego de tus clases, no tardes.

Odio que sea así.

Luego de terminar mi desayuno ordené mi habitación, salí a la Universidad y pasé mis clases normalmente. Jojo y Booksoo seguían juntos, ambos se veían bien como pareja, pero en estos últimos dos años no hablamos demasiado como antes. Estaba regresando al edificio, cuando me topé con el portero en la puerta del edificio, llevaba un gran ramo de flores mientras abría la puerta.

-Buenas tardes - saludé sujetando la puerta para que pueda pasar.

-¡Ah, señorita! Buenas tardes - exclamó sonriendo -. Justo a usted iba a ir a buscarla, este ramo llegó para usted - me extendió el ramo.

No entendía, pero lo tomé. 

-Gracias - respondí y él portero sonrió.

Subí hasta el departamento donde pude dejar todas mis cosas sobre el sillón y puse el ramo sobre la mesa del comedor y lo observé. Noté que tenía una nota entre las rosas blancas. La tomé rápidamente y la abrí.

____:
¿Quieres verme en mi edificio? Quiero verte ♡.

Sonreí. Dejé el ramo en mi habitación y salí del departamento hacia el edificio de Yeonjun. Al llegar el portero me detuvo.

Otra nota, esta vez fue en un globo con forma de corazón.

Linda~. ¿Me buscas en el lugar en el que trabajo?
P.D. Fíjate en los arbustos. ☆

Vaya, ¿a qué juegas?

Fui a la empresa y busqué en los arbustos, claro que de manera disimulada, pues me verían como loca si husmeaba en los arbustos.

Hey!
Es la última, lo prometo. Ven donde nos conocimos. Si recuerdas, ¿no? ♡

¿Cómo olvidarlo? Me gradué de ese colegio mientras Yeonjun estaba en coma en un hospital. 

Fui al colegio y vi una silueta alta en la entrada principal. No había nadie más que aquella silueta, ni un alma se atrevía a pasar por ahí. Me acerqué lentamente algo dudosa. Al estar más cerca la silueta se hacía más nítida al mismo tiempo que notaba una hermosa sonrisa en el rostro de aquel chico tan especial para mí. Sonreí también hasta llegar cerca suyo y estar, al fin, delante de él. 

-Hola - saludé en un susurro. 

-Hola - respondió acercándose a mí. 

-¿Por cuánto tiempo estuviste aquí? - inquirí teniéndolo ya demasiado cerca. 

-No mucho... No tardaste demasiado, ¿sabes? - respondió sin dejar de sonreír -. Me encanta poder verte otra vez - murmuró sobre mis labios uniendo los míos con los suyos en un tierno beso. 

-A mí también - respondí al separarnos -. Me tomó por sorpresa todo lo que hiciste, ¿por qué fue? 

Se alejó de mí dando una vuelta sobre su eje, parecía nervioso. No entendía, solo lo miraba atenta. Se veía tan bien con la luz del sol encima suyo. 

-Pasamos por mucho y lo sabes - comenzó diciendo luego de un rato -, no era nadie cuando me conociste, pero al ver que me hablabas pude saber que estaría bien, pues no te importaba quienes éramos. Tu mirada bicolor fue lo que me encantó desde el primer día en que te vi, nunca lo olvido. Pero fue difícil desde lo que te pasó. Fue horrible, en serio - sonrió débilmente -. No salías de mi mente, aunque no lo creas, ni un instante. Creí que iba a poder superarte, tenía que hacerlo porque no tenía otra alternativa. Pero me volví débil otra vez al verte de nuevo en el fanmeeting - recordé ese momento entonces. Vaya, me arrepiento de haberle arrancado una parte al póster... -. ¿Sabes me felicidad al verte otra vez? Creí que era una ilusión, solo un estúpido juego de mi dolido corazón, pero no fue así. ¡Eras tú al final de todo! - me señaló -. Sí recuerdas lo que te dije aquel día en el que fuimos al río Han con los chicos, ¿verdad? - inquirió cerca mío. Asentí lentamente -. En ese momento cometí un error del que luego me arrepentí, no pasamos de ser amigos esa vez, pero ahora puedo tenerte conmigo y no quiero que me dejes nunca más - pegó su frente con la mía y, por inercia, cerré mis ojos sintiendo una increíble paz dentro mío -. No te separes de mí nunca, te lo ruego - murmuró. 

Estuve en silencio, me sentía nerviosa y alegre al mismo tiempo. Tenía ganas de lanzarme sobre él y decirle que no lo dejaría nunca más, pero me sentí atrapada entre sus manos que rodeaban mi cintura. Abrí los ojos lentamente y lo miré directamente a los suyos, sonreí. 

-No me separaré solo si tú prometes no separarte también - murmuré haciendo que él sonría para luego asentir -. ¿Eso era lo que tenías que decirme? 

-De hecho, falta algo - separó su frente de la mía -. ¿Quisieras darme tu mano? - extendió la suya. 

Los nervios me invadieron más suponiendo lo que iba a pasar, aunque quizá haya sido solo mi imaginación... Extendí mi mano hasta la suya sintiéndola hermosamente cálida a comparación con la mía. Mis latidos estaban descontrolados y mis mejillas comenzaban a ponerse rojas. No miré a Yeonjun en ningún momento, solo mi mano fijamente mientras él deslizaba un anillo hermoso en uno de mis dedos. Me sentí desvanecer en ese instante. Mis ojos se cristalizaron y creí que podría llorar en cualquier momento. 

-Lee ____ - llamó mi nombre haciendo que lo mire -, ¿te casarías conmigo? - sonrió. 

Pareció una eternidad, como si el tiempo se hubiera detenido. Quizá así fue, pues me quedé observando sus ojos detenidamente por lo que claramente fueron segundos. Sonreí haciendo que algunas lágrimas cayeran por mis mejillas y bajando la cabeza. Solté la mano de Yeonjun para abrazarme a su cuello y asentir miles de veces. Las palabras no salían de mi garganta, pero supe que Yeonjun había entendido porque correspondió con el abrazo apegándome contra su tibio cuerpo. 

-Me haces la persona más feliz del mundo, Choi Yeonjun - dije al fin cuando pude hablar. 

-Y tú me haces el hombre más afortunado del mundo, Lee ____ - respondió en un suave murmullo en mi oído. 

Y fue ahí que vi a ese tierno chico de hace muchos años atrás. Reviví aquel momento en el río Han cuando, como ahora, me pedía que no me fuera de su lado; y yo, sin vacilar ni nada, le respondí que no lo haría: le hice una promesa y ahora sí pienso cumplirla... 

-Y como últimas noticias de hoy, Choi Yeonjun, miembro de la famosa agrupación TXT ha confirmado que muy pronto celebrará su matrimonio. No sabemos de qué chica se trata, no sabemos si es famosa, ni siquiera tenemos sus fotos, pero sí sabemos que pronto esa afortunada mujer será la esposa oficial de Choi Yeonjun. Felicidades por parte de MOA, estoy segura, y que pueda vivir felizmente al lado de su esposa 

FIN