02.

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"Mis conversaciones favoritas"

Ambos sabíamos que la madrugada era nuestras, mientras los demás descansaban de un día agotador, ambos solamente nos dedicábamos a enviarnos mensajes de texto preguntándonos nuestro día, aun que lo hayamos pasado juntos.

Aunque nos hayamos conocido hace unos meses, ambos sentíamos que nos conocíamos de toda la vida, pero había unas cosas que me impedían decirle lo que siento por él, como por ejemplo que es el novio de mi ex mejor amiga.

¿No te quedaras hasta la media noche?.

— Llegaras tarde cariño — dice mi madre.

Coloco mi mochila en mi hombro para bajar, tenía clases, no podía descuidar mis clases, no cuando estaba a unas semanas de salir de la universidad, mi penúltimo año.

— ¿Todo bien? — asiento mientras tomo una manzana — Emma...

Suelto un suspiro para acercarme a ella y besar su mejilla.

— Todo bien mamá.

Ella asiente mientras se sienta con su taza de café, tomo mi cartera para salir de casa, cierro la puerta detrás de mi para tomar aire, miro mi reloj, no llegaría tarde si iba caminando.

— Buen día Emma.

Subo mi mirada al escuchar esa voz, sonríe inconscientemente, él baja de su auto para acercarse a mi, al tenerme enfrente él se inclina para besar mi mejilla.

Como desearía que ese beso sea en mis labios.

Sacudo levemente mi cabeza para sonreírle.

— Buen día Diego ¿Cómo estas?.

— Increíble, más ahora que te veo.

Demonios era tan dulce.

— ¿Ya vas por Ivanna?.

— Hoy no ira, así que pensé ¿Por qué no venir por mi mejor amiga?.

— Claro.

Hago el gran esfuerzo por sonreir, odiaba a su novia, me odiaba a mi misma por no decirle lo que sentía.

Pero es que no quería perder sus conversaciones de madrugada, eran sus favoritas.

Él me guía hasta su auto para abrir la puerta del copiloto, quito mi mochila de mis hombros para subir, coloco mi mochila en mis piernas, saco mi celular que vibraba, Diego me sonrie entrando al auto.

— ¿Sabes? Ayer me dormí a los minutos que me dijiste que te irías a dormir, una conversación de madrugada más que es mi favorita.

— Todas son mis favoritas.

Digo mientras el enciende el auto, enciendo mi celular para ver los mensajes que le habían llegado.

"¡Adivina quien no hizo la tarea de ingles! ¿Podria usted señorita darme copia?"

Suelto una risita al leer el texto, empiezo a teclear un nuevo mensaje.

"Empezaré a cobrarte con un café todas las tareas que te he pasado, y si te dare copia en la segunda hora, nos vemos"

Envío el mensaje a Sebastián.

— Me has cambiado, lo sabia.

Subo la mirada al escuchar a Diego.

— ¿Qué? No.

— Lo haces, ahora te ríes con el celular, se supone que yo soy el único que te debería de hacer reír con un mensaje de texto.

— Diego, por favor, no, simplemente era Sebastián.

Levanto el aparato, él frunce su ceño.

— Córdova es un idiota.

— Tú eres un idiota creyendo que te cambio.

Ambos sonreímos.

— No quiero perder a mi compañera de madrugada.

Mi corazón se encoje, no me perdería nunca, lo quería mucho, tal vez no como él piensa, pero lo quería, y lo quería mucho.

Podría haber un tercera guerra mundial afuera y yo solo quisiera estar a su lado.

Suelto un suspiro para girar mi mirada hacia enfrente, visualizo la entrada de la universidad, y es acá en donde nos separábamos, el estaría con sus amigos y hermano, que por cierto era uno de mis mejores amigos, había conocido a Diego por Mauro.

— Oye.

— ¿Qué pasa?.

El estaciona su auto, se gira hacia mi.

— Olvídalo, te iba a hacer una broma que no estaría hoy a media noche, pero, eres tú ¿Cómo cambiaria mis madrugadas contigo?.

Rio.

— Pasa buen día Diego.

— Igual tu pequeña.

Bajo del auto con una sonrisa en mis labios, camino por todo el estacionamiento, me giro hacia Diego para hablarle de nuevo, pero este ya estaba alrededor sus amigos y amigas, suelto un suspiro.

Y aquí iba de nuevo, coloco mis audífonos, cierro los ojos al escuchar "Volví" sonar, amaba la canción, muevo mi cabeza al ritmo de la música, demonios.

Niego al escuchar esa voz, quito un audífono, el pasa su brazo alrededor de mis hombros para atraerme hacia él.

— ¿Cómo estas linda? — dice y acto seguido, veo un vaso de café helado frente mío — quizá esto cubra la deuda de esta mañana.

El empieza a reir.

Le sonrió, tomó el café y camino hacia mi primer clase, siento los pasos de Sebastián detrás de mi. Sebastián no era mi amigo, solo un conocido con quien compartia clases, y por ende él quería que le diera copia de las tareas.

Me agradaba, pero no era mi amigo.

— ¿Ya te enteraste? — giro hacia el, alzo una ceja, ¿De que no me había enterado?.

— ¿Qué paso?.

— Los...

Deja su frase en el aire al ser interrumpido.

— Buenos días — saluda Frida acercándose a nosotros, sonrió— ¡A que no adivinas quien tendrá una cita con Paulo!.

— ¿La chica de primer año? —bromeo.

— Oh cállate.

— Es broma, obvio tú.

Frida y yo reímos.

Sebastián hace una mueca, él hace una seña con su cabeza en forma de despedida para pasar al lado nuestro y retirarse.

— Uh, no me cae bien, no deberías de hablarle, tampoco a Diego le agrada.

— Ni a Diego, Mauro, Paulo, Edson,  mejor dicho a nadie de ellos — río —¿Por qué?.

Ella se encoje de hombro restándole importancia.

— En fin, ¿Quieres ir en la tarde a casa de Mauro y Diego?, no sé si ya te lo dijeron pero ya sabes, veremos una película todos, menos la zorra de novia que tiene Diego, Ivanna — esto último lo dice en un tono burlón — solo los chicos tu y yo, ¿Qué dices?.

Sonrió.

— Te veo en la tarde.

Ella pega un brinco de la emoción para tirarse a abrazarme.

— Te quiero Emma, nos vemos.

Ella se separa de mi para caminar por todo el pasillo, se despide de mi por ultima vez con su mano para entrar a su respectiva clase. 

Btw, quisiera decirles que me hace muy feliz que voten y comenten 🥰 y me hace más feliz ver qué hay más niñas simp de Dieguito JAJAJAJA. 
Las tqm 🤍

AM | diego lainez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora